Lunes 14 de enero de 2002
La Jornada de Oriente publicación para Puebla y Tlaxcala México

 
n Establecen un balance de la gestión gubernamental a un día del informe
El gobierno estatal tiene ánimo negociador, pero le pesa la corrupción, dicen analistas

I. Juárez, J. Machuca y M. Hernández n

Aunque en sus tres años de gobierno Melquiades Morales Flores se ha distinguido de su antecesor, Manuel Bartlett Díaz, por privilegiar la negociación antes de imponer proyectos o programas, en su administración han pesado los escándalos por corrupción, resultado de las facturas y compromisos con diversos grupos caciquiles del PRI
En lo anterior coincidieron analistas, académicos y dirigentes de organizaciones no gubernamentales a quienes este diario pidió hacer un balance de la primera mitad del presente sexenio estatal.
Juan de Dios Varela Marino, vocal de la Barra Libre de Abogados Democráticos de Puebla, apuntó que el jefe del Ejecutivo local se ha destado por su ánimo conciliador ante la oposición, aunque resaltó los actos de corrupción de sus colaboradores como el mayor lastre de la presente gestión gubernamental.
Indicó que el gobernador buscará, a través de la obra pública, borrar la imagen de ineficiencia y manejos arbitrarios que su administración se ganó en algunos sectores sociales. Asimismo, descartó que pueda promover confrontaciones con las fuerzas políticas diferentes al PRI.
Rodolfo Rivera Pacheco, consejero suplente en el Instituto Estatal Electoral y director del Buró de Estrategias y Análisis del Poder SC, considera que Melquiades Morales Flores llegó al poder por una alianza política establecida por los ex gobernadores que antecedieron a Manuel Bartlett, y que hicieron un frente común para que el candidato que éste quería dejar en la gubernatura, José Luis Flores Hernández, no asumiera la primera magistratura de la entidad.
El también catedrático de la Universidad Popular Autónoma del Estado de Puebla señaló que producto de esos apoyos, el gobernador tuvo que conceder algunos espacios a representantes de la colonia libanesa -como fue el nombramiento de Arturo Achard Velázquez en la titularidad de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes, o la candidatura a alcalde de la Angelópolis del priista Carlos Alberto Julián y Nacer- y de otros grupos políticos, algunos de los cuales han incurrido en actos de corrupción.
Rivera Pacheco dijo esperar que Morales Flores no busque emular el comportamiento autoritario que Bartlett Díaz tuvo con la oposición.
Por su parte, Miguel ángel de Lara y Díaz, presidente de la Asociación de Abogados y Ciudadanos Defensores de los Derechos Humanos (AACDDH), aseveró que el gobierno de Melquiades Morales se ha caracterizado por "la falta de gobernabilidad, indefinición política y tino" para dirigir a la entidad.
Miguel ángel de Lara coincidió con varios integrantes de la oposición en que el actual gobierno estatal ha estado marcado por la influencia de los ex gobernadores poblanos, pero aclara: "El gobernador debe caer en cuenta de que ya es tiempo de que se sacuda todos los compromisos políticos y compradrazgos que tenía, y piense en serio en gente eficiente, no gente política, sino que sirva realmente a la ciudadanía. ése sería el único remedio para componer este gobierno".
En cuanto a la procuración de justicia, opina, no se ha avanzado en nada, ya que los Ministerios Públicos continúan siendo negligentes, burocráticos, ineficientes y corruptos; mientras que en el caso de los juzgados poblanos, éstos todavía se encuentran sumidos en el atraso, y en ellos predominan los viejos vicios de corrupción y de burocracia.
A pregunta expresa, el activista afirma que en estos tres años de la administración melquiadista no se ha visto ningún avance algo distinto de lo que dejaron los anteriores gobiernos. "El sistema de transporte público sigue siendo una amenaza para la sociedad; en la administración de justicia esta por la calle, lo mismo que la procuración de justicia; en materia educacional tenemos un secretario que no sabe nada, y en materia de salud tenemos clínicas de quinta", argumentó.
Y agregó: "La gente pobre, la que más esperanzas tenía con la elección de Melquiades Morales, es la que más ha sufrido en esta administración".
César Musalem Job, vocal ejecutivo del Centro Estatal para el Desarrollo Municipal, expresó que durante la principal característica de primera mitad de la gestión melquiadista ha sido su acercamiento con la población, lo cual, dijo, no se trata de un acto populista sino de buscar una verdadera solución a los problemas sociales sin dejar de lado el desarrollo.
Mencionó que ha habido avances importantes en cuanto al área de medicina preventiva, de Comunicaciones y Transportes y en la organización de la producción rural. Además, manifestó que dicha administración estatal, es la primera desde 1821, en compartir las responsabilidades de gobierno con todos y cada uno de los ayuntamientos.
Para el analista financiero Mario Villar Borja, en los primeros tres años de gobierno de Morales Flores se ha presentado un distanciamiento con la sociedad y se ha marginado la opinión de los municipios en el desarrollo de obra pública. Para gobernar, advirtió, el mandatario poblano ha preferido apoyarse en la "vieja clase política", lo que ha impedido que la administración se modernice y se formen nuevos "cuerpos técnicos o políticos".
Argumentó que para afrontar la situación económica del estado, Melquiades Morales se ha concretado en "copiar lo que está haciendo el gobierno foxista, la preocupación por las finanzas públicas sanas sigue siendo una preocupación ordenada desde el exterior, a ellos les preocupa nada más que cuando inviertan su dinero estén seguros acá, no les importa que haya desempleo, que los salarios estén cayendo y sean ridículos. Ha habido una austeridad pública en el gasto corriente, lo que ha disminuido son las inversiones".
Por su parte, el investigador de la facultad de Economía de la UAP Germán Sánchez Daza opinó que el gobierno encabezado por Morales Flores ha generado una marcada polarización de los ingresos y concentración de la pobreza en la mayor parte de los habitantes de la entidad.
"Se alivian, pero no se solucionan los problemas", apuntó, y precisó que los conflictos dentro del sector laboral han sido pocos según datos del Instituto Nacional de Estadística Geografía e Informática, pero se han hecho patentes los bajos salarios y las malas condiciones laborales de los obreros poblanos.
El abogado Samuel Porras Rugerio, miembro de la Red de Solidaridad y Defensa Laboral, afirmó que la administración estatal iniciada en 1999 se ha caracterizado por su "gran corrupción", comparable sólo con la documentada en la administración de Mariano Piña Olaya.
"El grueso de las dependencias del Poder Ejecutivo andan metidas en problemas de corrupción muy grave, que el señor (Melquiades Morales) o no ha sabido o no ha querido erradicar, porque al fin de cuentas la corrupción también genera dinero". Agregó que la SCT y la Dirección General de Centros de Readaptación Social son las dependencias más corruptas.
Refirió que el gobernador ha reprimido a diversos movimientos laborales, como el del Suntuap, o Siemens, usando la fuerza pública; además, la Secretaría de Desarrollo Económico ha promovido "paraísos fiscales" que ofrecen a inversionistas extranjeros mano de obra barata con la complacencia de los sindicatos.