Autoridades esperan 600 mil visitantes este año

En Cuajimalpa, el viacrucis no busca ser tan aparatoso, dicen organizadores

ARTURO CRUZ BARCENAS

"Estamos al 98 por ciento; casi todo está listo para la crucifixión de Cristo", expuso ayer el coordinador general del equipo que actuará la 113 representación de Semana Santa en Cuajimalpa, Edmundo Mendoza, luego de que algunos de los muchachos que participarán se dieron tiempo no para la última cena, sino para una comida a base de pollo y agua de piña.

Las autoridades de la delegación esperan cientos de miles de visitantes ?600 mil, señalan en un boletín? en los actos en los que intervendrán 192 personas de varios pueblos. "Serán unos 200 mil asistentes más que el año pasado", exponen en el documento.

El viacrucis abarca más de tres kilómetros, desde la iglesia de San Pedro Apóstol hasta el Cerro Zentlalpatl. Ya está la escenografía. Herodes, representado por Cipriano González, ordena a la banda: "se me van todos, menos dos, para hacer lo que falta. Tú, te quitas esos pelos ?puntas hechas a base de mucho gel? y te vistes como Dios manda. Ya después, el lunes si quieres, te lo pintas de rojo".

Herodes es electricista y preparaba lo que serán las luces y el sonido. Ya tienen apuntadores, para que a la mera hora no se les olviden los parlamentos. La mayoría la harán de romanos; son vecinos de La Puebla, Jacalote, Ocampo, Piedra, San Juan Ixtitla y San Antonio, entre otros barrios. Se ufana Christofer, el Simpson, de que él será un verdadero romano; Juan Rivera, el Flavio, será Judas, a quien señala no como traidor, sino como el ejemplo de arrepentimiento. "Se trata de sacar lo bueno, no lo negativo de la Pasión", dijo.

Muestran las tres pesadas cruces. "Péselas; está canijo", observan. Y es cierto. Pesan. Y pesarán más bajo los terribles rayos del sol, en medio de una vendimia enorme integrada por más de 2 mil comerciantes, entre vendedores de fritangas, tacos, pambazos, comida y muchos ferieros.

Otro chavo, Gabriel Fernández, será Pilatos. Dice de su personaje que fue víctima de las circunstancias y que no tuvo otro remedio que condenar a Jesús, quien será interpretado por Andrés Meza, electricista, plomero y hábil en otros menesteres.

''Nos gusta rescatar las tradiciones''

Después de la de Iztapalapa, la representación de Cuajimalpa es considerada la segunda en importancia por el número de visitantes, por lo que se establecerán operativos de vigilancia, seguridad, servicios urbanos, protección civil y asistencia médica.

Para Edmundo Mendoza, seminarista, quien se ha hecho cargo de la representación desde hace tres años, los muchachos le echan muchas ganas. "Se trata de difundir el Evangelio. Antes había grupos antagónicos, fricciones, problemas, muchos intereses personales. Se trata de darle más importancia a la Pasión. Los que la hacían se llevaron todo y nosotros vamos iniciando."

Mendoza señala que "no me preocupa la cuestión de la publicidad; buscamos el mensaje de la evangelización, el mensaje de Cristo resucitado. No nos comparamos con lo de Iztapalapa. Mis respetos, pero aquí buscamos un sentido más evangelizador, más que algo aparatoso".

?La Pasión fue dolorosa, y aquí muchos vendrán a divertirse.

?Sí, pero esto no se debe ver como un evento bonito. Nosotros estamos en la línea de lo que intentaron los franciscanos cuando llegaron a estas tierras. Nos gusta rescatar las tradiciones.

?¿Por qué ver un tormento, tanto dolor?

?Cerramos los ojos hacia lo que podemos apreciar. Se trata de mover conciencias. Yo cuido la cuestión visual. Yo evito que los muchachos se vean acartonados, que sean exagerados en la actuación. A unas horas de comenzar, estamos listos. Trato de que no declamen como se hacía hace años. Que Cristo esté vivo, que no esté quietecito, y que los apóstoles no se vean como de dos en dos.

Si va, tome sus previsiones y llegue temprano. Los peseros y camiones pueden abordarse en la estación Tacubaya del Metro.