Modus operandi, el indicio para ubicar a los plagiarios

Capturan a cabecilla de banda de secuestradores

Fue identificado por tres de sus víctimas Trabajaba desde el estado de Morelos

SUSANA GONZALEZ G.

Para recoger el rescate de las personas que secuestraban, una banda de seis integrantes obligaba a los familiares de las víctimas a trasladarse en un vehículo pick up hasta un pueblo del estado de Morelos y les exigían vestir de determinada manera al momento de entregar el dinero.

Este particular modo de operar de los plagiarios sirvió para que policías judiciales de la dirección de atención a delitos relativos a la privación ilegal de la libertad pudiera capturar a Juventino Urzúa Amaro, uno de los presuntos cabecillas de la banda, quien ya fue identificado por tres de sus víctimas, informó Clemente Humberto Aranza Ortiz, responsable de agencia de la Fiscalía para la Seguridad de las Personas e Instituciones de la procuraduría capitalina.

"Nos llama mucho la atención la forma en que cobraban el rescate: indicaban a los familiares que llevaran un teléfono celular de cobertura nacional, con bastante crédito; un cargador de vehículo para el celular y solicitaban una camioneta pickup sin cámper, ya que al lugar donde pedían dejar el dinero no entraban los vehículos compactos porque era terracería. Les decían que fueran dos personas únicamente y que de preferencia fueran vestidos con camisas o camisetas amarillas o blancas. Los conducían hacia la carretera federal a Puebla, por el rumbo de Izúcar de Matamoros, y después hacia el poblado Las Maravillas, en Morelos, o bien por la autopista al estado de Guerrero (para llegar al mismo lugar)."

Según el funcionario, es el primer caso de secuestradores registrado en la procuraduría capitalina en que se exige a los parientes de la víctimas pagar el dinero en otra entidad, lejos del Distrito Federal, porque cuando mucho los plagiarios demandaban que se les pagara en zonas aledañas a la capital. "Pero como Urzúa Amaro es originario de Morelos, hacía transitar a los parientes por diferentes brechas de esa entidad, donde no entran vehículos compactos."

El secuestrador capturado dijo ser empleado de Luz y Fuerza del Centro y confesó que se encargaba tanto de vigilar a las personas que secuestraban en casas localizadas en pueblos de Morelos, como de negociar con sus familiares el monto del rescate para liberarlas.

Ninguna de las personas secuestradas fue asesinada, ya que sus parientes pagaron el rescate exigido y fueron liberadas, pero Aranza Ortiz no precisó el monto de lo pagado: "no se puede decir, pero eran grandes sumas de dinero, arriba de millones". El funcionario añadió que las víctimas eran por igual hombres y mujeres, que adultos y menores de edad.

La banda opera en el Distrito Federal y Morelos, presidida por Benito Vivas Ocampo, alias La Víbora y Modesto Vivas Urzúa, El Viborón, quien es pariente del secuestrador detenido, quien durante un tiempo se refugió en Ciudad Sahagún, en el estado de Hidalgo y fue perseguido por varias entidades de la república gracias a que las autoridades contaban con un retrato hablado de él, hasta que fue detenido en la delegación Tlalpan, sobre la carretera federal a Cuernavaca, hace unos días.

La procuraduría capitalina cuenta hasta el momento con 14 averiguaciones previas contra la banda de La Víbora, pero sólo tres de las víctimas identificaron a Urzúa Amaro como uno de los plagiarios, quien además tiene antecedentes penales en la capital y Morelos, por lo que Aranza Ortiz exhortó a la ciudadanía que haya sido privada de su libertad a acudir a la Fiscalía para la Seguridad de las Personas en el segundo piso de Gabriel Hernández 56, o llamar al 53 46 86 70 o con terminación 77 para identificar al secuestrador.