Martes 16 de abril de 2002
La Jornada de Oriente publicación para Puebla y Tlaxcala México

 
n No participaron los poderes Legislativo y Judicial, ni la dirigencia estatal del PRI
Firman 217 representantes sociales, "de buena voluntad", el Acuerdo Político Tlaxcala 2002

Carlos Avendaño y Víctor Varela n

"La buena voluntad" de 217 representantes de los sectores político, económico y social se reflejó este lunes con la firma del Acuerdo Político Tlaxcala 2002 en el que, sin embargo, no participaron los poderes Legislativo y Judicial, ni tampoco la dirigencia del PRI ni sus diputados locales. El texto dirigido "a la sociedad en general", no contiene alusiones hacia grupos de interés específico "y es una muestra de la voluntad de los organismos e instituciones signantes por trabajar sin más compromiso que el bienestar de los tlaxcaltecas".
El Acuerdo Político para el Desarrollo Económico, Político y Social de Tlaxcala 2002 fue firmado por 81 organizaciones no gubernamentales, 59 de 60 ayuntamientos -no lo hizo el edil de la capital tlaxcalteca y aspirante priista a la gubernatura, Héctor Ortiz Ortiz-, 12 colegios de profesionistas, siete organismo empresariales, tres fracciones parlamentarias (PRD, PAN, PT) y los diputados locales del PVEM y Convergencia por la Democracia, seis empresas de comunicación, cinco organismos sindicales y la iglesia católica.
En el acto donde también se presentaron los avances de la actualización del Plan Estatal de Desarrollo, Alfonso Sánchez Anaya advirtió que el acuerdo no es una receta que sane las tensiones de la macroeconomía, ni un antídoto mágico en contra de los problemas endémicos de nuestra sociedad, pero sí es un principio necesario para contar con mejores condiciones para afrontar ambas situaciones "y muchas más", con espíritu de grupo, conciencia social, visión de compartir objetivos comunes y con el orgullo de pertenecer a un mismo ente social.
En su mensaje, el mandatario resaltó que para la formulación del acuerdo se identificaron dos adversarios a vencer: el primero es de carácter mundial, "pues hoy en día las presiones que la economía global ejercen sobre las sociedades de los países, la inequidad político social y la pobreza se convierten en el principal reto a superar".
El otro adversario -éste de carácter interno- "es superar las desconfianzas y las diferencias de criterios nacidos de la pertenencia de diferentes sectores, pues así como se ha hecho en el pasado remoto y reciente, tengo la convicción de que lo superaremos en el presente, porque la buena voluntad de los participantes es el ingrediente esencial que demuestra la consciencia de que ya no somos unos y otros, sino nosotros quienes construimos juntos el clima de pluralidad en el que Tlaxcala ha sido pionero en la nación".
Ante la presencia de dirigentes empresariales, de organizaciones sociales y sindicales, funcionarios estatales y federales, expresó que la pluralidad es la que debe prevalecer mediante la construcción constante y permanente de consensos por la búsqueda y el encuentro de lo que nos une y no de lo que nos separa.
"El día de hoy buscamos generar dentro del marco de la pluralidad política las condiciones para integrarnos como una región sólida que mira al presente y al futuro, con la decisión de luchar desde los respectivos ámbitos por preservar el bienestar y la dignidad del pueblo tlaxcalteca", agregó el gobernador Sánchez Anaya.
"Para que el acuerdo político se traduzca en hechos, es necesario que esté vinculado al Plan Estatal de Desarrollo y a los programas y acciones que de éste se derivan, por ello, esta ocasión es el marco adecuado para hacer público el cumplimiento de lo ofrecido hace cuatro meses; someter al conocimiento de la sociedad una revisión y actualización del Plan de Desarrollo Estatal 1999-2005, es por ello que no es casual que ambos temas estén ligados en su presentación".
El documento que enriquece lo vertido en el plan original de 1999 servirá como fundamento para proponer al Congreso local que se modifiquen y complementen algunos preceptos legales para que futuras administraciones estatales estén obligadas a realizar, por mandato de la ley, la revisión y actualización de sus planes de desarrollo a la mitad de sus gestiones.
La idea es mantener su vigencia ante una dinámica social cuyo ritmo modifica demasiado aprisa los escenarios en que se tienen que desenvolver los gobiernos y sus sociedades, con lo que se evitarán desgastes de todo tipo.
