Chihuahua, Chih., Vamos muy bien. Está creciendo el país, estamos bien y de buenas, como México no hay dos, respondió en breve entrevista el presidente Andrés Manuel López Obrador después de que Standard and Poor’s cambió de estable a negativa la calificación de la deuda emitida por el gobierno mexicano, con probabilidad de que sea degradada en los siguientes 12 meses.

El titular del Ejecutivo federal visitó el estado para entregar los primeros apoyos del programa Tandas para el Bienestar. El gobernador Javier Corral fue repudiado por miles de asistentes a la Plaza del Ángel, y ante los incesantes abucheos y rechiflas para el mandatario estatal, López Obrador expresó que merecen más respeto los opositores que los abyectos.

Agregó que Corral está en su derecho a disentir y se le va a respetar siempre. A Chihuahua, afirmó, nunca le van a faltar los recursos que por ley le corresponden y no habrá ninguna represalia, nada de que el gobernador está cuestionando al Presidente y que por eso va Chihuahua a desatenderse. No, eso no lo vamos a hacer nunca, jamás. Luchamos mucho tiempo como opositores y nos hacían muchas cochinadas... no somos iguales, no somos lo mismo. Nada de odios, nada de rencores, tenemos que unirnos todos para sacar adelante a nuestro querido México, subrayó.

El repudio para el gobernador panista se dio desde que arribó a la plaza acompañando al Presidente desde el aeropuerto, quien apenas lo saludó cuando se encontraron. Consignas como ¡Fuera Corral, fuera Corral! y Corral decía que todo cambiaría: ¡mentira, mentira, la misma porquería! fueron una constante en el acto público, en el que según los organizadores hubo más de 10 mil asistentes.

Ese ambiente adverso hizo que el mandatario estatal, quien impulsa la conformación de un grupo de contrapeso al gobierno federal, no diera discurso de bienvenida, como se acostumbra en una visita presidencial. El titular del Ejecutivo federal, en tanto, se negó a opinar, a su llegada al aeropuerto de esta ciudad, sobre ese grupo: No vengo a hablar de eso.

En su discurso en la explanada, López Obrador reiteró su llamado a la unidad y señaló que tiene que ser la Cuarta Transformación para la reconciliación nacional. Tenemos que unirnos, ya pasó la campaña. Los partidos, como su nombre lo indica, son una parte, el gobierno es de todos. Por eso tenemos que respetar a todas las autoridades, no sólo porque así está en la Biblia; los religiosos saben a lo que me refiero, también los laicos y los libres pensadores, aseguró mientras continuaban las muestras de rechazo para Corral.

Tenemos que respetar a las autoridades, sobre todo si son legítimas, surgidas de procesos democráticos. Cuando elige el pueblo se tiene que respetar a la autoridad. Por eso nuestro respeto absoluto, sin condiciones, al gobernador de Chihuahua, Javier Corral Jurado, expresó, lo que dividió a los asistentes, pues mientras unos aplaudieron, otros abuchearon.

Podemos tener diferencias, porque eso es la democracia: es pluralidad, no es pensamiento único, insistió. Si Javier Corral hace un cuestionamiento al Presidente o al gobierno federal, está en su derecho a disentir y se le va a respetar siempre.

Tras enumerar los apoyos sociales y especificar que con las Tandas para el Bienestar se dará un millón de pequeños créditos de 6 mil pesos, sostuvo que al contrario de lo que nuestros adversarios decían, los especialistas, los llamados expertos, que se nos iba a caer la recaudación con la disminución de impuestos en la zona libre en la frontera norte, tengo los reportes: estamos recaudando más de lo que se recaudaba el año pasado.

También reiteró que no hace falta endeudar al país: Les digo a los financieros que estén tranquilos porque no va a haber déficit. No vamos a gastar más de lo que ingrese a la hacienda pública. Va a haber disciplina financiera, disciplina administrativa.

Por la tarde, López Obrador tomó otro vuelo comercial a Hermosillo, Sonora, donde lo recibió la gobernadora Claudia Pavlovich y una mujer seri le hizo un ritual de bienvenida. Su salida de este aeropuerto se dio enmedio de un tumulto. Luego encabezó un acto público en el estacionamiento de la unidad deportiva de la Universidad de Sonora, con la participación de miles de personas y donde hubo abucheos para la mandataria priísta.