Propondrá en Italia medidas para proteger especies en riesgo

México ratificará en reunión mundial su desacuerdo con la caza de ballenas

ANGELICA ENCISO L.

En la 56 reunión de la Comisión Ballenera Internacional (CBI) México mantendrá su oposición a la caza de ballenas hasta que se acepte un esquema que incluya la presencia de observadores, el análisis del ADN de los ejemplares capturados para determinar que no son especies en extinción y la prohibición de esta práctica en santuarios.

A estos planteamientos se oponen países como Japón e Islandia, que promueven la cacería de las ballenas, y se prevé que éste sea el principal tema de debate en la reunión que comienza el 12 de julio en Sorrento, Italia, informó Exequiel Ezcurra, presidente del Instituto Nacional de Ecología (INE). Se estima que ocho de las 11 especies de cetáceos que hay en el mundo están en riesgo de extinción.

El funcionario explicó que Japón presentará una vez más la propuesta de que el voto de las naciones que forman parte de la CBI sea secreto, con el propósito de promover la cacería de los mamíferos marinos, a lo cual se opondrá México. Detalló que la posición del país será que las naciones se hagan responsables de su decisión en un asunto tan importante como éste, por lo que el voto debe ser público.

En el foro de consulta nacional sobre ballenas, donde se acordó con organizaciones no gubernamentales, legisladores y gobierno la posición que los representantes mexicanos llevarán a la reunión internacional, se señaló que no es oportuno establecer las cuotas de caza mientras no se logre un esquema de manejo que incluya los siguientes puntos: una base de datos de ADN de los ejemplares capturados, para demostrar que se trata de la variedad minke; que haya observadores en las embarcaciones y en los puertos de arribo de los productos capturados, y que este programa sea financiado por los países que promueven la caza.

Asimismo se demandará el respeto a los santuarios ya establecidos, y no estaría a discusión la caza en esas zonas, por lo que debe haber respeto absoluto a cuotas y especies establecidas. El especialista mencionó que en estos puntos no ha habido acuerdos, porque Japón e Islandia se oponen a los observadores y rechazan someterse a fiscalización.

Ezcurra precisó que este año se cumplen 10 del santuario ballenero del mar Austral, sobre lo cual se hará una revisión, porque naciones que se oponen a la creación de estos mecanismos de protección propondrán su derogación, mientras los países que los apoyan, como México, plantearán que se mantenga.

Asimismo, agregó, están los planteamientos de Brasil, concerniente a establecer un santuario en el Atlántico sur, y de Australia en el Pacífico sur, cada uno de ellos cerca de sus aguas territoriales.