Entre las pocas opciones está la certificación de origen, señala

México, con las manos atadas para combatir la biopiratería: experto

ANGELICA ENCISO L.

Aunque se ha denunciado ya que especies como el tepezcohuite de Chiapas, planta utilizada por los mayas contra las quemaduras, han sido patentadas por empresas extranjeras para su comercialización luego de haber sido sustraídas del país, en México aún no existe la forma de controlar la salida del material biológico, sostuvo Ernesto Enkerlin, presidente de la Comisión Nacional de Areas Naturales Protegidas.

De México, el pozol, también originario de Chiapas, está patentado por la Universidad de Minnesota; los nabos negros de la Montaña de Guerrero se registraron en España, el nopal en Italia y el frijol enola en Estados Unidos.

Estos son casos de biopiratería, práctica de empresas que utilizan ilegalmente la diversidad biológica de países en desarrollo, así como los conocimientos colectivos de los pueblos indígenas, para ofrecer productos y servicios que se explotan comercialmente sin la autorización de sus creadores.

Al respecto, Enkerlin dijo que controlar la biopiratería es casi imposible, porque si alguien descubre un hongo que pudiera tener una propiedad curativa, puede llevarse unas esporas en un papel y germinarlas en cualquier parte del mundo. "Es posible sacar una poda de una planta y en un mes ya la reprodujeron", agregó. Mencionó que regular esta actividad es casi imposible, pero lo que sí se puede hacer es la certificación de origen. En este caso, si se llevan algún material que pertenece a México, es posible demostrar que es material genético nacional y se puede exigir el pago de regalías o la compensación.

Agregó que no se tiene identificada alguna organización ambientalista que se lleve vida silvestre, pero en casos como la estadunidense Conservación Internacional, que invierte en la protección ambiental en la reserva de la biosfera de Montes Azules, si realmente quisiera llevarse material genético le bastaría contratar a alguien que lo hiciera por ellos.