Dirigentes de la OPEP analizarán el problema
Riesgo de una guerra de precios del petróleo
por aumento de oferta rusa
La
Habana, 2 de marzo. En la víspera de una visita oficial del
estado mayor de la OPEP, el gobierno ruso no decide aún si elevará
o no ?y de aprobarlo en qué cuantía? su producción
de crudo, con lo cual puede hundir más la cotización internacional
y provocar una guerra de precios.
Por ahora, sólo se sabe que Moscú aplazó
para una próxima reunión del equipo económico de Vladimir
Putin la decisión que tomará sobre los niveles de producción
de petróleo.
Rusia accedió a la solicitud de la Organización
de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) de recortar en
150 mil barriles diarios desde el primero de enero pasado su producción
para contribuir a los 2 millones que se retiran todos los días de
la oferta con el propósito de elevar los precios del hidrocarburo.
El primer ministro, Mijail Kassianov, no fijó fecha
precisa para determinar si su gobierno aprobará una eventual prórroga
de las limitaciones a la exportación de crudo.
El ministro de Energía, Igor Iussufov, confirmó
que aún deben discutirse y decidirse muchas cosas, aunque señaló
que el volumen de ventas al extranjero será fijado muy pronto.
Ante esa situación, la OPEP confirmó una
visita a Moscú de su secretario general, el venezolano Alí
Rodríguez, del 3 al 5 de marzo para hablar del tema.
El ministro de Finanzas, Alexei Kudrin, admitió
que uno de los temas prioritarios del gobierno es la política de
extracción y exportación de crudo que finalmente adoptará,
el cual tiene que ver con el precio del crudo en los mercados que, a juicio
de empresarios locales, debe oscilar entre 20 y 25 dólares el barril.
Kudrin reveló que en lo que va de 2002 el precio
promedio del petróleo ruso Ural fue de 18.56 dólares
por barril, nivel dentro de los límites del escenario pesimista
elaborado que sirve de base al presupuesto de este año. Se sabe
que hay serias discrepancias dentro del gobierno y entre los empresarios
rusos, a favor y en contra del actual apoyo a la estrategia de la OPEP
de recorte de la oferta para presionar al alza los precios en el mercado
mundial.
El asunto parece radicar en los elevados costos de extracción
del crudo ruso que puede hacer irrentable su producción si los precios
siguen cayendo. Algunos en cambio teorizan con la idea de incrementar el
volumen de ventas para compensar las pérdidas por bajas tasas, pero
no son muy convincentes.
El mes pasado el propio Iussufov instó a las empresas
petroleras a estar listas para suministrar "tanto crudo como sea posible"
a los mercados mundiales este año, declaraciones que cayeron como
una bomba en la OPEP.
Peor aún, el ministro opinó que las compañías
petroleras rusas deberían fortalecer sus posiciones en los mercados
internacionales y no cederlas a nadie.