Directora General: Carmen Lira Saade
México D.F. Miércoles 20 de marzo de 2002
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Capital

Emilio Pradilla Cobos

Propuesta de desarrollo urbano

El 15 de marzo el Movimiento Urbano Popular (MUP) entregó a la Asamblea Legislativa del Distrito Federal (ALDF) un documento en el que hace observaciones y propuestas de modificación al proyecto de Programa General de Desarrollo Urbano entregado por el gobierno capitalino al órgano legislativo para su análisis y aprobación. Con esta propuesta, el MUP, actor esencial en la reivindicación de una vivienda digna y una ciudad habitable para los sectores populares, hace uso del derecho democrático a participar activamente en la toma de las decisiones fundamentales que afectan su futuro y el de las generaciones venideras. Luego de hacer un análisis crítico del proyecto, el MUP pide a la ALDF abrir los foros y tiempos necesarios para debatirlo a fondo con la ciudadanía y las organizaciones sociales, y propone la introducción de diferentes modificaciones, entre las que destacan las relacionadas con los grandes temas de política urbana que han estado en el debate público reciente:

Ampliar los espacios e instrumentos para la concertación y coordinación de las acciones de desarrollo urbano en los ámbitos metropolitano y regional, hoy limitados e ineficaces, para evitar la toma de decisiones unilaterales que afectan a la Zona Metropolitana del Valle de México (ZMVM), tales como la construcción del nuevo aeropuerto en Texcoco o el segundo piso en Periférico y Viaducto. Impulsar, con la revisión del Programa de Ordenación de la ZMVM y su aplicación, políticas concertadas de población, urbanización y construcción de infraestructura para la metrópoli y la ciudad-región que eviten el crecimiento urbano extensivo y continuo, mediante asentamientos discontinuos con densidades poblacionales e inmobiliarias medias y altas, plurifuncionales, para reducir los desplazamientos cotidianos, enlazados por vialidades reservadas para el transporte colectivo o el transporte eléctrico interurbano.

Aplicar una visión desconcentradora y distributiva que mejore la integración de la ciudad y de todos sus habitantes, aprovechando todo su potencial y beneficiando a todos, al ampliar las posibilidades de acción allí donde residen y laboran, y que responda a la situación urbana real, así como que termine con la concepción monocéntrica y concentradora del desarrollo urbano implícita en el bando 2. Revertir los efectos negativos generados por la falta de planeación y la aplicación de la política a través de bandos que afectan la satisfacción de las necesidades de vivienda y otros servicios para la población de bajos recursos; impulsar la redensificación de todas las áreas integradas de la ciudad. Mantener el control de la expansión periférica sobre suelo de conservación, áreas de recarga del acuífero y zonas de alto riesgo, lo cual el MUP comparte con el gobierno de la ciudad.

Modificar la política pública de vivienda, afectada por la elevación de costos del suelo y de la construcción, para ampliar su cobertura territorial y social incrementando la reserva de suelo para vivienda popular y de interés social sin afectar la sustentabilidad ambiental; incluir a la gente de los pueblos originarios, e introducir políticas para el incremento de la oferta de vivienda en renta, sobre todo popular.

Abrir los proyectos de recuperación del Centro Histórico, los corredores turísticos y parques industriales a la participación de otros sectores sociales distintos a los empresarios, para evitar que se vuelvan contra sus residentes de bajos recursos y sus trabajadores, estableciendo instrumentos legales que garanticen la inclusión de los pobladores y usuarios populares, la regulación de los cambios de usos del suelo, formas de compensación de daños sociales y la equitativa distribución social de los beneficios que se obtengan. Cancelar el proyecto de construcción del segundo piso de Periférico y Viaducto, y reorientar la inversión hacia el desarrollo del transporte público colectivo y de obras de vialidad menos costosas que beneficien a sectores sociales y áreas más amplias y necesitadas de la ciudad, sobre todo en las unidades territoriales de alta y muy alta marginación.

Ampliar la participación ciudadana en la planeación y la gestión urbana a otras formas de organización social, incluidos el MUP y otros grupos locales, distintas a los comités vecinales de las unidades territoriales. El MUP hace un llamado a otros sectores, organizaciones de trabajadores y actores políticos a participar en el debate que propone, para poder avanzar juntos en la construcción de un programa de desarrollo urbano que vaya realmente hacia la transformación democrática e incluyente de la capital y la zona metropolitana.

Este llamado debería ser oído y aceptado también por todas las corrientes políticas en la ALDF y por el gobierno local, pues así se avanzaría en una forma democrática de gobernar a esta gran ciudad.

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