Hacían mal uso de las frecuencias, afirman autoridades

Gobierno venezolano confisca equipo a canal de tv opositor

Globovisión nunca salió del aire, aclara Caracas

Preocupación de la OEA y la CIDH por el hecho

AFP, DPA Y REUTERS

Caracas, 3 de octubre. Nuevas protestas populares estallaron hoy en la capital venezolana, luego de que autoridades estatales de telecomunicaciones se incautaron de equipos de transmisión de la televisora privada Globovisión, acción que el canal y los opositores calificaron de ataque a la libertad de expresión.

Las manifestaciones en apoyo al canal se concentraron en los alrededores de la televisora, caracterizada por su férrea oposición al gobierno de Hugo Chávez, así como frente al Consejo Nacional de Telecomunicaciones (Conatel) -el organismo ejecutor de la medida- y en las inmediaciones de una transitada autopista.

De inmediato el secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), César Gaviria, expresó su preocupación por estos hechos, y dijo esperar que lo sucedido se pueda aclarar lo más pronto posible. En el mismo tenor, la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) instó al gobierno venezolano a devolver los equipos de transmisión intervenidos.

Todo esto ocurrió en momentos en que la oposición está promoviendo, sobre todo en medios privados de comunicación, el referéndum para retirar a Chávez de la presidencia.

Globovisión dijo que el gobierno se incautó de siete equipos de microondas de televisión y una antena de dos estaciones de transmisión, lo que les impedía difundir información en directo desde varios frentes noticiosos. No obstante, el canal, que transmite las 24 horas del día, no interrumpió sus actividades.

Para el director general de la emisora, Alberto Ravell, ''el gobierno nos está comenzando a cerrar'', pues dijo interpretarlo como un primer paso en esa dirección al señalar que el canal ''vive de las microondas, y no puede vivir sin microondas''. Rechazó que esto sea un procedimientro técnico, y que más bien constituye "un atropello", porque es una medida "ilegal e irregular".

El ministro de Infraestructura, Diosdado Cabello, afirmó que fue un procedimiento legal porque hay indicios de que el canal usa indebidamente equipos y frecuencias radioeléctricas. Negó que con la medida se busque cerrar Globovisión, ya que la emisora está en el aire sin ningún problema, y añadió que se trata de ''un procedimiento administrativo rutinario''.

En términos similares se manifestó el titular de Comunicación, Jesse Chacón, al justificar el decomiso de los equipos como una medida cautelar para impedir que la televisora siga transmitiendo ilegalmente. A su vez, Conatel aludió a una averiguación administrativa sobre un uso presuntamente ilegal de una frecuencia y que, de "determinarse tal incumplimiento" de la ley, se tomarán las acciones correspondientes.

El presidente Chávez, aludiendo indirectamente a este hecho, declaró que "el Chávez permisivo se acabó. Estamos atentos y estaremos a cualquier exceso, sobre todo de los medios de comunicación, para aplicar la ley cuando haya que aplicarla, y Conatel es consustancial a los principios de la democracia".

El gobierno venezolano inició en febrero pasado procesos de investigación a varias televisoras privadas opositoras que apoyaron la huelga de 63 días, entre diciembre y febrero pasado, que buscaba el derrocamiento de su gobierno tras el fallido golpe de Estado anterior en su contra.

Asimismo, en febrero pasado Conatel multó con 34 mil 500 dólares a Globovisión por evasión fiscal.

Con todo, la acción del gobierno fue rechazada unánimemente por los partidos de oposición y los gremios empresarial y de prensa. Voceros de esos sectores afirmaron que se busca coartar la libertad de expresión, y lo asociaron a la situación de acoso que vive el gobierno ante el referéndum revocatorio contra Chávez.