En el texto del pacto se resalta que éste se inscribe en el marco y espíritu del Acuerdo Político para el Desarrollo Nacional firmado por el presidente de la República, Vicente Fox Quesada, y los dirigentes de los partidos políticos nacionales el pasado 8 de octubre de 2001, y que se ratificó en enero anterior por los gobernadores.
El documento signado este lunes consta de nueve puntos, entre los que se convoca a mantener un diálogo permanente entre todos los sectores de la sociedad para encontrar los mecanismos pertinentes para la solución de la problemática que cada uno enfrenta; procurar la actualización de los marcos jurídicos de la entidad y su puntual aplicación y difusión, fuera de todo interés de grupo o partido; continuar con la aplicación de medidas de racionalidad en el ejercicio del gasto público; colaborar desde sus respectivos ámbitos en los trabajos a favor de los ordenamientos territorial y ecológico.
Los otros puntos se orientan a fomentar el respeto, la equidad, la cooperación y la concordia entre los poderes públicos y la sociedad; respetar el marco de pluralidad que vive la entidad y fortalecer a éste dentro de los ayuntamientos y las comunidades; fortalecer el sistema de partidos, con estricto respeto a la pluralidad y diversidad de ideas y principios; entablar una relación cordial entre los sectores patronal y de trabajadores que permita la consecución de los acuerdos necesarios para el desarrollo de sus respectivas funciones y esforzarse por mantener la plantilla laboral en sus respectivas unidades económicas y elevar la calidad y productividad en sus áreas de trabajo e impulsar una nueva cultura laboral.
El secretario de Gobierno, Gelacio Montiel Fuentes, expuso que la alianza que se propone en este acuerdo tiene como objetivo fortalecer las condiciones de estabilidad político social de la entidad, que son base para la gobernabilidad y el desarrollo, en medio de un plano político donde México y Tlaxcala se encuentran en proceso de transitar de un régimen de decisones centralizadas a uno democrático, plural e incluyente.
A nombre de la iniciativa privada de la entidad, el presidente de la Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción, (CMIC), Miguel çngel Corichi Barceinas, expresó que las empresas ha mantenido una constante preocupación por la situación económica del país, y aun cuando hacen esfuerzos por mantener su planta productiva en pie, el desarrollo de las actividades es afectado cada vez que la política económica es reorientada.
"No olvidemos que los empresarios somos quienes generamos la producción y los empleos, y que es el gobierno quien propone el escenario en el que actúa el inversionista; por ello, la comunión de intereses, que beneficien a la sociedad en su conjunto, es un aspecto insoslayable que debemos preservar y fortalecer de manera cotidiana", subrayó.
Corichi Barceinas -quien pidió ser el portavoz de los organismos empresariales para este acto- consideró que la evolución política requiere conciliar el cambio con estabilidad política, pluralidad y eficiencia gubernamental, que el dicho se convierta en hecho y que las diferencias se encaucen en un marco de equilibrio de poderes.
El presidente del Congreso del Trabajo en la entidad, Eduardo Vázquez Martínez, afirmó que la participación de las centrales obreras más importantes en el estado en la firma de este pacto tiene como objetivo involucrarse en la lucha para que ya no se generen más empleos "indignos" y por ello es que hicieron aportaciones al documento y procurarán que haya paz y estabilidad laboral para facilitar la atracción de inversiones y contrarrestar los efectos negativos del extranjero.
Advirtió que la CTM, CROC y CROM harán un frente común que busque una mejor forma de vida y de existencia para las familias tlaxcaltecas.
"En representación de los presidentes municipales constitucionales del estado" habló el alcalde de Apizaco, Baltazar Maldona Rosales, quien planteó que la recesión económica afecta a las administraciones con los recortes presupuestales, pero "eso no debe ser una limitante sino un reto para demostrar, una vez más, que el pueblo de Tlaxcala no se doblega sino que se une al trabajo y la responsabilidad como meta principal". Enfatizó que no debemos volver a los tiempos de la toma de decisiones centralizadas, donde no se atienden las verdaderas necesidades de la población.