* Podría acudir a la Corte Internacional de Justicia
Recurso judicial belga contra la posible liberación de Pinochet
* Los demandantes exigen conocer el informe médico británico
Ap, Dpa, Afp y Reuters, Londres, 25 de enero * Bélgica presentó este martes un recurso judicial contra una posible liberación por parte de Gran Bretaña del ex general Augusto Pinochet, y sugirió que podría acudir a la Corte Internacional de Justicia de La Haya, lo que causó sorpresa en el gobierno de Chile.
El gobierno belga presentó su recurso ante la Alta Corte, el más alto tribunal civil londinense, luego de que seis organizaciones defensoras de los derechos humanos fincaron la víspera sus propios recursos ante el alto tribunal británico, previendo que el ministro Jack Straw pueda tomar su decisión en cualquier momento.
Los demandantes exigen conocer el informe médico sobre la salud del ex dictador, que mandó hacer el gobierno británico, y la práctica de una nueva evaluación médica independiente.
Bélgica quiere que en un nuevo examen intervenga un médico belga, a fin de aclarar si el detenido está realmente incapacitado para ser sometido a proceso.
De hecho, tanto los gobiernos europeos que reclaman en extradición a Pinochet como los organismos humanitarios quieren saber si el ex gobernante de facto está afectado de sus facultades mentales, que se estima sería la única razón válida que le permitiría eludir la justicia ante los graves crímenes cometidos durante su gobierno.
Ante esta nueva situación, la Alta Corte tiene programado celebrar una audiencia este miércoles para decidir si considera las solicitudes. Y en caso de darles entrada, que los analistas consideran muy difícil, probablemente fijaría una audiencia formal para la próxima semana.
En este interín, el Ministerio del Interior británico dijo que "ninguna decisión es esperada antes del fin de semana" por parte de Straw, quien posee facultades para determinar si confirma o no su intención de liberar al militar por razones de salud, como anunció el 11 de enero.
El abogado británico Richard Stein, que representa al gobierno belga, no descartó que Bruselas acuda a la Corte de La Haya para pedir que prohíba a Straw poner en libertad a Pinochet y lo obligue a revelar el contenido del informe médico que le mandó practicar.
El portavoz de la cancillería belga, Michel Malherbe, indicó que "por el momento" no está en la orden del día acudir a la Corte Internacional de Justicia y que aún se está en tiempo de estudiar las opciones a seguir.
Amnistía Internacional, que junto con otros cinco organismos humanitarios presentaron un recurso similar ante la Alta Corte británica, apuntó por conducto de Andy McEntee que "Straw nos pide presentar argumentos de por qué debe llegar a una conclusión distinta, pero no deja ver en que basó su decisión".
Kenneth Roth, de Human Rights Watch, señaló que es indispensable determinar si la evidencia demuestra no sólo que el también senador vitalicio es un hombre viejo y enfermo sino, como lo requieren las leyes británicas, si es incapaz de comprender el procedimiento en su contra y de contribuir a su propia defensa.
El gobierno chileno expresó su molestia por los nuevos esfuerzos por bloquear el regreso a su país de Pinochet, e hizo saber al embajador belga en Santiago, Johan Balegeer, que "estamos desconcertados y sorprendidos", a decir del vicecanciller Mariano Fernández.
Este funcionario insistió en que Chile es el mejor lugar para enjuiciar al ex dictador, y señaló que si comienza una serie de nuevas apelaciones "entraríamos a una fase compleja" que podría dilatar aún más la estancia en Londres del anciano ex general.
Más aún, en diversos sectores chilenos también causaron malestar versiones de la prensa española en relación a que Pinochet padece "demencia senil", cuya anormalidad sería en la que se apoyaría Jack Straw para negar su extradición a España y permitir su liberación.
Mientras, el presidente electo Ricardo Lagos se reunió por primera vez con altos mandos de las fuerzas armadas, al hacerlo con los jefes de la armada y de la fuerza aérea, almirante Jorge Arancibia y general Patricio Ríos, respectivamente, reportó el corresponsal Enrique Gutiérrez.
Durante la víspera Lagos se entrevistó con el comandante en jefe del ejército, general Ricardo Izurieta, y en ese marco el presidente electo expresó su confianza en que tendrá "muy buenas relaciones" con las fuerzas armadas, y los altos mandos descartaron conflictos por el origen socialista del próximo mandatario, le expresaron su respaldo y le desearon éxito.