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Tener empatía con los migrantes, pide fotógrafa

Lourdes Almeida expone en París una visión ‘‘humana y original’’ de la odisea de viajar de México a EU

 
Periódico La Jornada
Martes 13 de noviembre de 2018, p. 6

París. En el mes de la fotografía de París Paris Photo, el Instituto Cultural de México en Francia inauguró la exposición Frontera, una visión ‘‘humana y original’’ de la odisea de los migrantes mexicanos tomada por Lourdes Almeida.

Una selección de 90 fotografías, de un total de 3 mil, componen la muestra curada por la francesa Christine Frérot, especialista en arte mexicano y latinoamericano, en la que tienen especial protagonismo las imágenes de los zapatos que dejan la huella humana de los pasos de los migrantes hacia la frontera norte de México.

Panorámicas del desierto, del muro, retratos de migrantes, montajes, instantáneas de la frontera de México y Estados Unidos, articulan una muestra sin pretensiones documentales, con la que Almeida invita a sus visitantes a tener ‘‘empatía” con los migrantes.

‘‘No soy documentalista. Mi idea era hacer fotografía que te hiciera tener esa idea de cómo podemos tener empatía con los migrantes mexicanos que cruzan el desierto a pie, que es dolorosísimo el tema porque muchos mueren en el intento”, dijo Almeida, en entrevista.

‘‘Mi idea era sensibilizarnos a todos, preguntarnos más bien por qué tienen que emigrar, el tener empatía, el pensar que lo logren, que ojalá encuentren su Eldorado o forma de vida” añadió. Para la exposición entrevistó y fotografió a decenas de migrantes en los dos lados de la frontera entre 2015 y 2017.

El embajador de México en Francia, Juan Manuel Gómez Robledo, inauguró la exposición en el Instituto Cultural de México, ubicado en el corazón de la capital francesa, que inevitablemente interpelará sobre la cuestión de los migrantes a sus visitantes, pese a que se evitaron las fotografías más duras.

‘‘La mera exposición suscita interés sobre este tema, no piedad, empatía con el problema de la migración’’, explicó Frérot, la curadora de la muestra, que tiene como cartel a una mujer que logró cruzar la frontera, Minga, muy entrañable para la fotógrafa.

En las fotografías de Almeida ‘‘no hay sensacionalismo, no hay miserabilismo, es una captación de la realidad con una confianza muy fuerte que ella supo establecer con la gente que fotografiaba. Me entusiasmó este trabajo no sólo por la calidad de las fotos, sino por la humanidad de la mirada de Lourdes”, añadió Frérot.

El tema de la caravana de migrantes centroamericanos, que viaja actualmente hacia Estados Unidos, fue mencionado durante la inauguración de la muestra montada en París que concluirá el 24 de enero.

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▲ Lourdes Almeida, en el Instituto Cultural de México en Francia, donde abrió su muestra Frontera. Foto Eunice Chao

‘‘Es un tema oportuno, pero no oportunista”, aclaró la curadora de esa exposición que terminó de prepararse antes de la caravana.

‘‘Mi idea es sensibilizar y humanizar a las personas como yo, a no tener miedo de los migrantes, tener empatía. Ahorita con esta caravana se desató una ola de xenofobia. Es gente que está huyendo de la violencia más que de la miseria”, dijo Almeida al subrayar que todos venimos de parientes migrantes.

Frontera, exhibición en Paris Photo

En la muestra, las fotografías de zapatos de los migrantes o los montajes con esta prenda abundan y dan un toque personal a la visión de Almeida sobre un tema muy retratado: la migración fronteriza entre México y Estados Unidos.

‘‘Es una prenda muy significativa y que tiene muchas lecturas, que es polisémica y según tu información le puedes dar mucha información al zapato. La mayoría de mis fotografías construidas están tomadas con los zapatos de la gente que entrevisté, no con los zapatos que encontré en el desierto”, explicó Lourdes Almeida.

‘‘Se quitaban los zapatos para que yo los pudiera retratar”, precisó Almeida, al relatar que entrevistó a los migrantes y simpatizó con ellos para pedirles permiso para retratar su calzado, una idea con la que trabaja desde hace 18 años.

‘‘Lourdes se ganó su confianza, se lo consintieron, no son fotos robadas, son fotos autorizadas’’, dijo Frérot.

Anecdóticamente algunas de las mujeres portaban botas o incluso zapatos de tacón, que pueden ser mejores que los tenis porque éstos se derriten con el calor del desierto, refirió la fotógrafa.

‘‘Exponer en la capital francesa es un gran privilegio y dentro de Paris Photo es una gran ventana, una gran proyección, muy importante”, celebró la fotógrafa mexicana, alumna de un curso del maestro Manuel Álvarez Bravo y muy recordada por su serie de retratos de familias mexicanas.

La exposición fue patrocinada por las secretarías de Relaciones Exteriores y de Cultura de México, la Agencia Mexicana de Cooperación Internacional para el Desarrollo y el Fondo Nacional para la Cultura y las Artes.