Desde el jueves se podrán apreciar las piezas en el entorno donde fueron creadas

La Casa Azul acoge 26 obras de Kahlo

 La muestra se inscribe en los homenajes por el 50 aniversario luctuoso de la pintora

AFP

Se conoce como la Casa Azul. Es un inmueble mexicano de principios de siglo XX, con amplios jardines y frescas habitaciones, en cuyos muros se resume la historia turbulenta, adolorida y festiva de Frida Kahlo. Allí regresarán, temporalmente, 26 de sus óleos más importantes.

Desde el próximo jueves, el museo Dolores Olmedo de la ciudad de México, que posee la mayor colección en el mundo de los pintores Diego Rivera y Frida Kahlo, llevará la obra de la artista a la vieja casona donde nació y murió (1907-1954), como homenaje por el 50 aniversario de su muerte.

Los famosos cuadros La columna rota, Autorretrato con changuito (1945), Hospital Henry Ford (óleo sobre lámina, 1932) y La flor de la vida (1944), entre otros, serán exhibidos durante dos meses en las habitaciones de la casa-museo Frida Kahlo en el típico barrio de Coyoacán, al sur de la ciudad.

舖舖Es un gusto hacer esta exposición con el museo de la Casa Azul. Las obras de Frida retornarán adonde fueron pintadas o concebidas en la mente de su autora, y podrán apreciarse junto con sus objetos cotidianos que ahí se conservan舗舗, indica a la Agencia Francesa de Noticias Carlos Phillips, director del museo Dolores Olmedo.

En las habitaciones del museo Frida Kahlo de Coyoacán se exhiben de manera permanente algunas pinturas de la artista, incluyendo su último cuadro, realizado en 1954, poco antes de morir, además de su diario, joyas y vestidos, y hasta sus cenizas.

En la sala y las recámaras de la casa que habitó Frida, una de las artistas mexicanas más cotizadas del mercado del arte internacional, se mostrarán 舖舖las obras por las que ha sido considerada un icono舗舗, agrega Phillips, hijo de la coleccionista Dolores Olmedo, quien en vida fue una importante mecenas del esposo de Kahlo, el muralista mexicano Diego Rivera (1886-1957).

舖舖Frida al final de cuentas pinta su vida, pinta su dolor, pinta sus ansias, y aunque la declaran surrealista (cuando la conoce el pintor francés Andre Breton), Frida nunca se imaginó serlo; de hecho nunca se catalogó como tal舗舗, señala el galerista.

México comenzó en abril una serie de homenajes en honor a la famosa pintora, a unos meses de que se cumplan, el próximo 13 de julio, 50 años de su muerte.

La exposición que realizarán de manera conjunta, en mayo y junio, el museo Dolores Olmedo y la Casa Azul es la más amplia que se haya presentado en el mundo sobre la pintora, y se hace justamente cuando en México también se produce el fenómeno de la llamada fridamanía.

Hasta mediados de los 70, 舖舖el reconocimiento de Frida en México estaba limitado a un grupo muy pequeño y elitista. Con el movimiento femenino europeo y estadunidense, que la tomó como ejemplo, Frida adquiere un reconocimiento más grobal, y obviamente su obra se hace más importante舗舗, considera Carlos Phillips.

La artista mexicana, que empezó a pintar a los 19 años, durante los meses en los que convalecía de un accidente automovilístico, en 1926, percance que le ocasionó triple fractura de columna, creó alrededor de 150 obras, en su mayoría propiedad de coleccionistas privados.

Magdalena Carmen Frida Kahlo Calderón, hija de un fotógrafo judío-alemán radicado en México, desarrolló su obra con el apoyo del muralista Diego Rivera, a quien conoció cuando ella tenía 22 años y él 43.