Los acusan de dar su visto bueno a la relección de José Guzmán al frente del sindicato

Funcionarios de la SE impulsan el charrismo: burócratas

FABIOLA MARTINEZ

Trabajadores de la Secretaría de Economía (SE) denunciaron que funcionarios de esta dependencia transgredieron el artículo 87 de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) -relativo a libertad sindical- por haber dado su visto bueno para la relección de José Guzmán Gómez, actual secretario general del sindicato de la SE.

Ese líder cumplió seis años en el cargo y, afirmaron, pretende aplicar la misma estrategia de Joel Ayala Almeida, dirigente de la Federación de Sindicatos de Trabajadores al Servicio del Estado (FSTSE), para continuar en el puesto a partir de una reforma estatutaria en la que cambiaría el nombramiento de secretario general por el de presidente.

Los empleados, reunidos en un auditorio del edificio principal de la SE, señalaron que existe un oficio, fechado el 16 de febrero pasado, en el que el director general de Recursos Humanos de esta dependencia, Luis Pablo Monreal, "define su postura en favor de la relección de Guzmán Gómez", dirigente que también participa en la estructura ejecutiva de la FSTSE.

En ese documento, afirmó María Elena Hernández Ocaña, amenaza con aplicar sanciones administrativas, laborales e incluso penales a quien inste a la reunión de diversos grupos que se oponen a la gestión del actual dirigente sindical y su comité ejecutivo.

"Estamos en contra de la relección, aun cuando sabemos que Guzmán y su gente están dispuestos a todo, inclusive a amenazar, en afán de no perder el poder y el enriquecimiento a costa de las cuotas de todos nosotros", señaló Hernández.

Por lo anterior, los trabajadores inconformes solicitaron al titular de la SE, Fernando Canales Clariond, defina su posición frente a este hecho, en particular por la presunta venia para la continuidad de los dirigentes gremiales. Los trabajadores presentes en la reunión, realizada ayer por la mañana, afirmaron que existen opositores para participar en una elección democrática.

Informaron que en julio próximo vence el periodo sindical vigente; sin embargo, se pretende adelantar el congreso para los últimos días de marzo. Para ello, agregaron, "los delegados están falsificando las firmas de los trabajadores" con el fin de impedir que la oposición se organice.