lunes 27 de mayo de 2002
La Jornada de Oriente publicación para Puebla y Tlaxcala México

 
n El sistema de la institución se enfrenta al desorden de los investigadores, reconoce
Reforma orgánica para una nueva política de investigación: Hernández

Ignacio Juárez Galindo n

Tras señalar que el sistema de investigación de la UAP se enfrenta al desorden y ausencia de reglas claras para el trabajo de los investigadores, así como la resistencia al cambio de varios grupos dentro de la institución, Pedro Hugo Hernández Tejeda sostuvo que para definir los lineamientos de la nueva política de investigación con miras al 2025 es necesario, entre otras cosas, impulsar reformas a la reglamentación universitaria que permita, mejorar el sistema de estímulos, vincular la investigación con la formación de profesionistas, aprovechar las fortalezas y definir los proyectos estratégicos, promover la investigación interdisciplinaria, además de crear centros de investigación independientes.
Entrevistado en su oficina, el vicerrector de Investigación y Estudios de Posgrado de la UAP afirmó que pese a que la actual reglamentación no impide o frena la investigación, es evidente que queda a la voluntad de los investigadores hacia dónde avanzar en este rubro. La libertad de investigación, aclaró, se encuentra establecida plenamente en la ley universitaria pero se requiere de una mayor responsabilidad de los encargados de los trabajos para que se incorporen en los proyectos de interés de la universidad.
Se busca, agregó, que sin atentar contra los trabajos individuales de los investigadores o reducir la investigación a una sóla propuesta, la UAP apoye el desarrollo del estado y el país.
Recalcó que las modificaciones a impulsarse pretende, entre otras muchas cosas, crear un sistema más flexible que ayude al desarrollo de los investigadores y a la apertura de centros de investigación que no estén ligados a alguna unidad académica, tal como se exige actualmente. Otro aspecto, refirió, es llevar a cabo la revisión del Consejo General de Investigación y Estudios de Posgrado (CGIEP), creado hace 20 años, para determinar si responde a la realidad actual y ofrece alternativas de crecimiento.
Hernández Tejeda explicó que hace unas semanas la oficina a su cargo llevó a cabo el seminario "Presente y futuro de la investigación en la UAP", cuya finalidad fue hacer una revisión de la situación en que se encuentra dicha institución en este rubro, así como comenzar con el diseño de la política de investigación con miras al 2025. Sostuvo que dicho encuentro -en donde presentaron 136 ponencias- se comprobó la fortaleza del sistema de investigación, pero se detectó "grandes diferencias" entre las diferentes áreas de conocimiento.
Explicó que entre las principales conclusiones de dicho foro se encuentra la necesidad de elaborar una reglamentación que permita definir cómo, con qué y dónde se debe formar los centros de investigación; la creación de grupos no permanentes de investigación, a quienes se les dé facilidad de crear programas temáticos y estudios temporales; impulsar una discusión para definir los proyectos estratégicos de la universidad; la creación de centros no ligados a alguna unidad académica; impulsar reformas orgánicas que propicien una mayor coordinación entre la docencia y la investigación y buscar que el área administrativa contribuya a esta finalidad.
Otros puntos, continuó, son realizar una revisión profunda a las atribuciones y estructuración del CGIEP; tener mecanismos que ofrezcan mayor seguridad sobre el financiamiento para la investigación; establecer un reglamento de ingreso, permanencia y promoción de académicos, a fin de permitir que la movilidad y los estudios que realicen en otras instituciones tenga reconocimiento en la UAP; realizar una revisión a fondo de los estímulos a los investigadores, cuyo enfoque no sea el propiciar el trabajo individual, así como contar con una política editorial para la divulgación científica.
Sin embargo, Pedro Hugo Hernández Tejada reconoció que la principal resistencia para echar a andar dichos planes proviene, de forma "contradictoria", de los propios grupos de investigadores, quienes muestran una "actitud conservadora y de recelo" ante cualquier movimiento o modificación que pretende impulsar la estructura administrativa de la institución.
El funcionario universitario aclaró que es importante entender que existen áreas en donde los problemas o investigaciones deben atenderse de forma interdisciplinaria y deben existir la participación de uno o más centros o grupos de investigación. De esta manera, abundó, no se pide a los investigadores que abandonen sus estudios o trabajos sino que confluyan a encontrar una solución a los problemas regionales de manera integral.
Ante esta situación, advirtió, el principal riesgo que corre la UAP es quedar a la zaga en la creación de programas de vanguardia y acordes con la nueva realidad, permitiendo que otras instituciones oferten planes más adecuados. "Corremos el riesgo que en lugar de hacer historia quedemos en la historia porque no entendimos las exigencias de la realidad", puntualizó.
Durante la plática, Hernández Tejeda explicó que en la UAP existe un sistema de investigación con grandes diferencias entre sí. Por un lado, dijo, hay áreas fuertemente consolidadas y con reconocimiento internacional como Ciencias Naturales y Exactas y Humanidades, pero por otra parte hay "debilidades" en sectores como ingeniería, salud y ciencias agropecuarias, este último sin ningún programa de posgrado y con el grupo de investigadores más pequeño en toda la institución, en donde es necesario ofrecer una mayor apoyo para eliminar las disparidades.
Subrayó que dentro del foro, las principales demandas de investigadores y académicos fueron mayores apoyos para actividades de investigación, principalmente, a aquellos investigadores que no cuentan con financiamiento externo y para las escuelas preparatorias. Empero, señaló que la institución apoyará en la medida de lo posible pero es importante que busquen otras fuentes para allegarse de recursos. Otra queja, mencionó, es que los investigadores sienten que su trabajo no es bien valorado y se requiere un mejor sistema de estímulos.
Más adelante, Pedro Hugo Hernández reconoció que el sistema de investigación de la UAP se encuentra desordenado; no hay reglas claras para el trabajo de los investigadores y la investigación está desligada de la formación de los estudiantes. Indicó que una de las visiones deseables para la institución en el futuro es que ratifique su vocación como universidad pública, en donde las disciplinas e investigación estén aplicadas y orientadas a la solución de problemas concretos y esto le permita ganar un lugar de respeto y reconocimiento.
Además, abundó, es deseable llegar a tener una universidad con un desarrollo más homogéneo, en donde existan medidas y programas con una mayor tendencia a investigaciones concretas, mientras que la reforma a la ley reglamentaria deberá adecuar a la institución al nuevo contexto nacional e internacional, "una universidad atenta a su entorno y no cerrada en sí misma".
Pero advirtió sobre el riesgo de caer en la simulación y aparentar que las cosas están bien, de ahí, sostuvo, que sea necesario poner en marcha revisiones periódicas de las investigaciones y centros de estudios, situación que habrá de clarificar sobre aquellos estudios que están agotados por la propia dinámica social y es necesario transformarlos o suspenderlos por su atemporalidad.