Promete llevar ante la justicia a responsables
de vulneraciones
Habrá "tolerancia cero" a abusos sexuales contra
niños en campos de refugiados, advierte el alto comisionado Lubbers
AFP
Nueva York, 9 de mayo. El
alto comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados, Ruud Lubbers,
reconoció este jueves que los abusos sexuales contra niños
se multiplican en los campos de refugiados, y se comprometió a una
política de "tolerancia cero" para combatirlos.
La "dramática situación de los abusos sexuales
se está extendiendo", sostuvo Lubbers durante una mesa redonda organizada
al margen de la Asamblea General de la ONU sobre la Infancia.
Lubbers prometió "tolerancia cero" para este tipo
de situaciones y aseguró que su organización "emprendió
acciones para ser más duro en ese tema".
El alto comisionado denunció en febrero casos de
explotación sexual de niños, que podrán haber sido
cometidos por el personal local de organizaciones no gubernamentales nacionales
e internacionales, o de la ONU.
Este anuncio vino después de una investigación
de un equipo de la ONU y de una ONG, Save the Children, que recolectaron
testimonios de niños durante una misión por el oeste de Africa
en octubre y noviembre pasados.
Según el informe del alto comisionado, unas 70
personas, miembros de más de 40 ONG y agencias de la ONU eran sospechosas
de haber dado ayuda a cambio de relaciones sexuales con jóvenes
refugiados de 13 a 18 años de edad en Guinea, Sierra Leona y Liberia.
Al tiempo que eximió de sospechas al personal de
su organización, Lubbers achacó la multiplicación
de estos casos a la "cultura de la violencia" en medio de la que viven
los refugiados, muchos de los cuales nunca conocieron un ambiente estable
y pacífico.
Un clima como ese termina ganando los campos de refugiados,
"donde la violencia es considerada la norma", agregó.
El ex primer ministro holandés prometió
llevar ante la justicia a los eventuales sospechosos cuando termine una
investigación en curso.
"Cuando se distribuye la comida (a los refugiados en los
campos) se detenta un poder muy importante". Además, para limitar
los riesgos de que algunos hombres cometan abusos de poder, "pedimos que
sean mujeres las que distribuyan los alimentos. Eso encierra un poco menos
de riesgo de violencia sexual", añadió.
El alto comisionado estableció, asimismo, una regla
estricta que prohíbe "las relaciones sexuales entre los empleados
humanitarios y los jóvenes", una prohibición que alcanza
tanto a las agresiones como a las relaciones aparentemente consentidas.
"No es tan fácil, pero les decimos: 'Digan que
no, simplemente'. Ese tipo de relaciones (en los campos de refugiados)
están siempre cargadas de una relación de poder", afirmó
Lubbers.
El ex general Romeo Dallaire, encargado en nombre del
gobierno canadiense del caso de los niños afectados por la guerra,
reclamó ir más lejos y prohibir toda relación sexual
entre los empleados humanitarios y los refugiados, sean estos mayores o
menores de edad.