Satisfacción de las partes

Cuba compra más de 100 mdd a EU en agroalimentos

AFP

La Habana 16 de abril. Empresarios de Cuba y Estados Unidos terminaron este viernes cuatro días de negociaciones en La Habana, que llevaron a la firma de nuevos acuerdos de compra de productos agroalimentarios estadunidenses por más de 100 millones de dó-lares, informaron los participantes.

El presidente de la empresa cubana Alimport, Pedro Alvarez, dijo que el monto de los acuerdos suscritos en el encuentro se elevó a 106.4 millones de dólares, para la adquisición de trigo, maíz, arroz, pollo y pavo congelado, soya, aceite y harina de soya, frutas, frijoles, leche en polvo y otros productos. Con esas cifras se elevó a 822 millones el valor total de mercancías contratadas en Estados Unidos por Cuba desde 2001.

Un total de 405 empresarios de 172 compañías radicadas en 30 estados de Estados Unidos participaron en esta primera ronda de negociaciones de 2004, y expresaron su satisfacción por los resultados.

Estados Unidos mantiene un embargo so-bre Cuba desde 1962, pero en 2000 el Congreso de ese país aprobó la venta al contado de alimentos y medicinas, que deben ser transportados por naves no cubanas.

A raíz de un huracán que afectó a la isla en noviembre de 2001, Cuba comenzó a realizar importaciones desde Estados Unidos, que resultan ventajosas, tanto por la calidad de los productos, la cercanía y precios más competitivos que los ofrecidos por otros proveedores, indicó Alimport.

Sin embargo, el pago al contado de las compras despertó inquietud en suministradores tradicionales europeos y asiáticos de agroalimentos, que le venden a Cuba a crédito y con los cuales la isla mantiene deudas.

El acuerdo con las empresas estadunidenses se logró un día después de que la Comisión de Derechos Humanos de Naciones Unidas aprobó en Ginebra una resolución que lamenta a situación de esas garantías en la isla, y que le insta a permitir el ingreso de un relator de derechos humanos.

Al respecto, el diario oficial Granma calificó la votación como "incuestionable victoria moral" para Cuba, mientras el presidente hondureño, Ricardo Maduro, cuyo gobierno presentó la iniciativa, rechazó que la hubiera patrocinado a instancias de Estados Unidos.