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México D.F. Miércoles 23 de julio de 2003

Si están muertos, se plegarán a la lucha los perseguidos por el régimen del partido Baaz

Incrementará muerte de los hijos de Hussein la resistencia iraquí

Sunita y no de "remanentes" del gobierno derrocado, principal oposición al proconsulado de EU

ROBERT FISK ENVIADO ESPECIAL

Bagdad, 22 de julio. Así que están muertos. Pero, Ƒde verdad lo estarán? Hasta Bagdad estalló en una ensordecedora celebración de disparos de rifles automáticos ante esa noticia.

La casa de Mosul, quemada y repleta de plomo, los cuatro cadáveres acribillados: las esperanzas, por demás vanas, de Estados Unidos de que la muerte de los dos hijos de Saddam Hussein, Uday y Qusay, debilite la resistencia guerrillera contra las tropas de ocupación: todos estos elementos conspiraron para producir, la noche del martes, una ilusión: que los cuerpos no identificados hallados después de un tiroteo de cuatro horas entre pistoleros iraquíes y fuerzas estadunidenses deben ser de los hijos del ex dictador, porque el mundo quiere que lo sean.

Desde luego, es posible que estén muertos. Se dice que dos de los hombres tienen un parecido impresionante con los hermanos. Otro de los cuatro muertos, un niño de 14 años, podría ser uno de los nietos de Saddam.

La casa era propiedad de Mohamed el Zidani, aliado tribal de la familia Hussein.

Qusay era líder de la Guardia Republicana, blanco específico de los estadunidenses. Y está claro que los dos hombres adultos pelearon furiosamente contra los 200 soldados estadunidenses que rodearon la casa.

Fuerza de elite para matar

Los estadunidenses utilizaron la llamada Fuerza de Tarea 20 para atacar la casa de estilo seudoneoclásico ubicada en una avenida que atraviesa Mosul. La Fuerza 20 está integrada tanto por soldados de las tropas especiales como por agentes de la CIA.

Se trata de la misma fuerza que voló un convoy que se dirigía a Siria a principios de este mes, con todos sus ocupantes. Se suponía que Saddam Hussein y sus dos hijos viajaban en dicho convoy, pero las víctimas resultaron ser simples contrabandistas.

Y la inteligencia estadunidense, la organización que no fue capaz de predecir los acontecimientosmdf33955 del 11 de septiembre de 2001, también fue responsable de un ataque aéreo sobre una casa de descanso de Saddam Hussein, el 20 de marzo, en el que supuestamente moriría el dictador.

Así como del mucho más cruel ataque aéreo sobre el distrito de Mansour, en Bagdad, ocurrido tras los bombardeos de saturación de abril anterior, en el que también se intentó matar a Saddam y a sus hijos, pero sólo se logró asesinar a 16 civiles inocentes. Todos resultaron miserables fracasos.

En una familia obsesionada, y con razón, por su seguridad personal Ƒsería lógico que Uday y Qusay estuvieran juntos? ƑSe colocarían en una trampa? ƑLos dos llamados "leones de Irak" (apodo cortesía de Saddam) en la misma jaula?

Saddam pasó sus primeros años a salto de mata. Siempre viajaba solo. En la adversidad, la familia aprendió a mantenerse separada, como lo hizo durante la Guerra del Golfo, en 1991, y en la invasión a Irak de marzo pasado.

Hasta cuando estaban en el poder Saddam y sus hijos se mantenían ocultos.

Apéndices del rey

Aun si un análisis de ADN comprueba que son los cadáveres de los hijos de Saddam, Ƒlo creerán los iraquíes? ƑY pondrá esto fin a la guerra de guerrillas? En primer lugar, incluso si Uday y Qusay han muerto, sin duda Saddam Hussein sigue con vida.

Si bien Uday era un hombre cruel y un sicópata, él y su hermano no eran sino apéndices del rey, meros ayudantes en la cueva del monstruo. Saddam vive y su voz grabada aún se escucha en todo Irak. Es el destino de Hussein el que interesa a los iraquíes.

En segundo lugar, y de mucho más importancia, existe un malentendido fundamental entre las autoridades estadunidenses de ocupación en Irak y el pueblo cuyo país ocupan.

Estados Unidos está convencido de que toda la resistencia a su proconsulado en Irak proviene de "remanentes" de los seguidores del derrocado mandatario iraquí, "los acorralados", "los que quieren combatir hasta el final", que son otras frases con las que los describen. Su teoría es que una vez que la familia Hussein sea decapitada, la resistencia terminará.

Pero los guerrilleros que matan soldados estadunidenses día con día también son atacados por un creciente movimiento sunita islamista que nunca tuvo cariño alguno por Saddam.

Lo más importante: muchos iraquíes se mostraban renuentes a apoyar a la resistencia por temor de que el fin de la ocupación estadunidense implique el regreso del terrible dictador.

Si él y sus hijos han muerto, lo más probable es que la resistencia a la ocupación encabezada por Estados Unidos crezca en vez de disminuir, sobre la base de que, si Saddam se ha ido, los iraquíes contrarios al derrocado partido Baaz no tendrán nada que perder al combatir a los estadunidenses.

 

© The Independent

Traducción: Gabriela Fonseca

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