SABADO Ť 5 Ť MAYO Ť 2001

Ť Presentan Bohemia, su tercer disco

Lamentan Los Tres Huastecos que pocos músicos toquen huapangos

ARTURO CRUZ BARCENAS

Seis estados involucran al son huasteco y éste se defiende porque es tradición, desde que se nace hasta que muere. "Puedo escuchar otras músicas, y me gustan, de verdad, pero cuando escucho un huapango es diferente; se me pone la carne de gallina; es una emoción única, con la que dan muchas ganas de vivir", expuso Germán Meneses, guitarra y primera voz de Los Tres Huastecos, grupo integrado además por su hermano Humberto, en el requinto y tercera voz, y Manuel Fernández, segunda voz y guitarra.

Formado hace 22 años (el 27 de abril de 1979), este conjunto se ha caracterizado por interpretar el huapango, ritmo musical de la Huasteca, cuya triada de instrumentos sustancial es el violín, la jarana y la huapanguera.

Germán expresa en entrevista que es preocupante que hoy existan pocos músicos que toquen el huapango, pero asegura que no desaparecerá porque mantiene su raíz, lo cual no ha pasado con el son, que se ha ido a lo comercial, vorágine, monstruo de mil cabezas que todo lo traga.

Recuerda Meneses, en entrevista, que Nicandro Castillo, ya fallecido, es catalogado como el huapanguero mayor de México, en toda la historia, que es mucha. En la Huasteca, dice, queda mucha de la herencia de Nicandro, quien al final era un viejito parte del paisaje, infaltable.

La música huapanguera persistirá porque no ha dependido de los medios de comunicación, al contrario de la grupera, cuyo auge está ligado a su divulgación radiofónica. En la Huasteca aún se recuerda a Miguel Aceves Mejía, quien en los cincuenta recurría al falsete, característica del huapango.

ƑQué es el falsete? Germán lo define como una nota en falso con duración máxima de un tiempo. Añadió que no hay un maestro que enseñe a cantar el tal falsete, que para muchos es como desafinar. "Es melancolía pura, como en El querreque".

Expuso que La Malagueña es uno de los huapangos más famosos, el cual fue popularizado por el Trío Calavera. Pedro Infante le daba al falsete en rolas como El mil amores, pero fue David Záizar quien lo popularizó con la inmortal Cielo rojo.

Hace unos días, finales de abril, se celebró en San Joaquín, Querétaro, el Festival Anual de Huapango, donde se reunió la crema y nata de este ritmo mexicano.

Lo nuevo

Impulsores del huapango, Los Tres Huastecos ahora presentan su tercer disco bajo el nombre de Bohemia (tercero en Pentagrama), con 14 temas tradicionales y preferidas de esas noches inolvidables de música, canto, sentimientos profundos y emociones encontradas por el pasado que se niega a morir.

Cuando se reúnen noche, abandono, desamor, romanticismo y canto, se trata de gozar sufriendo con rolas como Cien años, o A medias de la noche, que en su momento cantara como nadie Lucha Villa.

Así, al huapango, Los Tres Huastecos unen otros momentos de gloria de la canción popular, como las rancheras que no morirán mientras existan cantinas, pulquerías, bares, o algún lugar donde esperar que muera o nazca el día.