Sin empleo o subcontratados, 13 millones de habitantes: informe del Banco Mundial

Exigen manifestantes indemnizar a familias de seis iraquíes ultimados por británicos

Arrestar a quienes dispararon contra manifestantes y un nuevo gobernador, otras demandas

REUTERS, AFP Y DPA

Amara, 11 de enero. Una multitud de airados manifestantes se concentró este domingo en Amara, al sur de Irak, para exigir una compensación por la muerte de seis iraquíes cuando la policía local y soldados británicos abrieron fuego para reprimir la víspera una manifestación. El Pentágono anunció que han muerto 495 soldados en territorio iraquí, casi 10 meses después de la invasión encabezada por Estados Unidos y Gran Bretaña.

Los desempleados de Amara, ciudad chiíta, atacaron con piedras a los soldados británicos, un día después de los enfrentamientos entre manifestantes y fuerzas del orden que dejaron un saldo de seis civiles muertos y ocho heridos.

Los militares británicos, quienes protegían la sede del gobierno de la ciudad, capital de la provincia de Misan, se lanzaron contra los manifestantes, cuyo número oscilaba entre 150 y 200. Los iraquíes se dispersaron en las calles vecinas. No hubo heridos entre ellos. Luego se reunieron en el lugar y distribuyeron a los periodistas un comunicado de seis puntos, en el que piden, sobre todo, "el arresto de los autores de los disparos" y la "elección de un nuevo gobernador".

Seis iraquíes fallecieron el sábado a manos de policías iraquíes y del ejército británico, durante una manifestación de desempleados que poco a poco se convirtió en campo de batalla. Según los manifestantes, tres miembros de la familia de Abdel Karim al Muhammadaui, del consejo provisional de gobierno, entre ellos Riad, el gobernador de la provincia, están directamente implicados en el tiroteo.

Los manifestantes demandaron también que se disuelva la brigada antidisturbios local, a la cual consideran responsable de los actos violentos, y exigieron compensaciones financieras para las "familias de los mártires y heridos", así como fuentes de trabajo, agua y electricidad para la ciudad y las diferentes localidades de la provincia de Misan.

Esta versión contradice la dada a conocer el sábado por un portavoz británico, según la cual "la multitud estaba exasperada, se oyeron disparos y la policía iraquí, pensando que había sido atacada, disparó".

Casi la mitad de los 26 millones de habitantes de Irak se encuentra sin empleo o subcontratados, de acuerdo con un reporte elaborado en octubre pasado por Naciones Unidas y el Banco Mundial. De ellos 400 mil son soldados iraquíes, quienes perdieron su trabajo cuando el administrador civil estadunidense de la nación invadida, Paul Bremer, disolvió el ejército.

Por otro lado, en la sureña ciudad de Basora, un iraquí con ciudadanía estadunidense que trabajaba en la administración civil fue encontrado muerto, informó un portavoz de las fuerzas de ocupación en el sur. "Su cadáver fue hallado junto con el de otro hombre que no está relacionado con las fuerzas invasoras en el sur", agregó la fuente.

A su vez, soldados estadunidenses detuvieron a dos personas después de haber descubierto un "importante escondite" de armas y una "fábrica de bombas" cerca de Bagdad, anunciaron este domingo portavoces militares.

Según la comandante estadunidense Josslyn Aberle, un informante iraquí condujo el sábado a los soldados a una casa de Taji, al norte de la capital, donde encontraron unos 400 cohetes y obuses de mortero, así como 260 cohetes antitanque y 42 lanzadores. También fueron confiscadas 16 cajas con explosivos, "fabricados de forma artesanal", y nueve obuses de 155 milímetros, señaló la portavoz.

La guerrilla iraquí utiliza con frecuencia esos artefactos contra los invasores.

Por otra parte, 495 soldados estadunidenses han muerto en Irak, casi 10 meses después de la invasión de ese país por tropas de Estados Unidos y Gran Bretaña, anunció este domingo el Pentágono. La cifra oficial del Departamento de Defensa fue dada a conocer por la portavoz Megan Grafton, quien destacó que el balance de 504 bajas, previamente divulgado por ella, no era correcto.

Hasta el pasado viernes el balance oficial del Departamento de Defensa era de 494 bajas, de las cuales 342 fueron por ataques de enemigos y 152 por incidentes que no tienen relación con el combate.

Desde el pasado primero de mayo, cuando el presidente George W. Bush declaró el fin de las principales operaciones militares, 357 soldados estadunidenses murieron, 228 en combate y 129 en otras circunstancias, como accidentes y suicidios.

Desde el comienzo de la guerra contra el régimen de Saddam Hussein, el 20 de marzo de 2003, otros 2 mil 849 soldados estadunidenses resultaron heridos en Irak, 2 mil 461 en combate, según el Pentágono.

A su vez, el presidente en turno del consejo de gobierno provisional iraquí -impuesto por la Casa Blanca-, Adnan Padchachi, consideró incorrecto que funcionarios estadunidenses sean los únicos autorizados para interrogar a Hussein. "ƑPor qué no hay aún un interrogatorio conjunto (de investigadores estadunidenses e iraquíes)?", preguntó el político en una entrevista publicada este domingo por el periódico árabe Al Sharq Al Awsat.

Después de todo, la mayoría de las víctimas del régimen de Hussein fueron iraquíes, no soldados estadunidenses, resaltó.

Por lo pronto, el comité de erradicación del partido Baaz, formación política dirigida por Hussein, publicó este domingo las instrucciones necesarias para expulsar de la administración y las empresas estatales a los responsables de ese instituto político.

El comité, presidido por Ahmad Chalabi, miembro del consejo de gobierno provisional iraquí, limitó por ahora esas instrucciones a los miembros de mayor importancia dentro del otrora todopoderoso partido, que controlaba los engranajes del Estado y la sociedad.

"Estas medidas se aplican al sector público, pero el comité publicará próximamente instrucciones similares para el sector privado y asociaciones profesionales", declaró Chalabi durante una rueda de prensa en Bagdad. Estas medidas de erradicación, sobre todo despidos, ya fueron dadas a conocer el domingo por la mañana en tres diarios iraquíes.

El comité de erradicación del Baaz fue creado por el consejo de gobierno provisional, para expulsar de las altas esferas del futuro Estado iraquí a cualquier persona que haya tenido responsabilidades en el antiguo régimen.