Posible reubicación, sobrepoblación de asistentes y vendedores, entre los problemas

El Chopo debe analizar sus objetivos y planear el futuro, afirman tianguistas

El tianguis ya dio lo que tenía que dar, afirma expositor; tendrá un futuro luminoso, replican

JAVIER HERNANDEZ CHELICO

A 23 años de su fundación, el Tianguis Cultural del Chopo enfrenta momentos decisivos. Por principio de cuentas está la posibilidad de que sea reubicado como consecuencia de la construcción de la megabiblioteca José Vasconcelos que estará situada a unos metros de donde se instala actualmente el mencionado tianguis; otro aspecto importante a resolver es la sobrepoblación, tanto de asistentes como de vendedores, no sólo en el área que la delegación asignó a los choperos, sino alrededor de ella. Es imposible soslayar la incontrolable proliferación de vendedores, tanto de los llamados toreros, como de los establecidos -sobre todo, las inseguras bodegas-; ambas formas de venta ocupan una superficie igual o mayor a la del mismo tianguis. Estas circunstancias, aunadas a la crisis que padece el país, repercuten en el ánimo de los visitantes y locatarios del tianguis. Los más optimistas avizoran la supervivencia del mítico mercado roquero como tal; otros, le auguran malos tiempos y no faltan los que creen que no pasa nada. En un paseo por este tianguis sabatino se recogieron diversas opiniones de personas estrechamente relacionadas con estos hechos.

"Teniendo en cuenta la crisis que vivimos -y la que se avecina- pues las cosas pintan mal para los tianguistas y en general para todos", afirma Federico Arana, escritor, músico, caricaturista y catedrático, además de figura permanente en el paisaje chopero. "Por otro lado -continúa Arana-, el Chopo sigue cumpliendo funciones nada despreciables, quiero decir: sigue viniendo gente a buscar información y esto va en ascenso, vienen estudiantes que están haciendo su tesis, profesionistas buscando datos para un doctorado o gente que simplemente quiere escribir sobre alguno de los rubros que se manejan aquí, que no sólo es rock, sino otras cosas, como cine o ciertos géneros populares." Con respecto a una posible reubicación, Arana reconoce que "el riesgo siempre está latente. Siempre que hay algo que tiene que ver con el rock, el riesgo está latente. Como que la tentación autoritaria sigue siendo muy fuerte; pero también me imagino que teniendo en cuenta el recorte presupuestal del gobierno del DF, sería el colmo mochar al Chopo, que es un sitio que tiene actividades por montones. Y prácticamente todas son gratis. Sería pues, una estupidez acabar con el tianguis. Con los pies en el suelo, está bien el tianguis. Cumple con su función sobradamente", finaliza diciendo el líder de Naftalina.

Futuro difícil e incierto

El contraste inmediato se da con la opinión de Enrique Rivera, encargado de la Galería de Cultura Visual del tianguis. Comenta que el futuro del Chopo es "muy incierto. En cuestión de la función mercantil está bien; pero más allá, como que el tianguis ya dio lo que tenía que dar. En realidad no le ves mucha diferencia con otros mercados. Cuando te pones a hablar con la gente que está en el comité, el ribete de 'cultural' les causa mucho ruido; no entienden que no puedes estar dedicado a una actividad cultural nada más por amor al arte en un lugar en que la esencia es lo mercantil. Somos los que menos vendemos y cuando llegamos a traer un producto -hablo en mi caso particular- luego luego se nos critica, se nos dice que nada más tenemos derecho a vender cosas de fotografía, con lo caro que son estos productos. Estas diferencias internas -aclara Rivera a pregunta expresa- no creo que debiliten a la organización, porque ya se vio en la ocasión anterior cómo se cerraron filas y se apoyó al tianguis". Con lo que no está de acuerdo Rivera es con la acepción dada por algunos tianguistas al término cultura. Dice Enrique: "cuando tú dices cultural es porque estás integrando a todos. Pero cuando dices cultural y les dices a los skatos 'tú no puedes participar porque vendes patinetas y nosotros no vendemos patinetas, porque la patineta no tiene nada que ver con el rock', pues ya estás segregando, discriminando. Le ha faltado visión al tianguis. Necesitamos crecer, y con esto las mismas autoridades se verían en la necesidad de reubicarnos en un mejor lugar o de hacer algo aquí mismo. Pero cuando se dice 'nomás son 180 puestos y no puede haber ni uno más' pues te limita bastante; y no integrar a las nuevas generaciones ha ido en detrimento" del Chopo, reconoce Rivera.

