Luis Javier Garrido

El tráfico

El tráfico de influencias no es únicamente el mecanismo más usual para el enriquecimiento personal de funcionarios, sino que en estos años de neoliberalismo se tornó en el mecanismo principal para propiciar la sumisión de los estados nacionales al capital trasnacional, aspecto central de la corrupción que parece olvidarse.

1. El cese por tráfico de influencias del aventurero italiano Guido Belsasso, quien fungía como comisionado del Consejo Nacional contra las Adicciones con rango de subsecretario de Salud, fue presentado por Presidencia en un boletín de prensa, al más puro estilo priísta, como "una renuncia" (inexplicable), mientras muchos medios se empeñan en decir que es "el primer" escándalo de este género en lo que va del sexenio, ignorando que buena parte de los integrantes del gobierno, encabezados por Fox, se han significado por haber hecho del tráfico de influencias un motivo fundamental de su quehacer político y administrativo, y que un rasgo fundamental del régimen foxista, heredado del priísmo, es la impunidad de quienes gobiernan.

2. El caso Belsasso no ha sido menos descarado que los de otros miembros del actual gobierno, y sin embargo no será procesado penalmente, a pesar de las evidencias en su contra, ya que siguen vigentes dos normas "no escritas" del antiguo régimen que Fox ha hecho suyas: a) los funcionarios del gobierno son por regla impunes y pueden actuar en el ejercicio de su cargo por encima de la ley, y b) la corrupción sólo se sanciona cuando va acompañada del error político.

3. La continuidad de prácticas entre los tecnócratas priístas de Salinas y de Zedillo y los tecnócratas y empresarios de Fox no sorprende porque son los mismos y responden a los mismos intereses. Días antes de que estallara el caso Belsasso se hizo público que Raúl Arriaga (subsecretario de Gestión para la Protección Ambiental) otorgó ilegalmente desde 2001 más de 92 mil permisos de caza por motivos oscuros, pero nada se le hizo, pues el ex colaborador de Fox en Guanajuato goza de la amistad de Eduardo Sojo y de Marta Sahagún y de la protección de Fox, quien no ha considerado necesario sacrificarlo.

4. El "tráfico de influencias" afecta al proyecto nacional, como se ha evidenciado con los Amigos de Fox, que financiaron la campaña y han sido los principales benericiarios del "nuevo régimen", con decisiones aberrantes, como la expropiación de ingenios azucareros, decretada ilegalmente por Fox y anulada por fallo de la Suprema Corte, la cual no buscaba salvar la industria ni defender los derechos de los trabajadores, sino salvaguardar los intereses de Coca-Cola y de los embotelladores del Grupo Continental, que financiaron de manera ilegal la campaña, pues a) Fox no incluyó en su decreto dos ingenios en los que tenían intereses Lino Korrodi, Purita Leonor Guillermoprieto y el gobernador nayarita Antonio Echeverría -el Adolfo López Mateos y el Tres Valles-, y b) buscó reorganizar la industria azucarera y subsidiarla en función de los intereses de los refresqueros.

5. Los escándalos de "tráfico de influencias", que no se han saldado con la remoción del funcionario, son incontables en estos tres años, desde el de múltiples integrantes de los Amigos de Fox, que tienen cargos en el gobierno, de donde han buscado recompensar a los empresarios que financiaron ilícitamente la campaña foxista, hasta el de Diego Fernández de Cevallos, quien aprovecha el poder y la influencia como senador y como hombre al que teme Fox para litigar exitosamente y ganar casos en los que no lograría triunfar de no tener cargo público. Y ello se debe no sólo a las conexiones políticas de los implicados, sino sobre todo a una razón: han disfrutado, como en los años del priísmo, de protección presidencial.

6. Los integrantes del equipo presidencial, inmersos en la lógica del tráfico de influencias, parten de la concepción neoliberal errónea, que en su oportunidad tuvieron Salinas y Zedillo, de que en el actual gobierno, al servicio de los empresarios, no tiene por qué haber delimitación entre lo público y lo privado y pueden tener la doble calidad de empresarios y funcionarios públicos, con lo que desconocen el régimen jurídico del país y una noción elemental de nuestras leyes: en México no se puede al mismo tiempo servir al Estado y a grupos empresariales privados.

7. En el sistema constitucional mexicano no está permitido acumular mandatos ni servir al mismo tiempo a dos poderes de la Federación, ni menos mantener cargos privados mientras se desempeña la función pública. Ello no admite discusión y no sorprende que los interesados no tengan argumentos para justificar lo injustificable y que Fernández de Cevallos argumente que de no aceptarse esta tesis muy pronto el Senado y la administración pública se llenaría de gente mediocre, o que el abogado Diego Valadés (ex colaborador de Salinas) sostuviera que impedir a los funcionarios hacer negocios implicaría dejar de ser "un país de libertades".

8. El tráfico de influencias muestra que sigue vigente otra regla no escrita del príismo: el Presidente de la República no ha dejado de ser impune. Vicente Fox ha sido señalado por estar entregando las riquezas estratégicas de México a trasnacionales como pago al financiamiento que otorgaron a su campaña, y de ser el principal traficante de influencias, y los otros dos poderes de la Unión no han actuado como deberían, en función de sus responsabilidades constitucionales, máxime que se atenta contra la seguridad del Estado y la viabilidad de la nación.

9. Que el gobierno foxista haya estado constituyendo una industria eléctrica y una industria petrolera paralelas en contravención a la ley Ƒacaso no constituye el más grave caso de tráfico de influencias que haya conocido México?

10. Los mecanismos legales y políticos no han sido suficientes para terminar con todo este trafique de influencias que comprometen el futuro de México. Y sin embargo, la movilización popular lo ha logrado al impedir que Fox entregue a quienes financiaron su campaña proyectos como el Plan Puebla-Panamá, frenado por los campesinos indígenas zapatistas, o el proyecto del aeropuerto internacional, detenido por los campesinos de Atenco, y ésa es una lección para el futuro.