JUEVES Ť 29 Ť MARZO Ť 2001

Ť El chileno Fabián Estay desperdició la oportunidad de anotar

Ni un penal salvó al América; 0-0 ante Tigres

21af2.jpgEl América y los Tigres de la U de Nuevo León le dieron la espalda anoche al buen futbol y ni un cuestionable penal que marcó el árbitro Marco Antonio Rodríguez pudo superar el 0-0 en el estadio Azteca, en la continuación de la jornada 13 del torneo de Verano 2001.

Con este resultado, los capitalinos llegaron a 18 puntos, mientras los regiomontanos alcanzaron las 15 unidades.

En el primer tiempo, los que se animaron a ir al Coloso de Santa Ursula bien podrían preguntarse qué hicieron para merecer el pobre espectáculo.

Por el lado de ambos había notables ausencias, como la de Zamorano y Rojas, por los anfitriones, y de Hurtado por Tigres, pero las pesadas nóminas no justificaban ese ir y venir estéril, esa ausencia de pases hilvanados, de buen trato al balón y el día de campo de los porteros Adolfo Ríos y Rogelio Rodríguez.

Lo único bueno de la primera parte fue escuchar el silbatazo de Marco Antonio Rodríguez al decretar el descanso.

El complemento resultó menos insufrible. Al menos hubo más voluntad por ir a inquietar al marco rival.

Una falta más clara dentro del área, de Antonio Sancho sobre Jesús Mendoza, no se atrevió a marcarla el silbante, por lo que los americanistas perdieron la posibilidad de inaugurar el marcador.

Mendoza, además de la falta, se llevó una amonestación, porque el nazareno pensó que trató de engañarlo con un clavado.

Tigres tuvo una buena reacción y a punto estuvo de levantar una buena cosecha.

Carlos Ochoa desperdició la mejor opción de los visitantes, cuando recibió un largo pase y al encarar al portero Ríos mandó su disparo a un lado del marco.

Después, Antonio Sancho se animó a tirar desde fuera del área, pero esta vez el lance de Ríos fue más que acertado.

La igualada sin anotaciones parecía más que cantada. Tigres empezó a reforzar su defensa para no regresar a casa con las manos vacías, pero al minuto 86 todo pareció derrumbarse.

Un remate de Mendoza fue rechazado por el zaguero David Oteo, cuando su portero ya estaba vencido y, aunque la mano no fue nada clara, el árbitro decretó la pena máxima y la expulsión de Oteo. Inútiles fueron las protestas de Suárez, Sancho, Vázquez y compañía.

Todo estaba servido para los de casa. El chileno Fabián Estay no tomó mucho vuelo a la hora de cobrar el penal y su tiro suave hacia la derecha del portero Rodríguez fue atajado sin mayor problema. Así se perdió la inmejorable oportunidad y el justo 0-0 se concretó.