El América organizará un juego de despedida para el que fue su mayor goleador

Mi mayor satisfacción fue haber llegado al selectivo, dice Zague

No voy con Necaxa a Aguascalientes porque los años ya me pesan, asegura Luis Roberto

Gracias al futbol, todos mis sueños se convirtieron en realidad, expresó el ahora ex necaxista

MARLENE SANTOS A.

"Todos mis sueños de niño se convirtieron en realidad gracias al futbol", expresó ayer un emocionado Luis Roberto Alves, Zague, al anunciar su retiro como futbolista en conferencia de prensa, donde no se cansó de agradecer a los medios de comunicación, directivos, técnicos, compañeros y afición, por todo el cariño y apoyo brindado a lo largo de 18 años de carrera.

De traje beige e impecable presentación, el espigado romperredes habló sin parar durante casi una hora con su singular castellano inundado de acento portugués. El mismo reflexionó: "Sé que hablo medio raro, medio chistoso ¡pero soy mexicano! Nací en el Sanatorio Español". Y aunque su infancia y casi toda la adolescencia las vivió en Brasil, la tierra de sus padres, siempre se consideró mexicano.

Sin titubear respondió a la pregunta sobre su más grande satisfacción: "Llegar a la selección nacional. Fue un orgullo impresionante. Y es que en Sao Paulo, cuando tenía 10 años estábamos al pendiente del Mundial de Argentina en 1978, iba a una escuela de padres españoles de la orden de San Agustín, a México no le fue muy bien y fui blanco de burlas de los padres y de mis compañeros, quienes sabían que yo era mexicano.

"Antes, para mí todo pintaba para que fuera corredor de coches, pero desde ese momento me metí en la cabeza la meta de defender a mi país con cuerpo y alma. Fue una obsesión que se convirtió en realidad." Luis Roberto, hoy a sus 36 años, reconoció que no fue fácil: "Aquí llegué a los 17, casi 18 años, con una mano adelante y otra atrás,comencé a jugar tratando de recalcar el nombre de Zague, de mi padre, en el futbol mexicano".

Luis Roberto acumula toda clase de récords: anotó un total de 209 goles y es el cuarto mejor anotador en la historia de la liguilla, con 21 tantos, tiene la marca Guinness al registrar 7 goles en un mismo partido contra Martinica en la Copa de Oro de 1993. Es el máximo goleador en la historia de los clásicos América-Chivas, con 11 anotaciones, y mayor goleador en la historia del América, con 162 tantos.

El hijo del Lobo Solitario -así era el apodo de su padre- ahora cosecha lo sembrado y por lo pronto, al conocer la decisión del retiro que hoy hizo oficial en un gimnasio de su propiedad, Javier Pérez Teuffer, directivo de Aguilas le ofreció un partido de despedida; por ello será incluido en la plantilla del América de cara al próximo torneo, pero dejó bien claro que solamente jugará ese juego del adiós, en fecha por establecer.

Asimismo lamentó no poder acompañar a su actual equipo, Rayos del Necaxa, en su aventura rumbo a Aguascalientes, no por desdén hacia esa ciudad, lo subrayó mucho: "No subo a ese barco porque el viernes (23 de mayo) cumplí 36 años e infelizmente ya me pesan... ojalá tuviera dos años menos, entonces seguramente iría".

Así, el futbolista de privilegiada zurda que militó en América, Atlante y Necaxa se declaró listo para emprender nuevos derroteros y metas, quizá como directivo, "pero no como técnico". Por lo pronto se dará un tiempo para reflexionar.