El homicidio ocurrió a menos de 24 horas de que se ordenara detener a represor

Asesinan a un testigo clave de las desapariciones forzadas en Guerrero

La víctima rendiría su testimonio sobre la lucha contra la guerrilla de Lucio Cabañas

Proporcionaría información de quiénes torturaban y qué hacían con los detenidos

GUSTAVO CASTILLO GARCIA, JESUS SAAVEDRA Y MISAEL HABANA DE LOS SANTOS REPORTERO Y CORRESPONSALES

A menos de 24 horas de que el juzgado cuarto de distrito en materia penal con sede en Acapulco, Guerrero, librara la primera orden de aprehensión en contra de uno de los represores de la guerra sucia, el ex comandante de la Policía Judicial de esa entidad Isidro Galeana Abarca, en el poblado de La Floria, municipio de Atoyac de Alvarez, fue torturado y asesinado de 15 disparos Horacio Zacarías Barrientos Peralta, uno de los principales testigos de la Fiscalía Especial para Movimientos Sociales y Políticos del Pasado (Femospp) en las investigaciones contra militares y policías involucrados en la detención, tortura y desaparición de centenares de habitantes de la sierra de Guerrero que estuvieron vinculados con la guerrilla de Lucio Cabañas.

Barrientos Peralta, quien fue madrina de agentes judiciales en los años setenta, acudió de manera voluntaria a declarar ante la Femospp. Se había comprometido a servir como testigo en los procesos penales en contra de represores a los que se les fincarán cargos, dado que él había participado en los grupos policiacos y militares que durante esa época se dedicaron a combatir la guerrilla en la Costa Grande de Guerrero, revelaron fuentes gubernamentales de esa entidad que solicitaron el anonimato.

Fue torturado y recibió 15 tiros

Según los primeros informes policiacos que elaboró el personal de la Procuraduría General de Justicia de Guerrero, Barrientos Perlata fue torturado y luego asesinado de 15 tiros por un grupo de al menos cinco sujetos mientras trabajaba en su parcela, que se localiza en la comunidad de La Florida, cercana al poblado El Rincón de las Parotas, de donde era originario, sitio que en los años setenta constituyó uno de los bastiones de Lucio Cabañas, líder del Partido de los Pobres.

De acuerdo con las fuentes consultadas el asesinato ocurrió a las cinco y media de la tarde del pasado miércoles, es decir, a menos de 12 horas de que el juzgado cuarto de distrito con sede en Acapulco hubiera ordenado la detención del ex comandante Galeana Abarca, al encontrar elementos suficientes para juzgarlo como responsable del delito de privación ilegal de la libertad en perjuicio del profesor Jacob Nájera Hernández, quien fue desaparecido por el ex policía el 2 de septiembre de 1974.

Fuentes cercanas a la Femospp revelaron a La Jornada que Barrientos Peralta se presentaría una vez más ante la fiscalía para aportar datos concretos en torno a la manera en que actuaron los grupos policiacos y militares en la Costa Grande de Guerrero, especialmente en la sierra de Atoyac, y también proporcionaría datos concretos de quiénes y cómo torturaban, y posteriormente qué se hacía con los presuntos guerilleros detenidos.

Las fuentes indicaron también que el titular de la Femospp, Ignacio Carrillo Prieto, se entrevistó con el gobernador René Juárez Cisneros para solicitar una rápida respuesta ante los hechos, ya que el homicidio empaña el curso de las investigaciones de la fiscalía, pero lo más grave es que hace resurgir el temor de nuevas desapariciones forzadas.

La procuraduría guerrerense inició la averiguación previa Gale/Ato/01/207/2003 por el delito de homicidio; hasta el momento no se ha detenido a ninguno de los responsables.

Por otra parte, Gustavo Galeana, hijo del ex comandante Isidro Galeana Abarca, aseguró que su padre se encuentra gravemente enfermo, por lo que no se podrá cumplimentar la orden de aprehensión que el juzgado cuarto de distrito libró en su contra.

Según Gustavo Galeana, su padre padece enfermedades crónicas como insuficiencia renal, diabetes e insuficiencia pulmonar y cardiaca, lo que le impide salir de su casa.