Ratifica el Senado los nombramientos de cuatro cónsules generales en California

Si Fox cree en el plan de Bush, "estamos perdidos", afirma el presidente del Colef

"Poco realista", pensar que se puede lograr un acuerdo con EU en lo que resta del sexenio: Santibáñez Romellón

KARINA AVILES

El presidente del Colegio de la Frontera Norte (Colef), Jorge Santibáñez Romellón, expresó que es "poco realista" pensar que se pueda lograr un acuerdo migratorio en lo que resta del sexenio y advirtió que si el presidente Vicente Fox realmente cree que la propuesta de trabajadores temporales de George W. Bush es la solución al problema, "entonces realmente estamos perdidos".

Lo anterior fue señalado en el contexto de un panel sobre esta materia organizado por el Colef y El Colegio de México (Colmex), en el que académicos y representantes de organizaciones no gubernamentales, tanto mexicanas como de Estados Unidos hicieron diversos señalamientos sobre la iniciativa migratoria de Bush: es una propuesta "para satisfacer los problemas de los empresarios y no de los indocumentados"; es "unilateral", se hizo por "razones de seguridad de Estados Unidos", opinaron algunos, aunque todos coincidieron en que representa una "ventana de oportunidad" el hecho de que la Casa Blanca haya retomado el tema.

Santibáñez Romellón, quien también es colaborador de La Jornada, señaló que muchos de los migrantes que radican en el vecino país del norte se sentirían "muy defraudados" si el gobierno de México "apoya decididamente esta propuesta", porque se centra en el tema de los trabajadores temporales. Por tanto, no es satisfactoria para quienes viven en aquella nación desde hace 10 o 15 años, añadió.

Destacó que no basta con que el gobierno mexicano se congratule de la iniciativa, sino que debe dar una respuesta clara sobre las acciones que piensa emprender para aprovechar esta "ventana de oportunidad", si es que existe.

Manifestó que Estados Unidos no tiene "la voluntad de desarrollar nada bilateral no nada más con México, sino con cualquier otro país del mundo". Apuntó que no hay condiciones para generar mecanismos concertados: "No veo que Estados Unidos sea capaz de establecer un acuerdo acerca de la movilidad poblacional prácticamente con ningún país".

Por otro lado, dijo que la "solidaridad" manifestada al gobierno estadunidense por parte el presidente Fox es correcta, siempre que sea parte de una estrategia, pero si el Ejecutivo "realmente cree que la propuesta de Bush es una solución al problema, entonces, estamos realmente perdidos". Explicó que la iniciativa no beneficia a todos los migrantes mexicanos: a algunos les traerá efectos positivos, pero a otros los perjudicará.

Beneficios para empresarios de EU

Manuel García y Griego, de la Universidad de Texas en Arlington, destacó que la de Bush no es una propuesta para resolver el problema de los indocumentados, sino de los empresarios, porque Estados Unidos no tiene los suficientes trabajadores locales dispuestos a aceptar empleos con más baja remuneración. De hecho, puntualizó, es una iniciativa "que busca a-traer a un mayor número de trabajadores para que compitan con los indocumentados" que ya radican en aquel país.

En representación de la organización Sin Fronteras, Fabienne Venet expuso que en tanto Bush no presente la iniciativa ante el Congreso ni siquiera puede considerarse una propuesta. Criticó la pasividad del gobierno mexicano en temas como los de la circularidad y el trabajo temporal, y subrayó la necesidad de pensar en verdaderos programas "y no sólo en tratar de jalar las remesas".

Francisco Alba, investigador del Colmex, planteó que el proyecto de Bush es de corte unilateral y ocurre en un contexto en el que todo está dirigido al mejor control de las fronteras: "Es por razones de seguridad; se trata de saber quiénes son", expresó.

Legisladores del PRI y el PRD critican la "falta de tacto" del Presidente

ENRIQUE MENDEZ Y ROBERTO GARDUÑO

Al aprobar la ratificación de cuatro cónsules generales de México en ciudades de California, Estados Unidos, la Comisión Permanente del Congreso de la Unión cuestionó la "falta de tacto" del presidente Vicente Fox, pues decidió el cambio en los consulados durante la peor coyuntura para los indocumentados mexicanos, mientras el gobernador Arnold Schwarzzenegger ha endurecido su política contra los migrantes.

Aun cuando los nuevos diplomáticos en California no cumplieron con todos los requisitos legales, y que los legisladores consideraron un error que la remoción se efectuara sin respetar los principios diplomáticos y los nombramientos fueron hechos por el Ejecutivo "en paquete", se decidió ratificarlos para no dejar pasar un día más sin representación diplomática nacional en ese estado.

La presidenta de la Segunda Comisión de Relaciones Exteriores, Defensa y Educación del Congreso, Silvia Hernández, advirtió al Ejecutivo que en futuras designaciones de cónsules el Congreso "devolverá sin mayor trámite" las propuestas que no estén suficientemente motivadas y que no contengan una explicación del porqué de los relevos. El Legislativo, sostuvo, "no es oficialía de partes", y manifestó que en la administración foxista "la política exterior está de cabeza".

Luego de un debate entre el PAN y legisladores de PRI y PRD, el pleno ratificó los nombramientos de los cónsules en Los Angeles, Rubén Alberto Beltrán; en Sacramento, Alejandra Bologna; en San Francisco, Alfonso de Maria y Campos, y en San José, Bruno Figueroa. Según el PRD, llegan en lugar de diplomáticos que "no tienen muy buenas relaciones" con el actual canciller, Luis Ernesto Derbez.

Durante la discusión, el senador Demetrio Sodi de la Tijera cuestionó que "a muchos cónsules se les avisó (su destitución) por fax" y la comunicación se hizo sólo con un día de anticipación. "Así que se dio de baja a todos los cónsules de California cuando llega un gobernador (Arnold Schwarzenegger) que no está en sus casillas y que promueve una política totalmente agresiva contra de los migrantes mexicanos y los indocumentados".

El relevo, añadió, se dio en medio de "una falta de tacto político, porque algo pasa en la cancillería, y no lo ignoremos. El secretario no sabe cómo deshacerse de todo el personal de carrera y pone a gente improvisada".

Para defender al presidente Vicente Fox subió a la tribuna el senador panista Jorge Zermeño, quien aceptó que debe "haber una mejor forma de conducir la política exterior" mexicana, pero acotó que en ello no debe involucrarse el Poder Legislativo, porque no tiene "corresponsabilidad ni obligación de ajustar al Poder Ejecutivo". Consideró que en los relevos el mandatario "no violó ninguna ley ni actuó de manera arbitraria ni caprichosa", y señaló que "en la mayor parte de los casos" los nombramientos recaen en personal de carrera.

Silvia Hernández convino en que si bien el Ejecutivo tiene la facultad de designar a los agentes diplomáticos, no lo debe hacer "de manera arbitraria ni caprichosa".