Combatió por igual a "extremistas de izquierda y derecha", sostienen

Nazar Haro regresó al DF porque no quería morir solo, afirman sus hijos

Las policías estatales diezmaron a los grupos guerrilleros por el trabajo que realizó, dicen

GUSTAVO CASTILLO GARCIA Y DAVID CARRIZALES ENVIADO Y CORRESPONSAL

Monterrey, NL., 21 de febrero. Realmente el grupo guerrillero que asoló al país en los años 70 fue diezmado por las policías de los gobiernos de los estados gracias a los servicios de inteligencia que dirigió Miguel Nazar Haro, porque fue quien los ubicó y desenmascaró, afirmaron Pedro y Arlette Nazar Daw.

En entrevista, los hijos del que fuera titular de la Dirección Federal de Seguridad de 1978 a 1982 mencionaron que Nazar Haro fue "un nacionalista" que lo mismo combatió a quienes militaban en la "extrema izquierda" como en la "extrema derecha".

"Para él siempre fue primero México, los cinco hermanos somos nacionalistas igual que él. Sin importar ideologías, él se encargó de cuidar el país y de informar a las distintas áreas (gubernamentales) en dónde estaban los focos rojos y quiénes eran los integrantes de los focos rojos", dijo Pedro, el mayor de los cinco hijos de Nazar Haro.

Las declaraciones surgieron a veces con rabia, otras con impotencia ante las preguntas respecto de las acusaciones contra su padre.

Miguel Nazar Haro, de 80 años de edad, enfrenta ahora una acusación penal por el delito de privación ilegal de la libertad. Está preso en el penal del Topo Chico en esta ciudad, donde surgieron en los años 70 varios de los más importantes dirigentes de la Liga Comunista 23 de Septiembre.

El Tigre, como le conocían en los círculos policiacos del país durante la llamada guerra sucia, está acusado, por el momento, de la desaparición de Jesús Piedra Ibarra, un militante de la Liga Comunista 23 de Septiembre e hijo de Rosario Ibarra de Piedra, dirigente del Comité Eureka.

Sin embargo, la Fiscalía Especial para Movimientos Sociales y Políticos del Pasado, pronto consignará nuevas imputaciones en su contra, como el homicidio de Ignacio Salas Obregón, un dirigente de la liga.

Pedro: seguridad nacional y crisis políticas

Para Pedro Nazar, a su padre "le tocó dirigir los servicios de inteligencia a escala nacional cuando el país entró en distintas crisis políticas, había grupos de terroristas, aunque hoy dicen que eran jóvenes desorientados. Mi padre, mi jefe, y lo digo así porque eso es para nosotros, el jefe que dictaba la línea a seguir, cumplió con su deber. Si ahorita lo están acusando por cuestiones de extrema izquierda, bueno, es porque fueron momentos en que la extrema izquierda quería tomar el país para entregarlo a otros países de la misma ideología. Qué hubiera pasado si es al revés y en lugar de desaparecer la Liga Comunista 23 de Septiembre hubiera desaparecido el sistema político mexicano, o por el contrario, que hubiera sido la extrema derecha, porque hubo brotes, y también fue su deber investigar, informar, y desenmascarar a los terroristas de la extrema derecha.

"No nada más lo quieran encasillar como quien combatió la ideología de izquierda, porque él es de una ideología nacionalista, de ideología mexicana única. El estaba contra los vendepatrias.

"Hay que reflexionar, y yo lo hago con mis hijos, gracias al trabajo que hizo su abuelo en seguridad nacional, en estos momentos estamos viviendo un cambio, y vuelvo a repetir que si el triunfo hubiera sido de uno de los extremos, ¿qué estaríamos viviendo ahorita?"

-A su padre se le ubica como una gente de poder, cercano a los presidentes y se le señala como torturador e implicado en la desaparición de personas, ¿qué opina de eso?

-Mi percepción es que en aquellos años él salía a dar la cara a los medios, no aparecían ni los secretarios ni subsecretarios ni jefes de policía, que eran quienes tenían como función la detención de personas.

Arlette: la familia, la captura

"Tenía dos o tres días que había llegado a la ciudad de México, no conmigo precisamente, sino a la casa de mi hermana que se localiza en Pichacho. Llegó ahí por sus padecimientos cardiacos.

"Dijo que se había sentido mal y que no quería morir solo. Desde dos días antes (del 18 de febrero cuando lo detuvieron elementos de la Agencia Federal de Investigación) tuvo un dolor muy intenso en el pecho.

"Platiqué con mi hermano (José Luis, quien también es el abogado de su padre) y nos preguntamos qué vale más: su salud o su seguridad. Decidimos que su salud. Lo tuvimos que estar medio escondiendo tres meses, pero a final de cuentas la familia es la familia y a él, lo que lo ha jalado toda la vida es su familia."

Al final, para ellos, su padre, al "cumplir con su deber y defender a su país, no cometió un delito".