Directora General: Carmen Lira Saade
México D.F. Viernes 10 de mayo de 2002
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Sociedad y Justicia

OBSERVATORIO CIUDADANO DE LA EDUCACION

Comunicado No. 77

Día del Maestro: promesas e incertidumbres

El 15 de mayo se celebra el Día del Maestro y seguramente, al igual que en años anteriores, en la víspera se anunciará el incremento salarial para un millón de profesores de educación básica. Las autoridades educativas y el Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE) han instalado una mesa de negociación desde hace un mes, pero no se ha informado públicamente de los avances ni de los puntos en discusión.

El año pasado el SNTE logró 11 por ciento de incremento directo al salario, lo que representó medio punto porcentual sobre lo alcanzado por la mayoría de sindicatos. Además, obtuvo el compromiso del gobierno federal de otorgar más recursos al programa de carrera magisterial, 12 mil créditos para vivienda, un fondo para préstamos y un amplio programa de dotación de computadoras. En general, el tema de la distribución de equipos de cómputo para educación permanece bastante oscuro; el número de computadoras ofrecidas a maestros, escuelas y centros comunitarios sobrepasa evidentemente las capacidades económicas de la SEP en este rubro y seguramente las promesas serán difíciles de concretar.

En la negociación actual tanto las autoridades educativas como el sindicato han manifestado confianza y disposición para obtener resultados satisfactorios para ambas partes. Cabe recordar que en 200l, primera experiencia de negociación para una administración federal a pocos meses de tomar posesión, hubo fuertes intercambios en la prensa y muestras de inconformidad de la dirigencia sindical por las formas empleadas, particularmente porque el ofrecimiento salarial fue informado a los medios antes que al sindicato.

Cabe suponer que el incremento que recibirán los maestros tomará como puntos de referencia el aumento promedio alcanzado por la mayoría de sindicatos, proporción que ha oscilado entre 5 y 6 por ciento, así como la meta de inflación de 4.5 por ciento para este año, prevista por el Banco de México.

Otro factor que gravitará en las negociaciones es el recorte al gasto público por 10.1 mil millones de pesos -de los cuales 1.8 mil millones se le restaron a educación- que realizó la Secretaría de Hacienda el pasado 23 de abril. Este recorte, informó la dependencia gubernamental, fue para "compensar la caída de los ingresos presupuestarios respecto a los montos programados" y para mantener el endeudamiento público dentro de los límites aprobados por la Cámara de Diputados (Boletín SHCP 049/2002). La importancia del recorte para las negociaciones quedó de relieve en la posición de rechazo que expresó el SNTE en un desplegado, publicado en este mismo diario, al calificar de inaceptable la posibilidad de que el recorte se utilizara como argumento para "limitar o derrotar" sus demandas salariales (La Jornada 30/04/02).

Asimismo, el SNTE en su desplegado convocó a un acuerdo nacional y recordó el compromiso del Ejecutivo federal, asumido en la negociación del año pasado, de destinar una proporción equivalente a 8 por ciento del PIB al presupuesto educativo. Conviene analizar en detalle estas anotaciones del SNTE, sobre todo por el peso de esta organización gremial para inhibir o impulsar las acciones y también por la importancia que podrían tener para el desarrollo educativo.

El acuerdo pendiente

En su pronunciamiento el SNTE convoca a un acuerdo nacional sobre la calidad de la educación. No se conocen mayores precisiones sobre su contenido, sin embargo, señaló que "estamos decididos a honrar el compromiso que públicamente hemos establecido, de aportar nuestro esfuerzo para mejorar sustancialmente la calidad de la educación pública, para lo cual hemos convocado a un acuerdo nacional, en donde la evaluación del desempeño de todos los factores que en ella intervienen, entendida como política de Estado sancionada por el Congreso de la Unión, tenga un carácter central".

Se entiende que el acuerdo sería para impulsar la calidad de la educación, pero nada se dice sobre las características, tiempos y a quiénes se convoca. La experiencia del Acuerdo Nacional para la Modernización de la Educación Básica (ANMEB) de 1992 muestra que la negociación entre la Secretaría de Educación Pública (SEP) y el sindicato de maestros puede ser un mecanismo eficaz para la promoción de importantes reformas en el terreno de la educación pública, pero también que deben ser precisados con claridad los contenidos, la funciones y especialmente los compromisos.

Conviene recordar que el secretario Tamez Guerra, al presentar el Programa Nacional de Educación 2001-2006 (PNE), en septiembre del año pasado, también lanzó una convocatoria amplia para sumarse "a un gran acuerdo nacional por la educación" y subrayó la inminente firma de un acuerdo con el SNTE. No obstante, tampoco ha habido precisiones sobre el contenido del acuerdo.

Otro aspecto importante de la declaración del SNTE es su anotación sobre el carácter central de la evaluación para mejorar la calidad educativa. Al parecer, el sindicato magisterial estaría aceptando el enfoque de evaluación amplia de la SEP, descrito en el PNE, y tomando posición en favor de que sea el Poder Legislativo el que sancione la creación del organismo encargado de llevar a cabo las evaluaciones (el prometido Instituto Nacional de Evaluación de la Educación [INEE]), como entidad autónoma de la SEP.

