lunes 26 de agosto de 2002
La Jornada de Oriente publicación para Puebla y Tlaxcala México

 
n Anuncian que 800 trabajadores más dejarán la empresa en los próximos 16 meses
Defiende VW su oferta: saturado el contrato con prestaciones; reduce competitividad a la empresa

Francisco Rivas Zerón n

Los directivos de la armadora alemana Volkswagen no sólo rechazaron tener interés en provocar la huelga en la empresa, sino también defendieron su oferta económica propuesta al sindicato, al estar ésta, afirmaron, más cerca de los incrementos salariales otorgados a obreros de otras industrias del sector. Incluso, respecto de la postura de cero prestaciones, Francisco Bada, vicepresidente de la compañía, declaró tajante que el actual contrato colectivo "está saturado", y un aumento en este rubro sólo empeorará las condiciones de competitividad de la planta de Puebla.

El segundo al mando de la transnacional en México hizo énfasis en la urgencia de adoptar esquemas de trabajo y reducir el costo laboral de la armadora para poder conseguir inversión del consorcio y así fabricar en el país nuevos modelos, junto con el desarrollo de proyectos que puedan repercutir en la apertura de nuevas fuentes de empleo.
Empero, resaltó que los mercados nacional e internacional aún no reaccionan y prevén dificultades para una respuesta favorable en las ventas, y por ello anunció que salvo un movimiento brusco de la economía, saldrán en promedio otros 800 empleados sindicalizados en lo que resta del año 2002 y hasta finales de 2003.
Francisco Bada manifestó que existe la disposición de la empresa para evitar un conflicto que perjudique a ambas partes, pero exhortó a los obreros a que también flexibilicen sus pretensiones. Respecto al tema de prestaciones, dejó en claro que Volkswagen no ofrecerá un aumento en este renglón, pues el contrato colectivo de trabajo vigente "está saturado", y un alza adicional traerá como consecuencia señales que mermarán la competitividad de la firma y la pérdida de los proyectos del consorcio alemán.
Explicó que en México ninguna empresa tiene un contrato colectivo con 57 días de aguinaldo, con la participación de sus obreros en el reparto de utilidades haya o no ganancias, y una prima vacacional de 30 días, entre otras.
"Después de tantos años de estar instalados en Puebla, el contrato está saturado, y un incremento más sólo empeorará las condiciones de competitividad de nuestra industria. Parte de los resultados ya se vio, en el último año y medio han salido mil 200 empleados eventuales y 350 sindicalizados, y conforme observamos el escenario económico tenemos reportes de que los mercados no reaccionan, y quién sabe si reaccionen, por lo que tenemos que analizar a fondo esta situación", subrayó tajante.
Eduardo Sotomayor Arechavaleta, director de Relaciones Laborales de Volkswagen, agregó que el obrero no sólo tiene un aguinaldo como en ninguna otra compañía, sino además bajo un sistema de propuestas, si sugieren mejoras en el proceso de la producción que aporten una disminución a los costos de materiales, reciben un incentivo.
Cuentan con el reparto de utilidades que equivale a 60 días de salario, y aun cuando no hay ganancias para la compañía, los trabajadores reciben en promedio 34 días de sueldo.

Esquemas de trabajo

Francisco Bada comentó que Volkswagen propuso a sus empleados dos alternativas de trabajo, implementadas ya en Alemania, con diferentes condiciones salariales y de prestaciones, a fin de conseguir la titularidad de diversos proyectos a realizarse en la planta Puebla.
"Uno de esos esquemas es el conocido como 5 mil por 5 mil, y su arreglo con nuestro sindicato va por buen camino. éste se adoptaría para proyectos no considerados aún en la vida de la empresa o para proyectos que no son consecuencia de los actuales productos de la planta", expuso.
El segundo esquema se denomina "insourcing", y significa que el contrato colectivo de trabajo faculta a la empresa entregar a terceros la posibilidad de llevar a cabo los proyectos asignados a la fábrica, debido a que las condiciones de "otros" son mejores que las que puede ofrecer la fuerza laboral de Volkswagen.
Un tercer punto que se discute en las negociaciones con el Sindicato Independiente de Trabajadores de la Industria Automotriz, Similares y Conexos Volkswagen (SITIAVW) consiste en la participación activa de los obreros en los sistemas de productividad y competitividad, pero de éste -dejó en claro- hay elementos que no pueden ser aceptados bajo ninguna condición en la vida del consorcio.
El directivo expuso que estas opciones deben entenderse como estrategias hacia el futuro en busca de la competitividad.
"Si analizan lo que ha pasado en otras empresas del sector automotriz, como Ford, Chrysler y General Motors, veremos que sus contratos colectivos los orillaron a salirse de la ciudad de México y poner su fábrica en el norte del país; una vez más, se demuestra que el costo de los contratos colectivos jugó un papel fundamental en el cierre de estas fábricas", indicó.
Resaltó que el consejo directivo de la planta en la Angelópolis propuso esquemas laborales para reducir el costo de la mano de obra, pero que no afectará a quienes ya prestan sus servicios en las líneas de producción, sino que se aplicará para las futuras contrataciones.
"Nuestra compañía no sólo compite con otras industrias automotrices, también lo hace al interior, por los proyectos del consorcio, así que tenemos que competir contra plantas en Portugal, Hungría, República Checa, Sajonia -parte de Alemania del este-; debemos mostrar nuestra competitividad en todos los escenarios, no sólo en materiales, sino también en los costos laborales y de mantenimiento, de consumo de electricidad y otros insumos utilizados para el ensamble de los autos", explicó.
Abundó que el denominado 5 mil por 5 mil trajo resultados positivos para una de las plantas ubicadas en Alemania. Con éste, dijo, lograron llevarse el proyecto para producir el modelo derivado del Golf, luego de que además del método de contratación de empleados, ofrecieron condiciones de disminución en el gasto por materiales, incluso por mejores tasas de impuestos.

Más recortes de personal

El vicepresidente de Volkswagen informó que debido a que los mercados nacional e internacional no reaccionan, determinaron mantener el programa de reajuste de personal y prevén que durante los últimos cuatro meses de 2002 y hasta finales de 2003 saldrán en promedio otros 800 obreros de la planta, sindicalizados.
"Si las condiciones no cambian de manera dramática, y no quiero ser pesimista, como no quise ser pesimista hace un año y como no quisimos ser pesimistas hace año y medio, no vemos la manera que cambie, saldrán otros 800 trabajadores", confirmó.
Francisco Bada manifestó que la intención de la empresa es desarrollar la productividad y competitividad para tener seguridad laboral en Puebla, pero dejó en claro que no está en la cabeza del consorcio cerrar la planta y trasladar la fábrica a otra región del país.
Aun a pesar de la complicada situación económica, comentó, buscarán optimizar los costos de producción, que incluye la solicitud a los proveedores de mejorar sus precios para poder lograr un incremento en la competitividad. Subrayó que esta estrategia también incluye al personal de confianza, pues comenzó un reajuste de este grupo de trabajadores, "para que no se piense que sólo sufren los sindicalizados".
Dio a conocer que el próximo 17 de septiembre acudirán a la junta de consorcio en Alemania, donde sabrán qué proyectos puede conseguir Puebla para los próximos años, pero para ello -agregó-, deberán mostrar mejores condiciones laborales.
En la reunión que sostuvo con los medios de comunicación, acompañaron a Francisco Bada el gerente de Relaciones Laborales, Miguel ángel Guede; el director de esa área, Eduardo Sotomayor; y el vicepresidente de Relaciones Públicas y Asuntos de Gobierno, Thomas Karig.