* Rosario Robles: la capital no puede ser marginada por razones políticas


Interpondrá otra controversia el GDF si se le excluye del ramo 33

* En la ciudad tenemos problemas de pobreza y requerimos recursos para combatirla, aseveró

Laura Gómez Flores * La jefa de Gobierno del Distrito Federal, Rosario Robles Berlanga, adelantó que si la ciudad no recibe los recursos considerados en el ramo 33, de combate a la pobreza y fortalecimiento municipal, correspondientes al año 2000, interpondrá una nueva controversia constitucional ante la Suprema Corte de Justicia de la Nación.

La ciudad, precisó, "no puede ser excluida o marginada por razones políticas, pues más allá de lo que vemos de repente en las campañas, aquí hay trabajo, hay hechos, realidades y tienen que ser reconocidos institucionalmente por todas las instancias del gobierno federal, aun cuando se cuenta con un fondo nuevo para entidades impulsado por los once gobernadores de oposición".

En el contexto de una gira de trabajo por la delegación Tlalpan, comentó que hasta el momento la ciudad no está considerada en las participaciones del ramo 33, pero "de aquí al martes daremos un último estirón para convencer al Congreso de la Unión y al poder federal de que tenemos problemas de pobreza y requerimos recursos para combatirla".

Ante ejidatarios que recibieron incentivos por un total de 2.2 millones de pesos, Acompa–ada del secretario de Medio Ambiente, Alejandro Encinas, y del delegado Salvador Mart’nez della Rocca, la jefa de Gobierno realiz— una gira de trabajo por la delegaci—n Tlalpan n Foto: Francisco Olvera la mandataria local dijo que estas comunidades son las que más entienden que debemos luchar por dichos recursos para fortalecer su infraestructura social, por ello "somos sus representantes y su voz, una voz que está clamando por justicia, por equidad para esta ciudad que está diciendo que no puede ser excluida o marginada por cuestiones políticas".

A la fecha, agregó, "se ha dado una pelea muy fuerte ante los poderes Legislativo y federal; una pelea por más recursos para la ciudad, para apoyar a los habitantes capitalinos, y que se ha ganado en una parte, porque logramos demostrar que esta ciudad, que le aporta tanto al país, requiere de más apoyos y se invierta en ella lo que verdaderamente produce".

Ello, a pesar de que está la creación de un fondo nuevo para entidades impulsado por los once gobernadores de oposición, y beneficiará al Distrito Federal, por lo que de no obtener los recursos de combate a la pobreza y fortalecimiento municipal se interpondrá una nueva controversia constitucional, indicó.

Cabe señalar que el gobierno capitalino interpuso un recurso constitucional al no estar considerada la ciudad en las participaciones ejercidas este año, mismo que no ha sido resuelto.

Durante su gira de trabajo por la delegación Tlalpan, mencionó asimismo que para el año 2000 se deben replantear las prioridades y voltear los ojos de la ciudad, no sólo del gobierno, elevando la mirada hacia los habitantes de zonas rurales, a los que "les debemos mucho y que tradicionalmente y durante muchos años fueron olvidados, marginados y no han recibido los beneficios del crecimiento y desarrollo de la ciudad".

Las grandes obras monumentales, por ejemplo, acaparan la visita hasta de altos personajes y la presencia de los medios de comunicación, mientras obras que benefician a algunos pobladores no tienen ni el apoyo, ni la visibilidad ni la presencia correspondiente justamente a esta gran tarea.

Por ello, la obligación de esta administración es apoyar todavía en mayor medida no sólo toda su labor de rescate de áreas verdes, de fortalecimiento de la actividad forestal de las ya pequeñas empresas productivas, sino también de la labor agrícola productiva que se realiza en muchas de estas comunidades, sobre todo ante la presión tan fuerte porque crezca la mancha urbana.

En este sentido, el secretario de Medio Ambiente, Alejandro Encinas, dijo que pocos reconocen la importancia de mantener las áreas verdes y sus implicaciones en el futuro de la ciudad, pues de cada hectárea de suelo que se pierde se deja de suministrar 2.5 millones de litros de agua al acuífero citadino, cuyo abastecimiento representa la erogación de entre 15 y 20 millones de pesos anuales.