MIÉRCOLES Ť 14 Ť MARZO Ť 2001

Ť Requiere aprobación de la directiva: abogados

Formal e institucionalmente posible, la presencia de zapatistas en el Congreso

La intervención de alguno de los delegados zapatistas en la tribuna de la Cámara de Diputados, "es formal, material e institucionalmente posible", porque además de no reñir con el funcionamiento del Poder Legislativo, ciudadanos que no son diputados o senadores, como los secretarios de Estado, han utilizado ese espacio, y sólo es necesario que la Junta de Coordinación Política (JCP) lo apruebe, concluyó un grupo de abogados a los que consultaron los grupos parlamentarios del PRD en el Congreso de la Unión.

A raíz del debate que generó la propuesta de las bancadas priístas para que uno de los delegados del EZLN envíe un mensaje desde la tribuna, el propio partido solicitó a un grupo de expertos juristas sobre la legalidad de ese hecho.

Ayer, el equipo de abogados respondió que ello es posible y no rompería con el principio de legalidad parlamentaria, "si los órganos internos (del Congreso de la Unión) autorizan la intervención" de uno de los comandantes zapatistas.

La Junta de Coordinación Política, concluyó, tiene derecho a presentar a la mesa directiva y al pleno proyectos de puntos de acuerdo, pronunciamientos y declaraciones, por lo que la directiva del Congreso "puede dar permiso para que los miembros del EZLN tengan acceso al recinto parlamentario. De ahí que la participación zapatista es válida y apegada a derecho".

Con la aprobación de la junta, dijo, la directiva del Congreso estaría facultado para salvaguardar el fuero constitucional de los diputados y senadores, así como la inviolabilidad del recinto parlamentario.

El documento, de tres cuartillas, refiere que con base en los artículos 6, 39, 30 y 70 de la Constitución, se reconoce un principio de autonomía parlamentaria que le permite regular su ámbito de gobierno, y que si bien no está previsto que ninguna persona que no sea integrante de las cámaras de Diputados y Senadores, "sí es compatible con el sentido institucional democrático y representativo del régimen de gobierno mexicano".

Es decir, explica, la naturaleza de los legisladores es representar a la sociedad, y por lo tanto "deben mantener un contacto estrecho y permanente" con ésta, sobre todo si el asunto a ventilarse impone la exigencia de auspiciar y formalizar "una intervención eventual de sujetos extraparlamentarios directamente afectados por, o interesados en una medida o acto sujetos a debate, discusión y aprobación".

El Poder Legislativo, añade, es el espacio natural de discusión, debate y formación de opinión pública, "con lo que es consustancial a los parlamentos, que intervengan y sean escuchados por ellos ciudadanos y no sólo diputados y senadores".

A partir de los mismos artículos, los abogados señalan que existen los instrumentos formales para autorizar la intervención de los zapatistas. Estos, además, estarían "ejercitando un derecho público subjetivo de libertad de expresión dentro de los límites que demarca el órgano parlamentario a quien se destina la intervención".