El árbitro provocó que se calentaran los ánimos contra Perú, alegan los tricolores

No hicimos un mal juego, pero la defensa no funcionó: Briceño

MIGUEL ANGEL RAMIREZ

Haber iniciado "un poco dormidos", los errores "infantiles", la cancha sintética y que el árbitro permitiera las entradas mal intencionadas fueron algunas razones de los seleccionados mexicanos para explicar su decepcionante actuación del pasado miércoles ante Perú.

Ayer sólo los tricolores manifestaron su sentir. El técnico nacional, Ricardo La Volpe se quedó en Estados Unidos y hasta hoy se espera su regreso a nuestro país.

Para Omar Briceño, uno de los cuatro expulsados en el encuentro, "el resultado (3-1) no refleja tanto lo que sucedió en la cancha". Aseguró que el Tri "no hizo en realidad un mal partido. Estuvo triangulando bien al frente, tuvimos llegadas, pero desgraciadamente no se nos dieron las cosas en la defensiva".

Además consideró que los peruanos "iniciaron con todo y nosotros un poco dormidos. No nos debe pasar eso. Estuvo mal, y lo errores infantiles que tuvimos atrás, pues menos".

Omar dijo que "el árbitro propició que se empezaran a calentar los ánimos. Ellos empezaron a pegar, a levantar el codo" y no hizo nada. Estimó que Bryan Hall es de los silbantes que "pueden calmar las cosas antes", pero al no hacerlo el partido se le "va de las manos".

Aunque él también aceptó su error "al llegar a golpear también" en el conato de bronca. Pero lo hizo "porque vi que golpearon por atrás a Osorno; son calenturas, me equivoqué, porque nosotros somos los que tenemos que poner el ejemplo".

Jared Borgetti, el otro expulsado, apuntó que además del arbitraje "jugamos en una cancha de pasto sintético y, obviamente, uno no está acostumbrado, tampoco ellos. Pero lo principal aquí es que regalamos el primer gol.

"Antes del minuto ya íbamos perdiendo. El segundo fue un descuido de la defensa, no está bien coordinada, queremos dejar el fuera de lugar y lo dejamos habilitado, y ya el 2-0 pues siempre pesa. Después en una jugada que intentamos salir armando y nos la roban viene el tercer tanto".

Recordó que en la Copa Oro no les pasó nada de eso, "pero hoy nos pasaron las tres cosas en un solo partido".

Aseguró que Perú les ganó "por los goles que regalamos, no porque futbolísticamente haya sido mejor que nosotros. Por ejemplo, en el segundo tiempo el equipo se va encima del rival, con oportunidades. Creo que eso es lo que al final Ricardo tiene que valorar".

Sobre lo sucedido en el túnel, luego de sus expulsiones, confesó que a él también le sorprendió ver que sus compañeros llegaban corriendo. "Yo volteo, miro a los demás y les digo: a qué vienen, nosotros estábamos muy tranquilos, Briceño y Pizarro ya estaban en el vestidor. Se confundieron".

Oscar Pérez, en tanto, dijo que fue un juego difícil, "porque también el árbitro permitió muchas patadas y eso, con el marcador, fue creando una bolita de nieve que al final estalló un poco, pero lo importante es que no pasó a mayores".

El Conejo también confesó su tristeza, porque "no es nada agradable" reaparecer con la selección nacional y aceptar tres goles.