La propuesta del Ejecutivo recibe amplio respaldo: 64 votos; requería 49

Senado brasileño aprueba reforma fiscal

Cae de 80 a 70% el apoyo al gobierno de Lula, a casi un año de que comenzó

AFP Y DPA

Brasilia, 17 de diciembre. En el segundo y último debate plenario, el Senado brasileño aprobó este miércoles una reforma tributaria propuesta por el gobierno del presidente Luiz Inacio Lula da Silva. El proyecto de ley recibió 64 votos en favor y cinco en contra, de un total de 81 senadores. Para ser aprobada, la iniciativa del Ejecutivo requería de un mínimo de 49 votos favorables, pues se trata de una enmienda constitucional.

Uno de los votos en contra fue de la senadora Heloisa Helena, quien el fin de semana pasado fue expulsada del gubernamental Partido de los Trabajadores (PT, izquierda), por no apoyar con su voto esta reforma y la del sistema de jubilaciones, aprobada el fin de semana.

Los textos básicos de estas dos reformas, propuestas por el presidente Lula al Congreso el pasado 30 de abril con el respaldo de los 27 gobernadores de los Estados del país, serán promulgadas por el gobierno el próximo viernes o a más tardar el sábado, según se indicó en medios parlamentarios oficialistas.

El proyecto de ley tributario ya había sido votado en el primer debate de la plenaria del Senado el pasado 11 de diciembre, cuando recibió 63 votos a favor y cuatro en contra.

Con estas dos reformas, y pese a que el gobierno tuvo que ceder en varias de sus aspiraciones para lograr el apoyo de congresistas de la oposición, Lula se anota un indiscutido triunfo político en su primer año de gobierno que cumplirá el próximo primero de enero. Un sondeo de opinión publicado hoy, realizado por la firma Ibope, reveló que el mandatario tiene un índice de aprobación de 69 por ciento y 64 por ciento afirmaron que volverían a votar por él, con lo que ganaría en primera vuelta las elecciones, si éstas volvieran a celebrarse. Sin embargo, al comienzo de su gestión, el primero de enero pasado, la popularidad de Lula era de 80 por ciento.

El gobierno pretende con la reforma tributaria hacer más "eficiente y efectiva" la recaudación de los impuestos. Además la considera indispensable para asegurar el presupuesto de 2004. Para lograr su aprobación el gobierno tuvo que aceptar una reforma en tres etapas. La primera se realizará en lo que fue definido como un "ajuste de caja tributaria", en tanto que la segunda será de transición y reducción de la carga tributaria, y en la tercera y última etapa se colocará al país en un sistema verdaderamente moderno, explicaron los legisladores.

El ex presidente Fernando Henrique Cardoso aseguró hoy que Lula no ha hecho ninguna ruptura con el gobierno antecesor, que él encabezó, al señalar que fue su gestión la que propuso las dos reformas sancionadas ahora, sin que nunca lograran su aprobación. "Me pone contento porque significa que sí era el camino", comentó.