Directora General: Carmen Lira Saade
México D.F. Miércoles 19 de junio de 2002
  Primera y Contraportada
  Editorial
  Opinión
  Correo Ilustrado
  Política
  Economía
  Cultura
  Espectáculos
  Estados
  Capital
  Mundo
  Sociedad y Justicia
  Deportes
  Lunes en la Ciencia
  Suplementos
  Perfiles
  Fotografía
  Cartones
  La Jornada de Oriente
  Fotos del Día
  Librería de La Jornada
  Correo Electrónico
  Busquedas
  >

Capital
CIUDAD PERDIDA

Miguel Angel Velázquez

En el nombre de Moro

HACE UN año, por estas fechas, en la basílica de Guadalupe un grupo de políticos católicos ?o caóticos, como usted quiera? se reunió para dejar en claro su postura como políticos religiosos al principio de un sexenio que desde el partido triunfador en las últimas elecciones se alió a la Democracia Cristiana, de tan malos recuerdos, principalmente en América Latina. Baste recordar a Eduardo Frei, en Chile, y a José Napoleón Duarte, en El Salvador.

AQUELLA VEZ apenas una treintena de políticos de ¿nivel? decidió mostrarse en un acto de absoluta soberbia ?no necesitaban anunciarse y publicitarse para profesar su fe? con el fin de hacer patente, con toda seguridad, ¿el cambio?

CARLOS ABASCAL y Humberto Roque son dos de los profesionales de la política más sobresalientes que asistieron. Ahora se espera el arribo de unos 300.

LUIS HERNANDEZ Navarro, en su espacio de hace dos semanas, hizo notar el avance continuo de la derecha en el país y dio ejemplos de cómo esto se ha convertido en constante del gobierno hacia la vida política nacional.

AHORA SE nos anuncia que otra vez, en la misma basílica de Guadalupe, volverán a hacer su numerito los seguidores de Tomás Moro, aquel que fuera favorito de Enrique VIII y que le sirvió de todas las formas hasta que el rey decidió divorciarse de Catalina de Aragón. Moro entonces puso por encima de la ley del rey la del Papa y aseguró que el Parlamento no tenía derecho a usurpar la autoridad papal a favor del rey.

ENRIQUE VIII le mandó cortar la cabeza y la Iglesia católica lo hizo santo. No es cuestión de simplificaciones, pero así de simple lo cuenta la historia cuando revela que Moro servía al Papa y engañaba al rey.

AHORA LA figura del político Tomás Moro ha sido utilizada por los políticos mexicanos, principalmente los panistas y los hombres en el gobierno, para tratar de vender a la población ese humanismo tan cacareado que no pasa de la entrada a la Iglesia.

Y HAY más implicaciones, la más importante es eso que se llama la Internacional Demócrata Cristiana, cuyo líder principal (para que no exista duda de qué tan a la derecha están y qué tan humanistas son) es ni más ni menos que José María Aznar, el jefe del gobierno español.

POR ESO en la reunión de la DC de finales del año pasado en México, estos señores, que se juntaron con Aznar y que hoy estarán en la basílica, antes que discutir el humanismo como su principal bandera establecieron como punto fundamental de su discusión el combate al terrorismo, tal como lo ordena George Bush.

SERA MUY interesante mirar de cerca quiénes irán a la basílica en busca de las cámaras y los micrófonos para que el pueblo de México entienda de una vez por todas su altísima misión, su humanismo que mira de frente a las elecciones de 2003. Por lo pronto el procurador Bátiz ya confirmó su asistencia.

SEGURAMENTE DESPUES de rezar y escuchar las palabras del cardenal Norberto Rivera estos hijos del Señor estarán dispuestos a seguir fieles el camino que les marca Washington o cuando menos Madrid. ¡México cambió!

Números Anteriores (Disponibles desde el 29 de marzo de 1996)
Día Mes Año