Ayer se efectuó la tercera marcha por la Liberación de la Mariguana

舠No me llames criminal, la mota no hace mal舡, gritan miles en la Alameda Central

CHAVA ROCK ESPECIAL

Unos dos mil jóvenes se concentraron la tarde de ayer en la explanada del Palacio de Bellas Artes para manifestarse a favor de la despenalización del consumo de mariguana. Allí comenzaron una marcha que dio la vuelta a la Alameda Central y concluyó en una de las esquinas de dicha explanada, donde se montó una pequeña carpa en la que había una mesa de información.

Por tercer año consecutivo se realiza esta marcha en el Distrito Federal, la cual se celebra también en otras ciudades del mundo. Cerca de las 3 de la tarde de ayer domingo, hora de la convocatoria, ya se encontraban cientos de jóvenes acomodados en las escalinatas y jardineras de la explanada, poco a poco se formaron contingentes y cada vez fueron más numerosos y evidentes los que forjaban y encendían sus cigarrillos, a la vez que algunos exclamaban que no era una droga. Con baile se empezaron a extender las mantas sobre el piso, para que los paseantes se dieran cuenta de esta reunión.

Manuel empezó a vender sus varitas, que parecen de incienso, pero en realidad no los son. 舠Ofrezco incienso de cannabis; normalmente lo vendo en el Zócalo, pues las autoridades no saben que con la cannabis puedes hacer tu ropa, tu estilo de vida, tu alimentación, todas tus necesidades las puedes cubrir con cannabis, la verdad; México, como buen productor, tendría una mejor economía gracias a la producción de cannabis. Estoy aquí porque la neta soy un consumidor de cannabis y estoy a favor de la legalización, pues por el hecho de consumir un poco de esto te puede sacar mucho dinero la policía o darte de golpes, es necesaria la legalización de la mariguana舡, afirmó el joven.

Un policía se acercó de forma discreta al lugar en el que se encontraban más fumadores, en tono de broma un par de chavitas lo azuzaban: ¿por qué no se los lleva, no ve que están fumando? Ni modo que me los lleve a todos, son un montón, contestó el uniformado.

Otro chavo se dio el lujo de pasearse frente a un policía, inhalar su cigarrillo y soltar el humo frente a la cara de la, en ese momento, impotente autoridad. 舠Es una acción que se debe de hacer para que vean que nadie es intocable, además es un gustazo el poder darme un toque en lugar de que ellos se lo den, en otras ocasiones nos agarran y nos dan en la madre, hasta te cortan el pelo, pero ahora nel, al menos que este día se sienten舡, comentó el joven de escasos 23 años.

Durante la marcha, a su paso por el Eje Central, algunos automovilistas apoyaban a los manifestantes, otros se asustaron y aventaban sus carros a los jóvenes. Ya frente a la Alameda resultó un espectáculo visual para los parroquianos de este remanso dominguero, quienes con asombro veían y recibían los diferentes volantes informativos que se repartían. Pocas fueron las consignas que se gritaron durante el trayecto, predominó la música que salía por los yimbé y el sax de los distintos ensambles que se congregaron, de hecho esta especie de batucada marcó la singularidad de la manifestación.

Varios enmascarados, a quienes se les llamaba Súper Macizos, con un altavoz organizaban a los chavos. Al final de la marcha, en una de las esquinas de la explanada, estaba una improvisada carpa y un minúsculo equipo de sonido en el que se expresaron varios de los objetivos de este acto. Uno de los Súper Macizos era Ignacio Pineda, del Multiforo Cultural Alicia, quien expresó que con esta acción se intenta 舠crear un debate nacional con todas las instancias para saber por qué está prohibido el uso de la mariguana舡.

Al paso del tiempo las mujeres policía se fueron familiarizando con la banda, incluso una comandante bromeó al final y pidió que por favor subieran a las aceras, 舠pues no vaya a pasar un conductor (automovilístico) borracho y atropelle a un mariguano舡.

舠¡Presos pachecos, libertad! Pacheco informado, jamás será apañado. Se ve se nota, la banda fuma mota. Un churro apagado, no lleva a ningún lado. Este día de mayo el mundo fuma un gallo. Un toque en la mañana y adiós a la migraña. No me llames criminal, la mota no hace mal. La mota es medicina y sirve en la cocina.舡 Estas fueron algunas de las consignas que se levantaron al mismo tiempo que una nube de mariguana se elevó a un cielo que no dejó caer la lluvia.