Homenaje en el Instituto Mora por el aniversario de su natalicio

Velada con 30 poetas que refrendaron la vigencia del Nobel Octavio Paz

Refrendó la viuda del escritor el anuncio del FCE de editar el tomo XV de sus obras completas Fue enemigo de todos los fundamentalismos, recordó Eduardo Lizalde

CESAR GÜEMES

En la persona de Marie Jose Paz, presente en el Instituto Mora, la figura de Octavio Paz recibió el homenaje que tres decenas de poetas le brindaron con motivo del aniversario de su natalicio (31 de marzo de 1914). Discreta, la señora Paz refrendó en un aparte el anuncio del Fondo de Cultura Económica (FCE), casa editorial organizadora del homenaje, a propósito de la edición del tomo XV, Miscelánea III, Entrevistas, de las obras completas del Nobel mexicano.

Eduardo Lizalde, uno de los participantes, a propósito de la vigencia de Octavio Paz, cuyo nombre convocó la noche de este lunes a por lo menos 150 personas, dijo a La Jornada: ''La de Paz es una vigencia indiscutible. Se encuentra vivo el pensamiento de autores y ensayistas que murieron hace tres siglos, mientras que Octavio casi acaba de fallecer. Paz no sólo se caracteriza por ser el más grande poeta de su generación y uno de los mayores en México, sino por haber sido el crítico más lúcido de la literatura y el pensamiento del siglo XX. El fue siempre enemigo de todos los fundamentalismos, con todo lo perseguido y atacado que esta posición le generó. Lo recuerdo intachable e intransigente en cuanto a sus principios. El siglo XX va a ser seguramente el de Octavio Paz".

Hombre en llamas

-¿Era complejo ser su amigo?

-Lo es serlo de toda persona inteligente y con moral firme. Con Octavio no sólo había que compartir agradablemente una amistad sino luchar incansablemente. Era un hombre en llamas, como decía Ortega y Gasset de Miguel de Unamuno, un hombre siempre en guardia, dispuesto al análisis, al combate y la defensa de sus ideas, aunque también sabía escuchar. Decía que no era un sociólogo ni un historiador, pero fue atacado durante 40 años por decir que el socialismo real era una ficción. Y que conste que no lo dijo solo, sino acompañado por André Breton. Y luego lo dijimos muchos escritores. Yo fui militante comunista y expulsado de partidos que incluso fundé. Escribí artículos contra la dictadura estaliniana que se publicaron en su momento. Tengo 40 años de criticar al llamado socialismo real, Octavio tenía 50 y no le faltó razón.

El homenaje, en el Instituto Mora, fue una lectura de poesía y contó con la participación inicial del Coro de Niños del Colegio Williams, del cual fue alumno el autor de Piedra de sol. En rondas de cinco se turnaron el micrófono con creaciones propias Alí Chumacero, Ramón Xirau -quien leyó en castellano y catalán-, María Baranda, Alberto Blanco y Coral Bracho. A la primera ronda siguió un saludo poético de José Emilio Pacheco, quien está en Estados Unidos impartiendo cátedra, más la lectura de textos a cargo de Hugo Gutiérrez Vega, Adolfo Castañón, Jennifer Climent, Luis Cortés Bargalló y Elsa Cross.

Enfriaba ya la noche cuando tocó turno a Ulalume González de León, quien leyó textos suyos y de Jorge Hernández Campos, mientras que dieron curso a sus respectivas participaciones Jorge Fernández Granados, Malva Flores y Miguel Angel Flores. Casi al cierre, Eduardo Lizalde leyó lo suyo y un envío del siempre respetado Gabriel Zaid, le siguieron en la voz Luis Ignacio Helguera, Eduardo Hurtado, Tedi López Mills y Francisco Hinojosa. Las dos rondas finales estuvieron compuestas por David Medina Portillo, Víctor Manuel Mendiola, Sergio Mondragón, Jaime Moreno Villarreal y Ricardo Pozas. Por último, de acuerdo en principio al orden alfabético, aparecieron en escena José Luis Rivas, Francisco Segovia, Francisco Serrano, Víctor Sosa, Verónica Volkow y Ricardo Yáñez.

Poesía para Paz en la fecha de su cumpleaños, a poco más de dos semanas del quinto aniversario de su fallecimiento, ocurrido el 19 de abril de 1998.