México D.F. Miércoles 7 de julio de 2004
La CIA ocultó información de que
Irak había abandonado ese programa armamentista
Tal vez nunca serán encontradas las armas de
Hussein, acepta Blair
Defiende la relación especial con Washington
y califica de "anomalía" la prisión de Guantánamo
El ex gobernante iraquí "representaba una amenaza;
protegía a terroristas", insiste el presidente Bush
THE INDEPENDENT, REUTERS, DPA Y AFP
Londres, 6 de julio. "Sabemos que Saddam Hussein
tenía armas de destrucción masiva, pero no las hemos encontrado
y puede que no las encontremos", admitió hoy, por primera vez, el
primer ministro británico, Tony Blair, al referirse a las presuntas
armas biológicas y químicas iraquíes, el principal
motivo que llevó a Estados Unidos y Gran Bretaña a invadir
Irak el 20 de marzo de 2003.
Al hablar ante una comisión de la Cámara
de los Comunes (Parlamento), el gobernante señaló que "tengo
que aceptar que no las he-mos encontrado, que podríamos no encontrarlas".
Hasta ahora, el primer ministro británico, fiel
aliado de Estados Unidos, se había mostrado convencido de que las
armas serían halladas y justificó la guerra por la necesidad
de destruirlas.
"Estaba seguro que las encontraríamos. Estaba seguro
que la misión de inspectores las encontraría, porque todas
las pruebas de las que disponíamos apuntaban a que existían",
afirmó.
"Pasar de un extremo a otro y decir que Hussein no representaba
una amenaza sería un error. Puede que las armas estén ocultas,
o que hayan sido destruidas", agregó.
Al
ser preguntado si ofrecería disculpas a la opinión pública
internacional y de su país por ir a la guerra con argumentos erró-neos,
Blair respondió: "Nos deshicimos de Saddam Hussein y él era
un tirano".
En septiembre de 2002, un in-forme gubernamental afirmaba
que Hussein disponía de esas ar-mas y que podían ser activadas
en cuestión de 45 minutos.
Más de un año después del derrocamiento
del líder iraquí, todavía no se han encontrado ese
armamento, y los índices de aprobación de Blair han caído
durante ese mismo periodo.
La comisión ante la que declaró Blair se
ocupa de examinar los procesos que condujeron al go-bierno a afirmar que
Irak poseía armas de destrucción masiva, y emitirá
sus conclusiones el próximo 14 de julio.
La investigación, dirigida por Robin Butler, podría
encausar a los jefes de los servicios de inteligencia británicos
por los errores en la evaluación del arsenal iraquí, reveló
el Sunday Times.
Asimismo, Blair señaló que Gran Bretaña
no debe avergonzarse de tener una relación especial con Estados
Unidos: "Al final, creo que es importante para nosotros porque compartimos
sus valores y puntos de vista de que la mejor se-guridad que tenemos es
la extensión de la libertad, democracia y justicia en todo el mundo".
Blair también se refirió al tema de la prisión
de la base naval de Guantánamo, Cuba, donde están recluidos
desde finales de 2001 unos 660 presos presuntamente combatientes talibanes
y miembros de Al Qaeda, sin que hasta ahora se les haya realizado juicio.
El primer ministro dijo que la prisión es una "anomalía"
que de-be cesar, al tiempo que confirmó que pidió al presidente
estadunidense, George W. Bush, que libere a los cuatro británicos
que aún permanecen encarcelados.
No obstante, Blair agregó que Washington sigue
insistiendo en que el gobierno británico debe ga-rantizar que los
cuatro prisioneros no serán una amenaza, ni para Gran Bretaña
ni para el mundo.
"La respuesta estadunidense ha sido constante. A la postre,
si los requisitos del juicio no satisfacen nuestras normas regresarán,
aunque debemos asegurarnos de que no serán una amenaza ni para este
país ni para otra parte del mundo", insistió el primer ministro
laborista, quien es fuertemente cuestionado por sus compatriotas, según
sondeos de opinión.
Por su parte, Bush reiteró que Hussein representaba
una amenaza, al ser interrogado sobre el he-cho de que no se encontró
ningún arma de destrucción masiva.
"Sé que Hussein representaba una amenaza. Era una
amenaza para sus vecinos, para los iraquíes, protegía a terroristas",
afirmó el presidente en la Casa Blanca.
Por lo pronto, la Agencia Central de Inteligencia (CIA)
no le dio a Bush antes de la guerra contra Irak información de familiares
de científicos iraquíes que indicaban que Bagdad había
abandonado su programa de armas de destrucción masiva, informó
el New York Ti-mes, en su edición digital.
Citando a funcionarios que pi-dieron el anonimato, el
rotativo señaló la existencia de un programa secreto de la
CIA de entrevistas con familiares de científicos -cu-yos resultados
no se le entregaron a Bush o a otros altos funcionarios-, que fue descubierto
por un comité de inteligencia del Senado.
El comité investigaba el manejo de la información
de inteligencia previo a la guerra, una vez que no se descubrieron los
supuestos arsenales de armas que Bush utilizó para justificar la
invasión.
El informe, que debe ser publicado esta semana, tendrá
probablemente serias críticas para la CIA y sus directivos por no
reconocer que las pruebas en su poder no justificaban que Hussein tenía
armas ilícitas, refirió el Times.
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