LUNES Ť 14 Ť MAYO Ť 2001

Ť Se inaugura el miércoles en la Galería Juan Martín

Naualli, muestra de escultura y dibujo de Marta Palau

Ť La obra de la creadora, influida por el arte precolombino

MERRY MAC MASTERS

La obra de Marta Palau, ya sea escultura, instalación o dibujo, mira hacia atrás, hacia los ancestros, hacia las raíces. Para la artista es difícil vivir en México y no sentir una influencia del arte precolombino, no necesariamente la escultura, sino "todo lo que hicieron esos grandes artistas".

La palabra "naualli", que significa hechicero o brujo en náhuatl, se ha impuesto en el trabajo de Palau desde principios de los noventa. Trabajaba en una instalación para el Museo de las Américas, en Washington, y quería algo que conllevara la idea de "protección". El término "le encantó", pero decidió que naualli era "una hechicera y una mujer". A partir de entonces, "mi obra se transforma porque comienzo a trabajar con el tema de la mujer, que nunca había hecho".

Ahora, Naualli se titula la exposición de escultura y dibujo, que el miércoles 16 será inaugurada en la Galería Juan Martín, Dickens 33B, Polanco, y con la cual Palau vuelve a exhibir en forma individual en la Ciudad de México, después de ocho años de no hacerlo. Bueno, como dice la misma artista, "el problema con mi obra es que hago muchas otras cosas". Es fundadora y curadora del Salón Internacional de Estandartes, en Tijuana, proyecto que será retomado por la nueva administración del Centro Cultural Tijuana (Cecut), para 2002. También creyó y dirigió el proyecto Cinco Continentes y Una Ciudad, que se realizó de 1998 a 2000, en el Museo de la Ciudad de México.

Entre las esculturas realizadas en cerámica de alta temperatura, que llevan nombres como "recinto" o "coraza" de Naualli, se impone Guerrero caído (1999), de 60x183x42 centímetros. Sobre esta escultura/instalación, hecha con papel amatl, barro, raíces y una concha de armadillo -Palau gusta de los materiales orgánicos- , la entrevistada dice: "Es un tributo a todos los que cayeron durante las guerras absurdas del siglo pasado. En mi caso serían losMARTA PALAU guerreros republicanos en España y los de Chiapas".

Si bien Guerrero caído se asemeja algo excavado de una tumba, Palau señala, "no controlo mi trabajo, mi trabajo me controla a mí". Esta pieza digna de cualquier museo, mereció una mención de honor en el concurso Omnilife de1999.

La muestra de la Juan Martín también comprende varios de los apuntes preparatorios para el proyecto mural, Los que quedaron, que Palau inauguró en el Museo de las Californias, alojado en el Cecut, en febrero pasado. Entre todos sus proyectos, uno que le apasiona especialmente, y en lo cual trabaja desde hace varios años, es el llamado "arte ritual de Baja California". Explica: "La pintura rupestre, que era un arte ritual, me ha hecho interesarme, primero, en los que lo hicieron y desaparecieron, luego, en las etnias que quedan, que son cinco. De ahí, el nombre del mural. Tengo un proyecto muy grande de trabajar con los kumiai que son tejedores de cestas. Me voy a ir a la comunidad llamada San José de la Zorra, que está entre Ensenada y Tijuana. Ya entablé relaciones. Me hizo mucha gracia porque cuando hablé con la tejedora principal, me preguntó cómo iban a saber hacer lo que les pedía. Dije, pues, tejiéndola, porque aunque usted no lo crea, yo también tejo. Ella me decía, Ƒde veras? ƑUsted va a tejer con nosotros? Sí, me voy a sentar a tejer con ustedes si me dan oportunidad".