El resto reprueba petición e intenciones de la PGR

AN, única fuerza política que apuesta al desafuero

Alerta la oposición sobre el peligro de ingobernabilidad

La solicitud de la Procuraduría General de la República (PGR) a la Cámara de Diputados para desaforar al jefe del Gobierno del Distrito Federal (GDF), Andrés Manuel López Obrador, sólo recibió el apoyo del PAN, porque el resto de las fuerzas políticas y aun miembros de la Iglesia reprobaron la medida, al considerar que mete al país a una mayor confrontación y pone en riesgo la gobernabilidad, además de que advirtieron que la intención final es impedir que sea candidato presidencial en 2006.

La estructura del PRD mexiquense anunció que frente al embate del gobierno federal, hará la defensa con una campaña de marchas, pintas y volanteo en comunidades para denunciar el golpeteo político del aparato contra López Obrador.

En una carta dirigida al presidente Vicente Fox, el senador perredista Elías Moreno Brizuela le demandó mesura ante el clima de riesgo político, luego de la decisión de solicitar el juicio de procedencia contra el jefe del GDF.

Antes de la comparecencia del secretario de Salud, Julio Frenk, el legislador pidió al funcionario hacer llegar un escrito a Fox en el que se advierte que "resulta aberrante que se quiera desaforar al jefe de Gobierno por el simple hecho de haber intentado construir una calle para dar servicio a un hospital".

Moreno Brizuela aseguró que el PRD no está ni por la confrontación ni por la polarización de la política. "Que quede de una vez claro, queremos la paz", dijo.

Por su parte, el dirigente del PAN, Luis Felipe Bravo Mena, señaló que la petición de desafuero no tiene fondo político, sino meramente jurídico. Según el panista, el jefe del GDF "trata de victimizarse y de presentarse como mártir" cuando no hay ningún sustento para ello.

Dijo que quienes pretendan ser candidatos a la Presidencia están obligados a dar pruebas a la ciudadanía de que son hombres o mujeres sometidos a la ley, respetuosos del orden jurídico y comprometidos con el estado de derecho. Por lo demás, rechazó que haya dos raseros para resolver casos jurídicos que involucran a integrantes de los gobiernos federal y capitalino.

Por separado, la senadora priísta Dulce María Sauri resaltó que con la decisión de la PGR, "la elección de Estado que se dio en Yucatán" y un llamado al diálogo "totalmente anticlimático" del Presidente, se muestra el terrible riesgo que se está gestando en el país de una desestabilización política real para 2006.

Diputados de PRI, PRD, PT y Convergencia advirtieron que la solicitud de desafuero "es una estrategia y una embestida que tiene por objeto destruir a un oponente poderoso del gobierno de Fox". El priísta Carlos Jiménez Macías señaló que las autoridades federales impiden el diálogo constructivo.

"Desde el gobierno se observa una embestida permanente contra los políticos opositores y contra los propios legisladores de las bancadas de oposición; todo parece formar parte de una estrategia que sin duda va a dejar un saldo nefasto para el propio gobierno, porque al final del día esto se le revertirá", agregó.

En el mismo tenor, el petista Oscar González Yáñez acusó a Fox de conducir al país a una confrontación adelantada de la sucesión presidencial y calificó la decisión de la PGR de "infamia e injusticia política que no va a proceder porque no hay soporte legal ni moral". Consideró que con esta maniobra gubernamental van a lograr hacer víctima a López Obrador, "que sin duda va a recibir el apoyo del pueblo ante el tremendo desatino".

Por su parte, el perredista Inti Muñoz criticó los excesos legales de la administración foxista porque "a toda costa intentan judicializar la política y politizar la justicia". También Jesús Martínez Alvarez, coordinador de Convergencia, catalogó los sucesos como delicados "porque de transitar en la línea jurídica dio un vuelco a la ruta política".

En Querétaro, el dirigente nacional del PRI, Roberto Madrazo, indicó que su partido no "sudará calenturas ajenas", al referirse a la solicitud de la PGR para desaforar al jefe de Gobierno. Agregó que los priístas nada tienen que opinar al respecto, porque "no es nuestro pleito".

Aunque prudente para no descalificar el procedimiento de la PGR, el presidente del Senado, Enrique Jackson, informó que la Comisión Permanente turnará a la Cámara de Diputados el expediente que le fue enviado, por no tener competencia en el mismo. Comentó que en la sesión de este día se formalizará el procedimiento y consideró que el país no merece mantenerse en esta dinámica de escándalos.

La solicitud de desafuero "encrespa" y dificulta todavía más el ambiente político nacional, señaló a su vez el vicario general de la arquidiócesis primada de México, Rogelio Esquivel. "Como están las cosas, parece que los partidos buscan cómo atacar a su adversario y no sabemos hasta qué punto se valen de estrategias injustas para lograr sus propósitos". Dijo que la solicitud de desafuero es sólo "el round más reciente, pero difícilmente será el último".