MIERCOLES Ť 11 Ť JULIO Ť 2001

Ť Es el primer ex militar enjuiciado por pertenecer a esa internacional del crimen

Procesan al ex dictador Jorge Rafael Videla por la Operación Cóndor

Ť Detenido por robo de niños nacidos en cautiverio, este nuevo encausamiento agrava su situación

Ť Con la decisión de Canicoba Corral se frustra maniobra de la Corte Suprema para dejarlo libre

STELLA CALLONI CORRESPONSAL

Buenos Aires, 10 de julio. El ex dictador argentino Jorge Rafael Videla su-mó una nueva condena a su temible historial de crímenes cuando esta mañana el juez federal Rodolfo Ca-nicoba Corral dispuso su detención preventiva y el embargo de bienes por un millón de dólares, al ser acusado de ser "integrante de la asociación ilícita" que formaron las dictaduras sureñas en la llamada Operación Cóndor.

Aunque Videla está detenido do-miciliariamente por su responsabilidad en el robo de niños nacidos en cautiverio, hijos de desaparecidos, este nuevo procesamiento agravará su situación con la justicia y abre nuevas puertas para actuar contra los responsables intelectuales y di-rectos de la Operación Cóndor, una internacional de la muerte que se fraguó en los años 70 y parte de los 80 entre las dictaduras, grupos especiales de inteligencia y de la ultraderecha internacional.

Su objetivo, dentro de la teoría de seguridad nacional estadunidense y el marco de la guerra fría, era supuestamente la lucha anticomunista, y el resultado fue una verdadera siembra de dictaduras que dejó miles de desaparecidos, asesinados, torturados y refugiados en los países del Cono Sur.

La norma fue la aplicación del terrorismo de Estado y su consecuencia los delitos de lesa humanidad y el genocidio, que hoy es-tán siendo juzgados en países eu-ropeos, como España, donde el juez Baltasar Garzón sentó un precedente histórico.

Asociación ilícita para delinquir

En 1999 se presentó aquí una querella por parte de familiares de cinco víctimas de Uruguay, Pa-raguay y Chile bajo el patrocinio de un equipo de abogados que encabezan los doctores Alberto Pedroncini y David Baigún, quienes plantearon la figura de "asociación ilícita para delinquir en conjunto en uno u otro país", co-mo resultado de las investigaciones y los juicios abiertos por los crímenes dentro del esquema de la Operación Cóndor.

Es el primer juicio global contra el Plan Cóndor, aunque este proyecto está, de hecho, incluido en casos específicos dentro de los que se llevan a cabo en España, Italia y otros países.

Videla estaba esperando salir en libertad gracias a una acción de varios jueces de la Corte Suprema de la Nación, que estaban dispuestos a considerar "cosa juzgada" el delito de robos de niños nacidos en cautiverio, pero ahora quedó encerrado en el círculo que él mismo ayudó a crear: la coordinación criminal de las dictaduras de Argentina, Uruguay, Paraguay, Chile y Brasil.

También será procesado por privación ilegítima de la libertad, torturas, y fundamentalmente el tema Cóndor lleva a las desapariciones forzadas, delitos que no prescriben.

Varios jueces de la corte se proponían declarar como cosa juzgada el delito de apropiación de hijos de desaparecidos, como surgió aquí en algunas informaciones. Sin embargo, la resolución de Canicoba Co-rral se transforma en un muro para estos nuevos intentos de olvido e impunidad.

También será difícil para la corte, ante esta realidad, dejar en libertad a figuras como el ex almirante Emilio Massera y el ex presidente de la dictadura Reynaldo Bignone, ya que también se argumentaba que la Cámara Federal los absolvió en 1985 por el robo de niños.

El abogado Alberto Pedroncini recordó que esta nueva indagatoria completaba la anterior, ya bajo el proceso de asociación ilícita, que fue usado en el juicio contra Enrique Lautaro Arancibia Clavel, ex agente de la Dina (policía política chilena de la dictadura de Augusto Pinochet) por el asesinato del general chileno Carlos Prats y su esposa Sofía, en septiembre de 1974 en Buenos Aires.

La Dina fue considerada asociación ilícita para cometer delitos de lesa humanidad en otros países.

Videla ahora continuará preso al considerarse su responsabilidad política, en su calidad de presidente de facto, en la organización de aquel pacto criminal que significó la Operación Cóndor.

En el juicio por el asesinato de Prats la condena alcanzó no sólo al agente Arancibia Clavel (a fines del año 2000), sino que se solicitó la detención y extradición de Au-gusto Pinochet, Manuel Contreras, el temible jefe de la Dina y clave en la Operación Cóndor, y otros ex militares de ese país.

Los documentos de ese juicio han sido básicos también para Ca-nicoba Corral y el secretario Os-car Aguirre, quienes recientemente solicitaron la detención de am-bos y su extradición, como también la del ex dictador paraguayo Alfredo Stroessner, asilado en Brasilia, y cinco militares uruguayos, que conformaron la red de la Operación Cóndor.

Abogados de Stroessner se han comunicado para que el ex dictador sea indagado en su lugar de exilio, lo que podría concretarse a corto plazo.

La extraña posición uruguaya

En cuanto a Uruguay, el gobierno del presidente Jorge Batlle no pa-reció mostrar disposición para que sean detenidos los altos jefes militares responsables de desapariciones y crímenes durante su actuación aquí en Buenos Aires y reconocidos ya por los sobrevivientes de Automotores Orletti, uno de los más siniestros centros clandestinos de detención durante la pasada dictadura, entre otros.

"Se desprende que consideramos probada la existencia de este conocido operativo llamado Plan Cóndor como un hecho delictivo grave y llamamos a Videla para in-dagarlo con relación a casos es-pecíficos, cuya documentación es-tá en nuestras manos", dijo el ma-gistrado, quien pretende llevar el caso a juicio oral y público y le podrían corresponder a Videla de cinco a 10 años de prisión.

El 17 de agosto será la otra indagatoria, para lo cual se sumarán pruebas. Se espera que la presión de los familiares en Uruguay y la demanda internacional podrían modificar la posición de ese país, especialmente después de lo ac-tuado en Argentina y Chile.

La importancia de dos especialistas

Los abogados querellantes en el juicio contra la Operación Cóndor que se lleva a cabo en Argentina han reconocido ante medios locales la importancia de los documentos, testimonios y constancias probatorias por parte de dos especialista so-bre esta coordinación criminal.

Stella Calloni --corresponsal de este diario en Buenos Aires-- y Martín Almada, descubridor de los llamados Archivos del Horror en Paraguay en diciembre de 1992, fueron considerados como dos aportes de suma importancia para llegar a las conclusiones del juez Rodolfo Canicoba Corral y sus colaboradores.

La periodista aportó un cuidado resumen de antecedentes, historia, entrecruce de documentos e investigación en los archivos además de varios testimonios y datos importante para esta causa, así como la mención detallada de las principales fuentes a recurrir, incluyendo en ellas a otros colegas que han investigado esta temática.

El pasado 2 de junio, la periodista Victoria Ginzberg, de Página/12, se refirió a estos aportes citando partes de la extensa declaración de ambos.

Calloni entregó al juez los libros sobre la Operación Cóndor publicados en Argentina y México y otra serie de fotocopias de documentos importantes y de investigaciones sobre el tema.

Sus trabajos de investigación periodística también están incorporados a otros juicios en diversos países. (DE LA REDACCION)