El secretario de Comunicaciones y Transportes (SCT) del próximo gobierno que inicia el primero de diciembre, Javier Jiménez Espriú, rechazó en el Senado que la consulta sobre la ubicación del Nuevo Aeropuerto Internacional de México (NAIM), en Texcoco o en la base Militar de Santa Lucía, sea simulada, que pudiera haber fraude o inhibir la inversión en el país.

¿Cómo va a ser simulada?, no aceptamos eso, respondió, al inicio de una reunión con los senadores de Morena. Al final, expuso que respondió a dudas de los legisladores sobre las dos opciones que se planten en la consulta a la ciudadanía que se iniciará este jueves, la obra ya iniciada en Texcoco o la base de Santa Lucía.

De acuerdo con legisladores asistentes al encuentro, el próximo titular de la SCT respondió a cuestionamientos y dudas sobre la viabilidad de Santa Lucía o los costos que supone parar la obra en Texcoco.

En entrevista, Jiménez Espriú recalcó que ambas opciones son viables y que en caso de que la ciudadanía opte por que el nuevo aeropuerto sea en Santa Lucía, el gobierno de Andrés Manuel López Obrador honrará su palabra y pagará la inversión ya hecha en Texcoco.

La consulta, insistió, es parte de la democracia participativa que López Obrador pondrá en marcha, por lo que, no veo por qué debiéramos arrepentirnos.

Aclaró que en forma alguna dará línea a los legisladores. Con ello coincidió el coordinador de Morena, Ricardo Monreal. Dijo que los senadores están allegándose los mejores elementos para decidir, sin que haya ninguna orientación o línea.

Por separado, el presidente del Senado, Martí Batres, descartó que pudieran surgir problemas financieros si la opción ganadora fuera Santa Lucía. Habrá certidumbre, he escuchado opiniones interesantes, incluso de quienes tienen que ver con el sector privado, entre ellas de los empresarios Carlos Slim y Miguel Alemán Velasco.

Expuso que participará en la consulta como cualquier ciudadano y su voto será en favor del sistema de aeropuertos formados por Toluca, Ciudad de México y Santa Lucía”, y el hecho de que otros legisladores se inclinen por la opción de Texcoco sólo demuestra la libertad de opinión.