MARTES Ť 24 Ť ABRIL Ť 2001

Ť El artista abrirá exposición en la Primera Imprenta de América

Mi obra abstracta la empiezo a pintar sin ninguna idea preconcebida, dice Esqueda

Ť Incluye más de cien cuadros de técnica mixta y 15 pequeñas esculturas

MERRY MAC MASTERS

En 1979 durante una estancia en San Francisco (EU), y a manera de un ''desahogo'' ante las ''porquerías'' que veía en las galerías y en los museos, el artista figurativo Xavier Esqueda pintó un cuadro con seis páneles emulando los ''lugares comunes'' de la pintura abstracta. La media docena de clichés era atravesada por un brochazo, al final del cual pintó una brocha ''muy realista''.

esqueda-pintor-2De momento allí quedó su incursión en lo abstracto. Esqueda continuó su pintura con estilo ''ecléctico'', por las múltiples influencias recibidas y desarrollando lo que él mismo califica de pintura ''metafísica''. Con el paso del tiempo, y a fin de utilizar los sobrantes de pintura que le quedaban en la paleta, empezó a realizar obra abstracta por sus ''ganas'' de jugar, experimentar, en fin, hacer cosas nuevas. Autor de una pintura ''lisa'', ahora quiso trabajar las texturas.

Acerca de su ''enojo'' de hace más de dos décadas, Esqueda aclara que hay pintores abstractos que le gustan como Kandinsky, el ''rey''; luego Klee y, en México, Vicente Rojo, Manuel Felguérez, Ignacio Salazar y ''desde luego, Gunther Gerzso que es fabuloso''.

Ahora el artista dará a conocer su trabajo abstracto. La exposición Xavier Esqueda. Un homenaje, de más de un centenar de pinturas de técnica mixta y alrededor de 15 pequeñas esculturas -es la primera vez que trabaja en bronce-, realizadas entre 1995 y 2000, será inaugurada el 3 de mayo, a las 19:00 horas, en la Casa de la Primera Imprenta de América, Licenciado Primo de Verdad 10, Centro Histórico. La Universidad Autónoma Metropolitana, donde dice que lo tratan ''muy bien'', también le editará el primer libro acerca de su producción. El volumen incluye una introducción de Luis Carlos Emerich, una selección de lo abstracto y una antología de su obra a partir de 1965.

--¿A qué se debe el formato más pequeño?

?Por llevar lo contrario. Los abstractos casi siempre trabajan en formatos más grandes. Por otro lado, pues, es que son experimentos. Ya no pienso pintar en grande, es un problema. Es obra que no se vende y difícil de almacenar. Además, ¿para qué tan grande? Cuando es uno joven piensa que todos los museos van a adquirir la obra y eso no es cierto. Entonces, pinta uno muy grande, pero ya se me hace problemático.

Pauta sin idea preconcebida

Esqueda antes tardaba hasta dos meses en cada gran pintura ''metafísica'', al ser obras ''muy elaboradas'', además el óleo tiene que secarse. La pintura abstracta, en cambio, es ''mucho más rápida'' porque ''no tiene que parecerse a nada. Entonces, no se sabe si hay errores o no, porque eso no cuenta. Hay accidentes que luego uno elabora''. Tampoco hay dibujo. Ni siquiera para sus cuadros figurativos hace bocetos, si no dibuja directamente sobre la tela. Respecto de su obra abstracta, ''a veces empiezo a embarrar la tela sin ninguna idea preconcebida. Eso me da la pauta para seguir. En un cuadro figurativo la idea tiene que estar muy fija, sobre todo para la composición. Lo abstracto es más espontáneo''.

--¿Cuál sería el vínculo entre tu obra figurativa y la abstracta?

--En primer lugar el colorido. No uso muchos colores, pero sí los que son intensos. A veces los fondos que van desvanecidos en tono, esos pueden ser los vínculos. Trato de usar todos los colores pero creo que predominan el azul -seguramente por dar la sensación de espacio- y el rojo, pero nunca como salen del tubo. Siempre hago mezclas, sutilezas con el color. El violeta, por ejemplo, no es un color que acostumbro, pero tengo que emplearlo para ver cómo resuelvo los colores. Claro, cada cuadro nunca tiene muchos colores. Me limito a dos o tres con sus gamas.

Su pintura abstracta no es lo más reciente de su obra: ''Llevo casi un año de hacer otra cosas diferente entre abstracto y figurativo. Antes reprimía las ideas por seguir un solo estilo, pero ya no. Ahora hago lo que se me ocurre sin pensar que debo hacer un estudio completo o una serie específica. Hago lo que se me viene en mente''.