Aurelio González, uno de los fundadores del tianguis, tiene su punto de vista sobre lo que puede venir. "El futuro yo lo veo halagador, estable, según los resultados que hemos visto últimamente. Las ventas son más difíciles, pero el chiste es que la gente sigue respondiendo", en cuanto al estado que guardan las cosas con la delegación, Aurelio acota "las autoridades, hasta ahorita, se han retractado de las cosas que habían dicho; parece que ahorita no tienen ninguna intención de movernos, y si lo hacen nos han ofrecido el patio de ferrocarriles. Estamos analizando todo esto; aunque en este momento, por cuestiones de fiestas de fin de año, se han paralizado las negociaciones. Pero en términos generales el futuro lo veo halagador", dice sonriendo el grandote chopero.

El activista ferrocarrilero Salvador Zarco, sin embargo, no baja la guardia y afirma contundente "hay que seguir en la defensa del Tianguis Cultural del Chopo. Vamos a elaborar un escrito para ser entregado en la Presidencia de la República, con copia al jefe de Gobierno capitalino y a la delegación Cuauhtémoc. El documento irá acompañado por más de 25 mil firmas de apoyo al tianguis. Lo haremos, pero en su momento, porque el proyecto de la megabiblioteca sigue, y esto traerá consecuencias para el Chopo, aun cuando en el Consejo Nacional para la Cultura y las Artes digan que no es cierto, esto hasta un ciego lo ve. Entonces necesitamos hacer la mejor defensa de esto, que aún corre riesgos", asevera el antiguo trabajador del riel.

Los lugares para nuevos tianguis, designados

Juan Heladio, médico, profesor y uno de los nombres más populares del tianguis sabatino de Buenavista, declara, cuando se le pide que hable sobre el futuro del mercado cultural que "el futuro del Chopo es problemático debido a que la megabiblioteca se tiene que construir, por lo tanto va a haber mucho material de construcción y el Chopo va a bloquear la entrada y salida de camiones. No se sabe qué medidas va a tomar la delegación; no sé cómo va a reacionar la señora (Virginia) Jaramillo -delegada en Cuauhtémoc-, puesto que uno de sus lemas fue que iba a mover el Tianguis Cultural del Chopo; entonces va estar problemático y arrebatado. Por otra parte, veo casi imposible que haya un sitio que sea designado para el Chopo; todos los lugares ya están asignados. Y como nos dijeron: si hay 12 lugares para construir espacios tianguistas, son para los tianguis problemáticos, para los que son de armas tomar. El tianguis del Chopo no es tan complicado. Así que por ese lado lo veo difícil. Además, la violencia consuetudinaria de la colonia Guerrero es otro factor de presión. Si un día -que Alá, Buda o Cristo no lo quiera- sucediera una desgracia, sería un factor para que la delegación pretendiera movernos".

Juan Heladio es un convencido de los problemas causados por la proliferación anárquica de vendedores, cervecerías disfrazadas de loncherías y de traficantes alrededor, y -lo más grave-, fuera del control del tianguis, ya que la solución de estos asuntos sólo le competen a la delegación. Asimismo, Juan Heladio observa con detenimiento la postura de los medios de comunicación con respecto al Chopo. "A mí lo que me preocupa es que los mass-media tienen modas. Si el Chopo nada más fuera una moda, podríamos quedar un día sin ningún apoyo de periodistas y de electricistas o de petroleros, o de vecinos que nos han apoyado. Entonces, siempre será un futuro incierto el del tianguis del Chopo. No me parece nada halagüeño lo que se nos viene: negociaciones y lucha". Como remate a esto último, dicho por Heladio, cabría lo señalado por Catarina Chico Carrasco, presente en el tianguis desde hace 23 años; ella recuerda: "si una vez recibimos la barca a medias, creo que ahora está en medio, y los verdaderos choperos tenemos que soportar buenas y malas, y yo, la verdad, le veo mucho futuro al Chopo".