Es notoria esta declaración del SNTE, especialmente por las reservas que había mantenido sobre la iniciativa de crear el INEE y las características del proyecto. Aunque también debe señalarse que coincide con las declaraciones del secretario general del sindicato de la semana anterior, en las que señaló que tal organismo debe tener legitimidad, incluir al magisterio, estar en el ámbito del Congreso para la rendición de cuentas y ser autónomo, pero advirtió: "no podemos permitir que la evaluación sirva para dañar la imagen del magisterio, de poco serviría una evaluación cuya finalidad sea buscar culpables y no ofrecer soluciones" (Notimex, 06/04/02). El principal obstáculo es que el periodo ordinario de sesiones del Congreso concluyó al final del mes anterior y el proyecto del INEE se sigue difiriendo.

Respecto a la promesa del Ejecutivo federal de destinar un equivalente de 8 por ciento del PIB al gasto educativo al término de su administración -uno de los principales compromisos de campaña del presidente Vicente Fox, reiterado en diferentes oportunidades y también parte de los acuerdos del año anterior entre el gobierno federal y el sindicato magisterial- persiste una diferencia de opiniones en torno a si es el nivel que alcanzará el gasto público que destina la Federación o si es más bien el gasto nacional (suma del público y privado). El sindicato señala en su declaración que es la proporción que debe alcanzar el gasto federal. Por su parte, funcionarios del gobierno federal señalan que la referencia es al gasto nacional, como de hecho está planteado en el PNE (p. 94).

La diferencia es importante, puesto que para 2001 se estimaba que el gasto nacional en educación equivalía a 6.2 por ciento del PIB, mientras que la del gasto federal era de 4.2. Como se puede apreciar, en el primer caso parece estar al alcance la promesa de lograr la meta de 8 por ciento, pero en el segundo la situación es completamente distinta.

ƑHacia dónde va el SNTE?

El organismo gremial de los profesores mantiene una presencia relevante en el sistema educativo, pero también es claro que debe redefinir su rumbo y las responsabilidades que asumirá. Este es un imperativo no sólo porque ha cambiado el esquema de las fuerzas políticas y coexistencia de poderes en el país, sino porque el desarrollo educativo depende en buena medida de los profesores. En este sentido, no se sabe si las acciones que ha emprendido o dejado de hacer el sindicato están encaminadas a aclarar su posición o son más bien respuestas a condiciones políticas del momento.

Por ejemplo, llamó la atención que el SNTE, sindicato autoproclamado defensor de la escuela pública laica y gratuita, firmara el pasado 7 de febrero un convenio con una institución privada para la actualización del magisterio. Efectivamente, el secretario general del sindicato y el rector del Sistema Instituto Tecnológico de Estudios Superiores Monterrey (Tec de Monterrey) convinieron en crear el Centro para el Desarrollo Magisterial. Incluso el primero expresó que "el Tec de Monterrey se plantea generosamente en esta alianza apoyar con su experiencia la formación de profesionales altamente calificados a mejorar el perfil profesional del magisterio, por el bien de la educación pública".

Este centro tendrá, entre otros programas, la actualización tecnológica del magisterio, maestrías en el área de educación, un portal educativo, centros de aprendizaje virtual y academias virtuales. Sorprende, sin embargo, que para estas opciones no haya sido considerada la Universidad Pedagógica Nacional, institución pública creada en 1978 precisamente para responder a las demandas de superación y formación profesional del magisterio. O bien, que tampoco se considerara la amplia gama de programas que ofrecen las instituciones de educación superior públicas.

En este contexto resulta sintomático el abandono de la Fundación SNTE para la Cultura del Maestro y prácticamente la cancelación de la funciones que ésta venía desempeñando desde hace casi una década.

Otro caso de la búsqueda de nuevas posiciones del SNTE en el esquema político actual lo ilustra la solicitud que tramitó en 2000 para ser incluido en el apartado A de la Ley Federal del Trabajo. Ante la negativa de las autoridades, se amparó, pero hace un par de días la Suprema Corte de Justicia de la Nación revocó el amparo.

Interrogantes

En esta ocasión sugerimos líneas de reflexión en torno al magisterio nacional y sus organismos gremiales:

-En la jerarquía de problemas, Ƒel primero para el SNTE es "no dañar la imagen del magisterio" y después la solución de la calidad educativa? ƑTiene el gobierno federal una agenda política clara respecto al sindicato que implique mejorar efectivamente la calidad educativa?

-En esta nueva etapa de transformaciones de las estructuras políticas del país, Ƒlos maestros están conscientes de que el bienestar y el progreso de su profesión requiere de espacios autónomos, creados y manejados por ellos mismos, para su superación profesional?

-ƑLos gobiernos estatales tienen visión a mediano y largo plazos sobre las metas deseables en sus negociaciones con los organismos sindicales?

-ƑLos analistas políticos e investigadores dedican la atención necesaria a las posiciones que ahora manifiesta el SNTE respecto a la evaluación de la educación, con el propósito de discernir entre desplante y apariencia y lo que revelan de verdadera voluntad para comprometerse con la calidad de la educación?

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