Paros magisteriales en zonas urbana e indígena de Hidalgo

En Saucillo, frente común contra el cierre de una normal

DE LOS CORRESPONSALES

Maestros de Hidalgo marcharon este jueves en Pachuca para exigir mejores condiciones salariales y en contra del movimiento "huelga trabajando" que impulsa el magisterio institucional, además de iniciar paros escalonados en las regiones sierra y otomí-tepehua.

En Morelia, Michoacán, después de realizar un plantón durante una semana en calles aledañas al palacio de gobierno, integrantes de la sección 18 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE) concluyeron su movilización al obtener un bono por mil pesos y después de que el gobernador, Lázaro Cárdenas Batel, anunció que canalizará 400 millones de pesos a programas educativos.

En tanto, organizaciones no gubernamentales (ONG), mentores afiliados al SNTE, el Frente Democrático Campesino y El Barzón formaron un bloque en Ciudad Juárez, Chihuahua, para evitar el cierre de la Escuela Normal Femenil Ricardo Flores Magón, que se ubica en el municipio de Saucillo.

Profesores inconformes con la dirigencia del SNTE en Hidalgo realizaron una marcha en Pachuca e iniciaron movilizaciones para exigir mejores salarios en los municipios de Huautla, Atlapexco y San Felipe Orizatlán, en la región Huasteca; en Tenango de Doria, de la región otomí-tepehua, así como en Mixquiahuala e Ixmiquilpan, en el Valle del Mezquital.

Delfino Pérez Cruz, secretario de Promociones Económicas, y Andrés Caballero Cerón, secretario de Difusión Cultural de la sección 15 del SNTE, voceros del Movimiento de Bases de Trabajadores de la Educación en Hidalgo, calificaron de "una farsa" la "huelga trabajando" a la que convocó el líder de ese gremio.

Alejandro Palomo, coordinador de los mentores hidalguenses inconformes con sus dirigentes sindicales, afirmó que la "huelga trabajando" es un modelo que opera en Japón, no en México, porque "aquí no trabajamos con máquinas sino con niños, que piensan y sienten".

Por otra parte, el gobernador de Mi- choacán, Lázaro Cárdenas Batel, anunció que destinará 400 millones de pesos en programas educativos. Si bien afirmó que el incremento salarial y el apoyo a la educación que proporcionará la administración a su cargo no son suficientes, celebró que haya habido "sensibilidad" del magisterio y se haya podido llegar a un acuerdo "por el bien de la educación".

Las autoridades educativas michoacanas firmaron un acuerdo con dirigentes de la sección 18 del SNTE, que entre otros puntos establece "derogar" la ley de educación vigente, otorgar 500 plazas a maestros egresados de normales de la entidad, incremento de 5.75 al salario directo y 1.5 por ciento a prestaciones, bono único de mil pesos a profesores, 80 mil lentes para alumnos de educación básica, 4 millones de pesos para uniformes escolares de alumnos vecinos de zonas marginadas y 85 millones de pesos para desayunos escolares, así como incremento a 22 millones 599 mil pesos al programa de becas del estado.

Mientras, el gobernador de Guerrero, René Juárez Cisneros, se reunió con el dirigente del SNTE, Rafael Ochoa Guzmán. Ambos convocaron al magisterio nacional a integrarse a una "huelga trabajando" a partir del próximo ciclo escolar, para exigir al presidente Vicente Fox que asigne 8 por ciento del producto interno bruto (PIB) a la educación, y que cese los recortes presupuestales al gasto social.

Exigen permanezca normal en Chihuahua

Diversas ONG, miembros del SNTE, El Barzón y el Frente Democrático Campesino formaron un bloque para evitar que la SEP cierre la Escuela Normal Femenil Ricardo Flores Magón, de Saucillo, Chihuahua. La portavoz del movimiento, Carmen Muñoz, integrante del Frente de Ex Normalistas Rurales, dijo en Ciudad Juárez que ese plantel "representa una opción de estudio profesional para hijos de campesinos y sectores populares", además de ser una fuente de empleo para aproximadamente 100 familias.

Asimismo, solicitó a la Comisión Nacional de Derechos Humanos, al gobernador Patricio Martínez y a ONG que intervengan para solucionar el conflicto generado por 140 de las 530 alumnas a las que autoridades estatales sacaron del internado, y hoy hospedan en hoteles del municipio de Delicias, con el argumento de que podrían ser agredidas por las que permanecen en la normal.