"Está a un paso de pertenecer a países que otorgan oportunidades para lograr una vida larga"

México tiene un índice medio alto de desarrollo humano, señala el PNUD

El organismo puntualiza la desigualdad que hay entre entidades como el Distrito Federal y Chiapas

ALMA E. MUÑOZ

El Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) sostiene que México tiene un índice de desarrollo humano (IDH) medio alto a escala internacional, pero enfatiza que internamente posee un fuerte grado de desigualdad, pues mientras el Distrito Federal alcanza un ingreso per cápita de 22 mil 816 dólares anuales, en Chiapas apenas se llega a 3 mil 549. Es decir, la entidad con mayor producto por persona supera en 6.42 veces a la que menos genera en esta materia.

En el terreno educativo, la ciudad de México alcanza un máximo de 96.97 por ciento, tomando como referente la alfabetización, contra 76.96 que registra la entidad sureña y juntos, Chiapas y Oaxaca, alcanzan tasas de mortalidad 1.6 veces mayores que las registradas por el Distrito Federal y Nuevo León.

De acuerdo con los datos presentados ayer por el representante residente del PNUD en México, Thierry Lemaresquier, en la sala Manuel M. Ponce del Palacio de Bellas Artes, ningún entidad mexicana -ni siquiera los eminentemente rurales, con todo y ser equiparables a los estándares que registran Cabo Verde y El Salvador- tiene un IDH bajo. Por el contrario, enfatiza, hay 18 estados con nivel medio, y 14 con alto. Incluso establece que la capital del país tiene un índice similar al de Hong Kong, Israel, Grecia o España, mientras Nuevo León es comparable con la República Checa y supera a todas las naciones de América Latina.

Ante la satisfacción de los integrantes del gabinete de Desarrollo Humano -integrado por los secretarios de Salud, Julio Frenk; de Desarrollo Social, Josefina Vázquez Mota, y de Educación, Reyes Tamez-, se estableció que México se encuentra a un paso de pertenecer al grupo de naciones que otorgan a los individuos "oportunidades para que con libertad alcancen una vida larga y saludable; puedan adquirir conocimientos individual y socialmente valiosos, y tengan la oportunidad de obtener los recursos necesarios para disfrutar de un nivel de vida decoroso", según la definición que otorga a esta medición el propio PNUD.

El IDH puede ubicarse entre cero y uno. Alcanzar la unidad significa el máximo posible en cuanto a los avances en dichos rubros, y se estipula que una nación cuenta con un nivel de desarrollo humano alto cuando el índice es mayor o igual a 0.8; medio, si oscila entre 0.5 y 0.7999, y bajo si es menor o igual a 0.4999.

A partir de cruzar información del Banco Mundial y de cuentas nacionales, por primera vez se aplicó esta herramienta para México, país que junto con Haití carecía de la misma en Latinoamérica. No obstante, los registros -con base en datos de 2000- lo ubican, dentro de un conjunto de 173 países, en la posición 54, por encima de Cuba y Bulgaria, con un IDH de 0.796, y sólo Turquía, tratándose de naciones integrantes de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico, se encuentra 30 lugares por debajo de lo registrado para los mexicanos.

Para el PNUD es imperativo que México disminuya los rangos de desigualdad que presenta en el ámbito interno. Ilustra, con base en un cuadro estadístico, que las cinco entidades federativas con mayor ingreso per cápita (Distrito Federal, Nuevo León, Baja California, Chihuahua y Coahuila) concentran 37.05 por ciento del producto interno bruto (PIB), encontrándose en ellas 17.5 por ciento de la población total; mientras, los cinco estados con menos acceso a recursos (Chiapas, Oaxaca, Guerrero, Veracruz y Michoacán) y que concentran 13.09 por ciento de la población, tienen sólo 6.07 por ciento del PIB.

Para establecer las diferencias regionales, el organismo toma como referencia al Distrito Federal, por ocupar la primera posición en la lista, y a Chiapas por ser la 32. Mientras el primero está 10.1 por encima del estado sureño en el indicador de esperanza de vida, la desigualdad aumenta a 23.5 por ciento en el índice de educación y a 52 puntos en ingreso per cápita.

Aunque considera que el crecimiento económico otorga al desarrollo humano la ampliación de las capacidades básicas de los individuos, en el caso mexicano da cuenta que para algunos estados existe un proceso virtuoso con la unión de dichos elementos, pero también existen otros "atrapados en la zona de círculos viciosos".

Los secretarios de Estado presentes en el acto coincidieron con los planteamientos allí descritos y se comprometieron a impulsar, desde el gabinete de Desarrollo Humano, cambios en las políticas públicas para disminuir las disparidades señaladas por el PNUD entre las entidades federativas.

Vázquez Mota sostuvo que los resultados expuestos, lejos de generar acciones defensivas, les impulsan a rectificar aquellas que no están arrojando resultados positivos, mientras Julio Frenk y Reyes Tamez afirmaron que es necesario hacer crecientemente eficientes los instrumentos hasta ahora puestos en marcha para, en el caso del índice per cápita, reducir la diferencia de 52 por ciento entre la entidad con el nivel más alto de desarrollo humano y la de menor rango.