No basta revelar sólo números
Es necesario reconstruir los hechos para ofrecer una verdad histórica, advierte el ex cura
Sábado 23 de febrero de 2019, p. 30
Reconocer la existencia de casos de abuso sexual a niños por parte de sacerdotes de la Iglesia católica y prometer medidas concretas contra la pederastia, no significa que el pasado haya dejado de existir, por lo que es necesario reconstruir el entramado mediante el cual fueron encubiertos los depredadores para proteger la imagen de la institución y garantizar la verdad histórica de cada historia, consideró Alberto Athié Gallo, ex cura y defensor de derechos humanos.
En el Vaticano líderes católicos de todo el mundo se reúnen en una los casos de abuso infantil por parte de integrantes de esta institución. El papa Francisco ha prometido medidas concretas
para poder erradicar este crimen.
Cero tolerancia, ofrece el papa Francisco
En entrevista telefónica desde Roma, Italia, el activista mexicano –reconocido por su lucha por denunciar los abusos del fundador de los Legionarios de Cristo, Marcial Maciel Degollado– recordó que el papa Francisco ha reiterado una política de cero tolerancia en contra de la pederastia clerical. Ello significa entregar todas las listas de todos los depredadores en todos los países a las autoridades competentes
, indicó.
Expresó que los números genéricos no sirven para identificar ni dar seguimiento a quienes cometieron dichos delitos. Afirmó que los listados están en poder del Vaticano y las diócesis por lo que solicitó sean entregados a las autoridades competentes para que sean procesados. Sobre aquellos casos que pudieron haber prescrito, destacó la necesidad de reconstruir los hechos para ofrecer una verdad histórica.
“Olvidar el pasados es lo peor que podemos hacer para la no repetición (…) Hay que enfrentar el pasado con espíritu humano, hay que asumirlo, así como la responsabilidades que ello implica”, advirtió el también integrante de la no gubernamental internacional Ending Clergy Abuse (ECA, Fin al Abuso Clerical).
Consultada por separado, Aidé García, coordinadora de Relaciones Interinstitucionales de Católicas por el Derecho a Decidir, celebró el reconocimiento de la Iglesia de los abusos, tanto de niños como de monjas, por parte de clérigos. Por las víctimas esperamos que esta cumbre sea fructífera
, destacó.
No obstante, mostró preocupación porque esta práctica ha persistido por varios años, así como el encubrimiento a los perpetradores. Incluso, destacó, las religiosas han sufrido discriminación, maltrato y revictimización.
Hemos hecho un llamado a los presidentes de las Conferencias episcopales y a los representantes de las distintas instancias eclesiales que se han unido en Roma
para que se transparente el listado de los abusadores y sean llevados ante la justicia civil.
Agregó que la no gubernamental solicita también la modificación del Derecho Canónico en el cual se considera el abuso sexual como una ofensa contra la moral, mientras es un delito en la justicia civil.
Asimismo, expuso la necesidad de que los compromisos que sean adoptados se traduzcan en mecanismos que otorguen garantías de seguridad y derechos a las personas dentro de su comunidad religiosa.