Presentaron su libro Historia de las historias de la nación mexicana, en Oaxaca
La contradicción es factor esencial en el desarrollo de las sociedades: Florescano
Crear nuevas formas de relación entre las naciones constituye un gran desafío, opina
Más que predominio del canon occidental, persiste un proceso de hibridación cultural
VICTOR RUIZ ARRAZOLA CORRESPONSAL
Oaxaca, Oax., 5 de marzo. La contradicción ''es el elemento fundamental de los procesos histórico y social, el crecimiento de las sociedades esencialmente choca, se enfrenta al otro, se opone, no hay siempre una armonía, sino más bien hay conflictos, choques, pero una u otra de las fuerzas o las múltiples fuerzas que intervienen tratan siempre de que haya un canon, una interpretación definitiva", sostuvo el historiador Enrique Florescano, al presentar su libro Historia de las historias de la nación mexicana.
Editada por Taurus, la obra se presentó al público en la sala de exposiciones temporales del Centro Cultural Santo Domingo, de la ciudad de Oaxaca.
Los comentarios del libro estuvieron a cargo de la historiadora María de los Angeles Romero Frizzi y del antropólogo Claudio Lomnitz, ante más de 200 espectadores, en particular jóvenes estudiantes
Florescano expresó: ''ahora lo que nos enseñan, sobre todo la antropología, la historia social, la historia política, es que muy raras veces en la historia se encuentra esa armonía o integración o cánones completos, sino más bien tenemos una historia irruptiva, una historia que se contradice como ocurre en las casas, en nuestras relaciones que nunca son las mismas".
Sin embargo, ''esto no impide que se lleguen a establecer lazos profundos, primero entre los seres humanos, después entre los sectores que componen la sociedad, pues ahora quizá quienes vivimos en este gran choque de las naciones del mundo planetario que se empieza a crear, pues también vamos a crear nuevas formas de relación entre las naciones, y ese es uno de los grandes desafíos".
El autor de Patrimonio nacional de México y Mitos mexicanos explicó que ''la mayor parte del esfuerzo de la historia positivista hasta la historia académica fue dar una interpretación global de los fenómenos y procesos históricos".
El reto de la memoria visual
Enrique Florescano negó que en su libro, según interpretó Lomnitz, ''busque dar la impresión de que hay un predominio del canon occidental, en el sentido de orden, más bien se trata de un proceso continuo de hibridación, de recomposición, de ajustes entre las distintas culturas, las distintas sociedades o, en este caso, las distintas concepciones de la historia de los distintos pueblos que conforman una nación".
Consideró que ''el gran paso de la antropología y el análisis político, así como la lucha política de los individuos y de los grupos, es la aceptación de la diversidad y de la pluralidad, y eso nos ha enriquecido a los historiadores para no encerrarnos en los cánones militares de la historiografía tradicional, de la positivista o de la marxista, sino que estamos construyendo con distintos conceptos, ideas y teorías de la historia que a veces nos sirven para explicar bien algo y luego los dejamos y tomamos otros que tienen más fuerza explicativa".
Florescano resaltó que ''la memoria oral, los mitos y la memoria visual -quizá una de las más ricas, como enseñan los antropólogos que analizan la organización social de los pueblos asiáticos, mesoamericanos o africanos- son los retos".
Esa ''manera de cómo se representa el mundo, cómo se repite y se enseña esa concepción a los que están participando en las ceremonias, que no sólo se vuelven público sino que son actores de ese acto, por tanto, al participar y actuar en la ceremonia, en el rito, vuelven memorioso ese acto y lo van a repetir, a enseñar a sus hijos y a las generaciones futuras".
Reconoció que esta forma de entender la historia ''antes no se podía aceptar para explicar una forma de pensamiento histórico, pero hoy es indispensable para ver que en ese rito hay toda una concepción del mundo, una manera de pensar la vida y de hacer la historia y esto es una novedad, un discurso que antes no podíamos ver, no lo podíamos imaginar y menos explicar".
Al referirse a la historia prehispánica, dijo que ésta es ''una magnífica manera de comprenderla. Pienso cada vez más que la historia prehispánica sí es cíclica, repetitiva, que está basada en un canon".
