La pizarra, 16-11, en desafío de 11 entradas y tres horas 58 minutos de duración

Los Mets se adjudicaron el primero de los dos juegos ante los Dodgers

El jonrón del cubano Jorge Toca quebró el empate y comenzó el ataque neoyorquino

JOSE GARDUÑO GOMEZ

En un clásico juego de pretemporada, de decenas de cambios ordenados por los manejadores de las escuadras contendientes para ver el accionar de sus jugadores para la inminente campaña de las Grandes Ligas de beisbol, los Mets de Nueva York se impusieron en feria de imparables 16-11 a los Dodgers de Los Angeles, en duelo de 11 entradas, ayer en el Foro Sol ante unos 22 mil espectadores.

El ampayer principal fue el zacatecano Alfonso Márquez.

Los de la Urbe de Hierro utilizaron a 24 peloteros en el desafío, en tanto que los Dodgers a 26, en el primero de los dos de esta Serie de Primavera, que tuvo una duración de casi cuatro horas, 3:58 horas, para ser exactos, con miles de aficionados soportando en las tribunas un candente sol.

Se conectaron en total 31 imparables, 17 por los vencedores y 14 por los derrotados.

El encuentro se empató 11-11 cuando los Dodgers anotaron en tres ocasiones en la octava. En la novena y décima entradas no se hicieron daño y vino entonces el undécimo episodio con cuadrangular del cubano Jorge Toca, de línea por entre los jardines central y derecho, los Mets se fueron arriba en la pizarra 12-11, y luego anotarían otras cuatro para sentenciar el partido 16-11, con racimo de cinco anotaciones más.

Ahora que, en ese racimo, mucho tuvo que ver el garrafal error del taiwanés Chin Feng Chen, que no pudo fildear un fácil palomón de Tony Clark a la pradera izquierda, cuando Marc Scultaro estaba en primera, con hit de piernas. Entonces José Reyes recibió base intencional para que la casa se congestionara, y un pasaporte a John McEwing produjo de caballito una más, sólo para que viniera Timo Pérez y con doblete al derecho trajo a casa tres anotaciones adicionales.

En la cuarta, Nueva York se puso 7-4 con jonrón por el central del puertorriqueño Roberto Alomar.

Vance Wilson también pegó cuadrangular por los neoyorquinos, en el octavo, con un compañero por delante.

Este domingo, a partir de las 12 horas, en el mismo escenario, están anunciados como abridores Odalís Pérez por los Dodgers y Tom Glavine por lo Mets, en duelo de zurdos. Y quizá, como relevista largo, pueda aparecer el sinaloense Víctor Alvarez, también izquierdo, por los angelinos.

El jonrón del cubano Toca

Fue una recta afuera la que le prendió el cubano Toca a Dave Martin para anotar su cuadrangular que rompió el empate en la parte alta de la decimoprimera entrada. Toca, un desertor de la isla, de la que salió en una balsa, y que antes de firmar con un equipo estadunidense pasó 17 días en una prisión de Bahamas, de ahí se fue a Japón, donde obtuvo un visado estadunidense, fue uno de los pilares del equipo nacional de Cuba, en el cual se desempeñó como primera base en las temporadas 1994 y 1995. Con la novena de Villa Clara, su provincia, logró tres campeonatos nacionales. Toca, quien busca un lugar en el primer equipo de los de Nueva York, aceptó que en el Foro Sol la pelota vuela bastante, "nada más la conecté", afirmó.

Por su parte, Art Howe, el manejador de los Mets, declaró que lo importante fue que el equipo nunca se dio por vencido, a pesar de haber sido alcanzado en la pizarra y ratificó que su astro, Tom Glavine, abrirá el partido dominical.

Ambas novenas viajan escoltadas por agentes de seguridad de la FBI, afirmó un funcionario de la Major League Baseball, organización que trajo hasta un cuidador de campo, Marvin Cook, quien encabeza una compañía que se encargó de las instalaciones olímpicas en Sydney 2000, y lo hará también en Atenas 2004.

El jugador más aplaudido durante las presentaciones fue nada menos que el receptor de los Mets, Mike Piazza, quien más tarde, en entrevista de prensa, agradeció las muestras de simpatía de que tanto él como los peloteros de las dos novenas fueron objeto por parte del público.

Durante la conversación le recordaron a Piazza su paso por las Aguilas de Mexicali, de la Liga Mexicana del Pacífico, y señaló que indudablemente esa fue una gran experiencia para llegar a donde ahora está.

Le dijeron que estaba considerado como el mejor receptor del momento en las Grandes Ligas, y con gran modestia dijo que no lo sentía así. Pero que continúa trabajando intensamente para que más que lucirse personalmente, haga lo necesario para que triunfe su equipo y esté en la próxima Serie Mundial.

Con respecto de los agentes del FBI que acompañan a los dos equipos, precisó que esas medidas de seguridad obedecen a la incertidumbre internacional, "y de ninguna manera porque hayamos venido a México".

En cuanto a las futuras visitas de equipos de Grandes Ligas, Raúl González, presidente de la Liga Mexicana, dijo que hay pláticas para que el año entrante se dé esta confrontación de nueva cuenta, tanto aquí como en Monterrey.