México D.F. Jueves 3 de julio de 2003
Tenemos enfermedades de un país europeo
con gasto para la salud de nación africana: Ssa
Diabetes e hipertensión afectan cada vez con
más frecuencia a sectores pobres
Más de 20% de los niños en Chiapas,
con dificultades para acceder a servicios médicos
ANGELES CRUZ
Diabetes, hipertensión y otras enfermedades crónicas
son los nuevos males de la pobreza, además de que en el país
persisten rezagos como el difícil acceso a los servicios de salud
que padece 20 por ciento de los niños en Chiapas, revela la Encuesta
Nacional de Salud (Ensa) 2000.
En prevención del cáncer cérvico
uterino también existen deficiencias. Una tercera parte de las mujeres
que acuden a realizarse la prueba de Papanicolau no regresan a recibir
el resultado, lo cual llama la atención, porque 10 por ciento de
quienes sí conocen las conclusiones del análisis presentan
alguna anormalidad, explicó Gustavo Olaíz, investigador del
Instituto Nacional de Salud Pública (INSP).
La Academia Nacional de Medicina y el INSP organizaron
ayer una sesión conjunta de trabajo para presentar los datos recabados
en la Ensa, durante la cual Olaíz también resaltó
que únicamente 10 por ciento de las mujeres se habían practicado
la prueba de detección de cáncer de mama. Esta enfermedad
es la segunda causa de muerte por tumores en la mujer.
Para el secretario de Salud, Julio Frenk Mora, la principal
causa del rezago sanitario es el bajo nivel de inversión en el sector.
Aseguró que actualmente las instituciones tienen la capacidad de
salvar la vida de los bebés que nacen con bajo peso o a quienes
sufren un infarto al miocardio.
Entrevistado al término de la conferencia, el funcionario
dijo que también se puede controlar y dar una buena calidad de vida
a un niño con diabetes o rehabilitar a los menores con parálisis
cerebral. La ciencia nos ha dado las herramientas. Sin embargo, el problema
es que "tenemos enfermedades de un país europeo con gastos de salud
de un país africano. Así los servicios no pueden funcionar",
subrayó.
México destina 5.7 por ciento del producto interno
bruto a la salud, cifra que está por debajo del promedio latinoamericano
(6.5 por ciento). Ese es el nivel del atraso que se refleja en que la población
más pobre tiene que erogar de su bolsillo el costo de la atención
médica que recibe. Frenk Mora insistió en que la reforma
a la Ley General de Salud, aprobada recientemente por el Congreso de la
Unión, pretende que el financiamiento público de la salud
sea solidario y compartido entre todos.
Miguel Angel Lezana Fernández, coordinador de asesores
de la Ssa, resaltó que por la falta de protección en sus
relaciones sexuales que reporta 75 por ciento de los adolescentes, la mitad
de las mujeres menores de 19 años con vida sexual activa ha tenido
al menos un embarazo.
Según la Ensa 2000, cuyos resultados se aplican
a toda la población mexicana, 15.3 por ciento de los jóvenes
tienen su primera relación sexual a los 15 años en promedio,
pero entre los 18 y 19 años, 40 por ciento de los muchachos ha iniciado
su vida sexual.
Lo grave en ese terreno es que 78.8 por ciento de las
mujeres y 46.6 por ciento de los hombres lo hacen sin ninguna protección
contra enfermedades de transmisión sexual o embarazos. Lo anterior
a pesar de que dos terceras partes aseguran conocer los métodos
anticonceptivos y 80 por ciento sabe de la existencia del condón.
Con respecto a los niños, Gonzalo Gutiérrez
Trujillo, coordinador nacional de Salud Pública del Instituto Mexicano
del Seguro Social (IMSS), destacó que 60 por ciento de los menores
de 0 a 10 años no tiene acceso a las instituciones de seguridad
social. La escasa cobertura de los servicios salud se refleja principalmente
en las zonas rurales, donde uno de cada seis embarazos carece de la atención
prenatal y casi 30 por ciento de los partos ocurren fuera de las unidades
médicas. En Chiapas, este porcentaje se eleva hasta 65 por ciento
y a escala nacional el promedio es de 15.
De acuerdo con la Ensa 2000, 30 por ciento de los niños
menores de un año tiene incompleto el esquema de vacunación
y en el rango de uno a cuatro años, la deficiencia se ubica en 13.8
por ciento. Nuevamente resalta el caso de Chiapas, donde más de
20 por ciento de la población infantil reporta esta carencia.
Al inicio de la sesión, Jaime Sepúlveda,
director del INSP, dio cuenta de la metodología de la Ensa 2000.
Comentó que la entrevista se aplicó en 8.5 millones de viviendas
del ámbito rural, de las cuales en 60 por ciento el nivel de cloro
en el agua estaba por debajo de lo establecido en la norma.
En la investigación es la primera vez se toman
muestras de sangre de los adultos para conformar el primer banco de ácido
desoxirribonucleico (ADN) del país.
Al hacer una síntesis de los resultados, Sepúlveda
mencionó que el sobrepeso y la obesidad son problemas que afectan
a dos terceras partes de las mujeres mexicanas mayores de 40 años
de edad, situación que está directamente relacionada con
la prevalencia de diabetes, hipertensión arterial y otras enfermedades
crónico degenerativas.
La hipertensión arterial afecta a más de
la mitad de la población mayor de 50 años y después
de los 70 años; 60 por ciento de las mujeres padece ese mal, explicó
Olaíz, quien también alertó sobre el incremento en
la prevalencia de los padecimientos crónico degenerativos. La presencia
de dichas enfermedades es cuatro veces mayor entre los sectores de la población
con menor nivel educativo, dijo.
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