La degradación de la zona núcleo de la reserva de la biosfera Mariposa Monarca descendió de 15.8 a 6.7 hectáreas este 2018, lo cual representa una caída de 57.6 por ciento.

Sin embargo, aun así, la tala clandestina creció, al pasar de 0.6 hectáreas a 1.4, y la sequía provocó daños, reportó el monitoreo forestal realizado por la Alianza WWF-Fundación Telmex Telcel, la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (Conanp) y el Instituto de Biología de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).

Detalló que en el ciclo correspondiente a febrero de 2017 y marzo de 2018, se dio esa caída, en comparación con el periodo 2016-2017.

Además de la tala ilegal, la degradación se puede dar por efectos naturales o por la presencia de plagas.

La destrucción ilegal se observó en la comunidad San Felipe de los Alzati, en el municipio de Zitácuaro, Michoacán, donde un debilitamiento de la cohesión social provocó la tala de 1.2 hectáreas. También la sequía que afecta a la región desde hace varios años provocó estragos en 3.9 hectáreas, casi el triple que en el periodo anterior, a lo que se suman 1.4 hectárea en las que se realizaron trabajos de saneamiento forestal.

La poda forestal disminuyó debido a que no hubo tala clandestina a gran escala, se terminaron los impactos derivados de las tormentas de 2016 y no se produjeron nuevos eventos climáticos.

Es indispensable no bajar la guardia

Desde 2009 se ha logrado una reducción significativa de la tala clandestina gracias al compromiso de los ejidos y comunidades indígenas, los esfuerzos de vigilancia y el pago por servicios ambientales. Es indispensable no bajar la guardia y trabajar también en el desarrollo de las comunidades locales, dijo Jorge Rickards, director general de WWF México.

La reserva de la mariposa monarca abarca 56 mil 259 hectáreas que incluyen las 13 mil 551 de zona núcleo, se encuentra entre Michoacán y el estado de México, pues ahí se encuentran los bosques prioritarios para la hibernación de los lepidópteros ditrisios, que viajan más de 4 mil kilómetros desde Canadá y Estados Unidos al país, para pasar el invierno.

La reserva también alberga 132 especies de aves, 56 de mamíferos, 432 de plantas vasculares y 211 de hongos. Estos bosques además infiltran agua al sistema Cutzamala para más de 4.1 millones de personas en Ciudad de México y su zona metropolitana.