MIERCOLES Ť 11 Ť JULIO Ť 2001

Ť Cada Estado, en lo individual, puede combatir la proliferación de armas pequeñas, dice

Defiende EU su derecho a armar a grupos que intenten derrocar a gobiernos soberanos

JIM CASON Y DAVID BROOKS CORRESPONSALES

Nueva York, 10 de julio. El gobierno estadunidense defendió su derecho de armar a "grupos no estatales" que intentan derrocar a gobiernos soberanos, y se comprometió a luchar contra cualquier intento internacional de prohibición.

Al comenzar dos semanas de reuniones oficiales en la sede de la Organización de Naciones Unidas sobre estrategias y medidas para controlar el tráfico ilícito en armas pequeñas y ligeras que, todos señalan, está alimentando guerras civiles crecientemente brutales y ampliando el crimen organizado, funcionarios estadunidenses señalaron que también se opondrán a todo intento de limitar las ventas de armas estadunidenses en el mundo así como a toda campaña internacional que busque privar a los civiles del derecho de poseer armas pequeñas (legales).

John R. Bolton, subsecretario de Estado para Control de Armas, declaró esta semana en la sesión inicial de la conferencia de la ONU esta semana: "Nosotros no apoyamos medidas que limiten sólo a gobiernos el comercio en armas pequeñas".

En lenguaje bastante directo para un foro diplomático, Bolton agregó que Estados Unidos rechaza cualquier medida internacional que intente prevenir al gobierno de George W. Bush de enviar armas a grupos insurgentes en otros países. Otro funcionario estadunidense señaló que la Casa Blanca ya está otorgando asistencia financiera a grupos armados en Irak opuestos al régimen de Saddam Hussein, y que en el pasado este gobierno ha apoyado a otros grupos armados.

Richard Boucher, vocero del Departamento de Estado, insistió este martes en Washington en que Estados Unidos cree que el problema de la proliferación de armas pequeñas es "serio", y que los gobiernos, en lo individual, pueden dar pasos para controlar el comercio ilícito de armas pequeñas. Estados Unidos, señaló, apoyó la Convención sobre Armas pequeñas de la OEA, y que el propio secretario de Estado, Colin Powell, discutió este problema durante una reciente gira por Africa.

Pero, al parecer, Powell no pudo asistir a esta conferencia de la ONU y, dadas todas las limitantes dibujadas por Bolton para que Estados Unidos apoye algún programa de acción consensado aquí, todo indica que no se avanzará mucho en el control de las armas pequeñas (500 millones circulando en el mundo, y provocando mil 300 muertos diarios, según cálculos de la ONU) cuando la conferencia concluya luego de dos semanas de que todo mundo opine sobre qué tan "serio" es el problema. Así, tal como lo señaló The New York Times hoy, Estados Unidos se une a China, India y Rusia al argumentar contra cualquier intento internacional para ampliar el control de las armas pequeñas.

Según el Banco Mundial, Estados Unidos es el comerciante de armas pequeñas (y de todas) más grande del mundo, y Bolton señaló a los representantes de los gobiernos en la ONU que el gobierno de Bush defenderá a sus fabricantes de armas. "No apoyamos medidas que limiten el comercio legal y fabricación legal de armas pequeñas y ligeras", declaró.

Cuando los reporteros le preguntaron hoy al vocero Boucher si Estados Unidos apoyaría una prohibición a la venta de armas de asalto tipo militar, como los AK-47, respondió que Washington no cree que debiera existir una norma internacional para el control de armas pequeñas. "Diferentes países van a tener leyes diferentes sobre qué puede tener la gente, qué se puede comerciar, qué puede ser vendido a diferentes grupos, qué se puede vender a gobiernos y a grupos no gubernamentales", dijo en el Departamento de Estado.

"Diría que al final el tema de si esta arma es buena, y esa es mala, no es un asunto para la conferencia (de la ONU)", concluyó.

El único rubro en que los estadunidenses están dispuestos de considerar normas internacionales es en la adopción, por cada gobierno, de prácticas para aplicar las leyes que ellos consideran suficientes en sus propios países; y, una vez implementadas esas leyes, participar en esfuerzos para controlar el tráfico ilícito de armas en apego a esa leyes promulgadas por cada país.

"Hemos trabajado con otros países para desarrollar una legislación nacional para regular la exportación e importación de armas y para aplicar mejor sus leyes", explicó el subsecretario Bolton en su discurso en la ONU. Pero, para resolver toda duda entre los delegados, Bolton también afirmó: "Estados Unidos cree que el uso responsable de las armas de fuero es un aspecto legítimo de la vida nacional".